Escena 25

Me mandé solito al bar porque pensé que ahí encontraría a los chicos, pero no. Me senté en la barra, solari y pesado, y justo empieza a sonar Taxman, en la versión incendiaria de Vaughan. Me subió desde el estómago una corriente de calor que conducía los risorios y me daba cuenta que sonreía sin querer y quise saber si alguien me había visto, porque eso me parece muy cercano a estar desnudo y miré alrededor y no, nadie me veía sonreír estúpidamente, hasta que me encontré con un perfil, una morocha de rulos teñidos y entonces pensé que adentro mío y desde entonces te podía tutear; estabas con amigas y mientras sonaba el tema te la pasaste sonriendo, quieta con el copón en la mano. El tema terminó y después pusieron Vilma Palma y volvimos cada uno a su dimensión particular y empecé a preguntar en el grupo de whatsapp si alguien andaba cerca y volví a mirarte y vos eras otra, hablando con tus amigas. Scrolié un rato y luego otro rato, mientras ponían cosas como Sergio Denis, trova, y otras cosas que ya no recuerdo. Me avisa Carlitos que estaban yendo a otro bar, a 20 minutos de donde estaba, agarro la campera y me mandé para la puerta y ponen I ain’t gone ’n’ give up on love, me estaquié, pero salí enseguida de ese encanto y me daba cuenta de que sonreía sin querer, estúpidamente, calorcito subiendo, me doy vuelta para buscarte. Estabas sin el copón, mirabas hacia arriba y sonreías y tus amigas hablaban y vi cómo una te pasaba el copón y vos no lo veías y se lo pasaban a la que tenías al lado. Me puse la campera, mirándote desde afuera, me subí el cierre y me fui caminando al otro bar, repasando mentalmente los compases y la manera en la que mirabas la luz encima tuyo mientras Stevie decía love ain’t gone ’n’ give up on me.