La escena primordial: ¿Qué observa Manuel bajo las sábanas?
La escena primordial es la fantasía de la relación sexual entre los progenitores, que a su vez lleva el sello de la exclusión. Esta escena fue una de las primeras experiencias que generaron en la psique de un adolescente un caos, proyectando en el deseo de matar o morir. Bajo este supuesto se explica la expresión lo delirios y fantasías de un joven de 13 años, Manuel, que acude a psicoterapia al centro de servicios psicológicos “Dr. Guillermo Dávila” ubicado en la Facultad de Psicología, UNAM. La escena primordial es uno de los muchos puntos de análisis en el caso del joven puesto que se presenta a terapia con un historial clínico bastante denso y con distintos diagnósticos previos, los cuales son abordados a profundidad en la tesis “Manuel: matar o morir” de su psicoterapeuta, Villanueva.
Manuel, un adolescente que acude a psicoterapia debido a deseos homicidas y suicidas, a lo largo de las sesiones terapéuticas describió un recuerdo vivido de su primer y segundo año de vida en el que observó a sus padres teniendo relaciones sexuales, lo que generó en él curiosidad. Comenta haberlos visto debajo de las sábanas mientras él los alumbraba con una lámpara pequeña. Para poder comentar dicha situación primero le hizo un “chiste” al terapeuta en el que un padre le pega a su hijo, dejándole un ojo morado, al percatarse que lo estaba viendo teniendo sexo con su madre.
En esta escena primordial Manuel se coloca en un rol activo, como voyerista, lo que desencadena dos cuestiones. Primero, elabora la escena mediante su apropiación (con chistes o visualizándose con una lámpara). Esto se debe a una función normal de la psique además de que la pulsión de vida liga la experiencia sobre el control propio. Por otra parte, le genera sentimientos de culpa que externaliza mediante expresiones elaboradas (dibujos y una canción) con los cuales él se apropia de la escena primordial y éstas presentan la amenaza y el castigo. Es por eso que al recordar dicha escena el superyo le atribuye displacer.
Manuel atribuye a un deseo propio la compulsión de la escena, a un goce que presenta como reprimido (cuando presenciaba la escena tenía erecciones, al recordarla le da asco). La culpa se genera por admitirse como parte activa de un ejercicio que sabe que representará afectos prohibidos y displacenteros, situación que aún así se ve superado por la compulsión de la repetición, debido a la intensidad de los afectos, expresando un sádico superyó.
Los recuerdo de esta etapa de la vida deben pensarse, según Freud, como recuerdos encubridores. El terapeuta de Manuel, Villanueva (2018), refiere que lo que el paciente en cuestión revela es
“Las escenas sexuales de su infancia despiertan una excitación tan alta que deviene en catastrófica, que imposibilita su tramitación, la vivencias de violencia física se anudan la desarrollo psicosexual, el superyo relaciona ambas vivencias tratando una como consecuencia de la otra; en el intento apoderarse de estas vivencias se posiciona en un papel activo y espera un castigo”
En otro extremo hay una consecuencia contraria, la perversión. La Manuel realizaba elaboraciones como “chistes”, en ocasiones eran acciones, por ejemplo, sacarse los mocos o echarse pedos pero había ocasiones en las que realizaba dibujos de escenas sexuales y pedía la opinión del terapeuta, eran “adivinanzas” que parecían travesuras buscando ser descubierto y ser reprendido. En estos sucesos se puede atribuir la pulsión del saber.
Todas las pulsiones expuestas anteriormente (vouyeristas, exhibicionistas y de conocimiento) son el motor de la fantasía primordial, pero el contenido latente es la fantasía de la exclusión. Manuel tiene curiosidad de saber quién es el que complementa a su madre, porque ya no es él el único, se crea de esa manera una herida narcisista. Al intentar sanar su herida expresa el deseo del saber, él vivió su investigación sexual pasivamente, desatando fuertes afectos generado una escena que se repite afectando el desarrollo psíquico siento su intento de elaboración su propia traba.
Dado que en los primeros momentos de vida del individuo se sientan las bases de la personalidad y la parapsicología, el análisis de todos los elementos desencadenados de esta escena primordial así como los demás aspectos teóricos que se revisan en la tesis de Villanueva nos permiten comprender la complejidad del padecimiento de Manuel, los cuales se deben analizar de manera individual y global ya que todo deviene de las condiciones de desarrollo en las que se desenvolvió, incluso desde antes del nacimiento.
Se le invita al lector revisar la tesis del terapeuta para tener una visión completa del caso expuesto y de esta manera llegar a un entendimiento certero del motivo de consulta, tanto latente como manifiesto.
Escrito por:
Jiménez García Brenda y Zuñiga Castillo Brenda.
Referencias:
Villanueva, J. (2018). “Manuel: matar o morir”. (Tesis de maestría). Universidad Nacional Autónoma de México, México.
