Familias Abrigadoras: Una forma distinta de brindar ayuda y contención

Sebastian Carusone
3 min readAug 3, 2019

--

Es un programa con el objetivo de brindar a niños y niñas una medida de abrigo debido a la vulneración de sus derechos

Logo de Familias Abrigadoras (Foto Sebastián Carusone)

Este proyecto se presenta desde el área de Fortalecimiento Familiar perteneciente a la Secretaría de Salud y Bienestar Familiar de la municipalidad de San Miguel. Se puso en marcha en diciembre del 2018, a partir de la necesidad de brindar a estos niños/as que han sido separados de su grupo familiar la posibilidad de desarrollarse transitoriamente en un ambiente que atienda sus necesidades psicosociales y afectivas.

Difusión del programa (Foto internet)

El equipo profesional está integrado por la licenciada en trabajo social Alicia Navarro, la licenciada en psicología Penélope Milito bajo la conducción de la asistente social Luz María Vergara. Ellas se abocan a la búsqueda de familias de tránsito voluntarias que quieran y puedan alojar temporalmente en sus hogares a niños y niñas distanciados de sus familias hasta que se resuelva su situación legal.

El equipo de trabajo luego de charla informativa (Foto Sebastián Carusone)

Los postulantes no deben residir directamente en el partido de San Miguel, pueden hacerlo en otros municipios aledaños dentro del conurbano. “Ser familia abrigadora no es un mecanismo para llegar a la adopción . Uno de los requisitos para formar parte del proyecto es no estar inscriptos en el Registro Único de Adoptantes”.

Alicia y Penélope realizan una evaluación inicial a los postulantes a través de entrevistas familiares e individuales. Todos los adultos convivientes en la vivienda de la familia aspirante a ser abrigadora deben presentar el certificado de antecedentes penales. Luego se realiza un seguimiento, supervisión y acompañamiento profesional tanto para el menor como a los abrigadores.

Mural con los Derechos del Niño en las instalaciones de Familias Abrigadoras (Foto Sebastián Carusone)

“Estamos esperando en casa que el juzgado nos diga cuando ir a buscar a un hogar a una beba de nueve meses, Familias Abrigadoras nos llevó a casa cuna, cochecito, bañera y ropa”, destaco Jorgelina Meza, integrante de una familia voluntaria. Desde el programa brindan ayuda de determinados elementos como leche, pañales, medicamentos y otros productos necesarios para el cuidado cotidiano del niño/a.

Accesorios que recibió Jorgelina para uso de la niña que están por albergar (Foto Sebastián Carusone)

El tiempo de alojamiento del menor se espera que sea el más acotado posible, cosa que depende de la resolución judicial, es decir, hasta que estén las condiciones dadas para el regreso con su familia de origen o se dictamine su estado de adoptabilidad. En ningún momento las familias abrigadoras toman contacto con los familiares biológicos, solo con los profesionales del programa.

De postularse a convertirse en familia abrigadora es un proceso que no tiene un tiempo definido, en medio están las entrevistas, el tiempo que lleve a las personas realizar el trámite del certificado de antecedentes, en caso de contar con mascotas deben presentar las libretas actualizadas de vacunación. Posterior a esto una entrevista en el juzgado de menores y por último que surja una oportunidad para recibir al niño/a.

Mural de fotos de los chicos con sus familias abrigadoras (Foto Sebastián Carusone)

--

--