¿¿¿Madres Zombies???
La imagen tradicional que siempre se le ha dado a las madres es de seres llenos de amor, protectoras y que son capaces de sacrificar todo por sus hijos. No obstante, como en toda regla, existente varias excepciones, que resultan muy llamativas ante el resto de la gente.
No nos resulta extraño escuchar o conocer a mujeres que pareciera que no quieren a sus hijos dado la forma en cómo los tratan. Y aunque esta situación, por sí sola, pudiera provocar un debate con respecto a la maternidad y cómo es concebida. En esta publicación sólo expondré la explicación psicoanalítica de este tipo de situaciones.
El término de “madre muerta” quizá resulta un poco extraño para la mayoría de los lectores, sin embargo, este concepto nos ayudará a comprender el porqué de los sucesos previamente descritos.
Este complejo aparece cuando la madre entra en una depresión, ésto genera que dentro de ese trastorno, la progenitora no provee de las necesidades que el bebé precisa, como la falta de estructuración y que a su vez, genera agujeros psíquicos que resultan difíciles de “reparar”.
En otras palabras, cuando la madre entra en depresión provoca en el niño, de forma inconsciente, sentimientos de odio, ya que no lograr entablar una relación con su hijo, debido a que está volcada en sí misma, y no en el infante. Esto genera que no esté atenta a las necesidades de su hijo y por ende no las satisfaga o lo haga de forma tardía.
Esta situación puede empeorar si no existe otra figura parental o familiar que, de alguna manera, “ supla” esas funciones que la madre, por su depresión, no cumple.
Es importante recalcar la gravedad de la situación para ambos. En lo que respecta al menor, esto provocará heridas profundas en su psique que podrían desembocar en afecciones mentales, tales como en trastornos narcisistas. Y por parte de la madre, agravar su depresión.
Aunque lo anterior pareciera una actitud negligente por parte de la madre, se debe comprender que la depresión es una enfermedad seria y que conlleva graves consecuencias, de ahí la importancia de detectarla y tratarla en la mayor brevedad posible.
Por lo que antes de juzgar a una mujer en esta situación, se debe averiguar cuáles son los antecedentes que terminaron llevándola a donde se encuentra.
Referencias
- Esparza, E. (2015). Fallas en la estructuración Psíquica. En E. Esparza, Los síntomas del TDAH, sólo la punta del iceberg. Clínica de lo negativo (tesis de doctorado).(págs. 103–142). Ciudad de México: Universidad Nacional de México. doi:10.13140/RG.2.1.4827.7360
