Nuevo aniversario, nueva fiesta: ¡redbee cumplió 8 años!

Juan Silvestrini
redbee
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5 min readAug 14, 2019

En un año pueden pasar muchas cosas. Sin embargo, hay algo que nosotros nunca pasamos de largo y que es una tradición: ¡nuestro festejo de aniversario!

Llegó un nuevo agosto y, como no podía ser de otra forma, organizamos un fiestón para divertirnos y celebrar.

¿La sede? La querida oficina vieja. ¿La fecha? Un viernes, por supuesto.

Cuando empezó a caer el sol, el comité organizador ya tenía todo listo: las mesas con comida, buena música, luces, la barra con todo tipo de tragos y las cervezas bien frías. También teníamos un espacio con cotillón para darle más color a la noche. A la hora citada -las 18- empezaron a caer todos, listos para vivir una jornada para recordar.

Chano, organizador y amigo inseparable del micrófono, fue el showman de la noche. Bajo sus indicaciones, se formaron varios equipos que compitieron por suculentos premios en distintos juegos y desafíos.

El primero fue un Twister por equipos, donde descubrimos que tenemos algunas personas extremadamente flexibles (y otros no tanto) dentro de la oficina. Cada pareja tenía que coordinar y contorsionarse para sobrevivir la mayor cantidad de turnos posibles.

El siguiente juego fue corto pero divertido: una persona de cada grupo tenía que vendarse los ojos y seguir las indicaciones de sus compañeros para llegar hasta una mesa, encontrar un vaso y tomar un trago largo.

Pero nada es tan fácil en la vida. Los otros equipos gritaban, daban indicaciones falsas y mareaban a los participantes. Ah, me olvidaba: antes de empezar a caminar les daban algunas vueltitas para que su sentido de la orientación quedara algo descolocado.

Antes de la comida, tuvimos el juego más gracioso y competitivo de todos. Los equipos seleccionaron a uno de sus miembros y lo pusieron frente a unas mesas, donde estaban Ivi y Juanca que oficiaron de jueces. Estos participantes debían apoyar sobre la mesada distintos objetos que les iban pidiendo antes que sus rivales.

Todo empezó muy tranquilo: una media, una zapatilla negra, un cinturón. Pero mientras la lista avanzaba, la cosa se puso más picante y pudimos ver la naturaleza competitiva de muchas de nuestras abejas. Sin duda, fue muy gracioso.

Terminamos, pasó la comida y bailamos un ratito.

Para cerrar la jornada nos esperaban dos actividades más.

La primera consistió en atarse un piolín a la cintura que tenía una lapicera el extremo.Una vez dispuesto el moderno y tecnológico gadget, los participantes debían embocar la birome, sin usar las manos, dentro de una jarra, luego en una botella de boca ancha y, por último, en una botellita de cerveza. Los movimientos de cadera fueron la clave para el equipo victorioso.

El último juego fue la famosa “búsqueda del tesoro” en la sala de reuniones. El comité llenó la pecera con globos blancos y rojos y escondió algunos objetos luminosos. Un miembro de cada equipo entró a buscar el tesoro, mientras el resto lo alentaba desde afuera.

Terminados los juegos, trajeron los cupcakes de cumpleaños, soplamos las velitas y nos pusimos a bailar por el resto de la noche.

Otro año, otra gran fiesta y, como siempre, muchas fotos para nuevos memes.

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Juan Silvestrini
redbee
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UXer, writer, ex periodista. Escribo cosas que me pasan y que me interesan, ¡y espero que a vos también!