¿Hacia dónde va la educación?
Por Martín Alvarez López, CEO de Repensar Educativo.
“15, 30, 45, 60, 90 días de cuarentena”. No, no es la intro de la película Exterminio 2. Es la realidad. Y esta, en cuestión de días y semanas a todos, absolutamente todos, nos ha hecho más que tambalear y de cuestionarnos realmente dónde estamos parados. Planes de clase, currículas, actividades y más en el aula, han sido derivadas cual orden a lo digital, a ese clic, a esas TIC que en educación ya tiene buen tiempo, pero que aún no se ha empoderado del todo y por sobre todo con satisfacción absoluta.
“¿Hacia dónde va la educación?” Esta pregunta tampoco es nueva, pero parece que hoy nuevamente cobra vigencia y si desde Repensar Educativo la planteamos, sabemos que más de un actor educativo hoy la lleva en mente y, gustosos, abrimos el debate, pues esto no es solo ‘repensar’ la educación, es repensar nuestra vida como agentes de cambio, nuestros hábitos, nuestros miedos, nuestras emociones, nuestras oportunidades otra vez. La vida apenas se levante la cuarentena no será misma. La educación no será la misma y es necesario mirar hacia dónde nos dirigimos.
¿Lo digital es la solución?
Todo parece indicar que sí. Los alcances más próximos parecen decir que sí. Existen distintas iniciativas ya en marcha: desde aulas virtuales, blogs educativos hasta las ofertas de mayor alcance educativo en Latam y el mundo de Startups educativas. (Creo que sabemos cuáles son, por lo menos las más conocidas). Solo un detalle así a mirada de educador y que por más de 9 años en espacios de tecnología educativa vengo observando:
✅a) Sí. La mayoría ofrecen cantidades inimaginables de cursos, talleres, programas. Cientos, miles por año.
✅b) Sí. La mayoría ofrecen cantidades inimaginables de cursos, talleres, programas. Cientos, miles por año a un precio accesible para todos.
✅c) Sí. La mayoría ofrecen cantidades inimaginables de cursos, talleres, programas. Cientos, miles por año a un precio accesible para todos y con inscritos por cursos de cientos de alumnos y con un solo profesor.
✅d) Sí. La mayoría ofrecen cantidades inimaginables de cursos, talleres, programas. Cientos, miles por año a un precio accesible para todos y con inscritos por cursos de cientos de alumnos y con un solo profesor, con un reto, por módulos y más. Netamente práctico.
😐e) Sí. La mayoría ofrecen cantidades inimaginables de cursos, talleres, programas. Cientos, miles por año a un precio accesible para todos y con inscritos por cursos de cientos de alumnos y con un solo profesor, con un reto, por módulos y más. Netamente práctico, pero que no todos lo terminan. El abandono de los cursos es abismal.
🙁f) Sí. La mayoría ofrecen cantidades inimaginables de cursos, talleres, programas. Cientos, miles por año a un precio accesible para todos y con inscritos por cursos de cientos y con un solo profesor, con un reto, por módulos y más. Netamente práctico, pero que no todos lo terminan. El abandono de los cursos es abismal. La ‘experiencia de aprendizaje’, esto que es prácticamente el cúmulo del conocimiento, como en la antigua Grecia, está muy olvidado.
😞g) Sí. La mayoría ofrecen cantidades inimaginables de cursos, talleres, programas. Cientos, miles por año a un precio accesible para todos y con inscritos por cursos de cientos y con un solo profesor, con un reto, por módulos y más. Netamente práctico, pero que no todos lo terminan. El abandono de los cursos es abismal. La ‘experiencia de aprendizaje’, esto que es prácticamente el cúmulo del conocimiento, como en la antigua Grecia, está muy olvidado. Así como cuánto de lo que aprendes en estos espacios, se lleva rápidamente a la práctica real, con casos reales, centrado ahora en habilidades personales, con un aprendizaje individual certificado y constatado a la hora de la contratación laboral.
“Si observamos las alternativas parece que el “hacia dónde va la educación”, se ha sumergido en un 50% de propuestas de acceso a la educación digital, contra otro 50% de aquello que, con los años, aún no se corrige o aún está en el cómo”.
‘Una breve mirada’ de hacia dónde vamos
Esta semana, cual experimento, en mis RRSS abrí el debate y lo que se piensa, incluso diría, ya tomando los fenómenos actuales como el Conoravirus, epidemias, desastres y cómo el mundo las afronta y de lo que se carece:
¡Los expertos nos dicen hacia dónde vamos!
Rápidamente para este punto me puse en contacto con tres personas, tres amigos, que están metidos en educación en el Perú, por años. Los tres no solo dictan en el aula, han consumido gran parte de esta educación digital por años y así mismo han creado, desde sus flancos, diversas metodologías, propuestas e iniciativas educativas innovadoras constatadas por proyectos puestos en marcha, por alumnos que aprendieron más que una lección y por seguidores que constatan lo que día a día proponen.
👏 Desde ya agradezco la rapidez de sus respuestas: Carlos Dulanto, Director General de Gen Quijote; Inés Evaristo, Directora Corporativa de Tecnologías para el Aprendizaje en InLearning del Grupo Intercorp; y de Andrea Maucaylli, UX Designer y facilitadora del Taller UX Estratégico en Repensar 👏
Sí, deseaba para este artículo distintas miradas. No solo orientadas al estudio de lo digital y TIC en general, también desde la innovación, estrategia, el insight y la creatividad, desde el elearning y por supuesto, desde la experiencia del diseño UX.
Desde su especialidad, chicos, ¿cómo observan que será la educación del fututo?
👦🏻Carlos:
Creo que la educación del futuro será sin duda alguna mucho más blanda. Y me explico, se está tomando consciencia de la importancia de la capacidad creativa, holística y valorativa, y se le da una nueva posición. Aprender a pensar y sentir ha sido siempre la duda. ¿La escuela, la universidad tiene que enseñarnos a pensar o también a sentir? Esa revolución aún está empezando.
👩🏻Inés:
Estoy segura de que la educación de mis nietos será muy distinta a la de mis hijos: una educación más flexible, más crítica, donde el primer paso sea desarrollar personas que aprendan a autorregularse y que entiendan que para aprender hay que tener motivación; que el aprendizaje real no se da por obligación. Una educación que brinde rutas flexibles para aprender. Si bien todos debemos desarrollar competencias básicas o transversales, los modos del alcanzarles pueden ser diferentes, los caminos, las metodologías. Y que te permita aparte de esas competencias desarrollar más o menos otras dependiendo de tu propósito, tus motivaciones
Una educación donde el docente tenga como rol anticipar y diseñar esas posibles rutas de aprendizaje según capacidades, motivaciones y competencias de los alumnos. Un docente con la función principal durante clases de acompañamiento cuando necesiten ayuda, pero sobre todo motivarlos a buscar solución por ellos mismos o con sus pares. Un profesor que active preguntas complejas, incentive a investigar y buscar soluciones. Un profesor que no se preocupa por saber la respuesta a todo, se preocupa por saber cómo guía mejor a su alumno o alumna, cómo monitorealos, cómo brindar feedback.
Una educación mediada por el avance tecnológico definitivamente, pero cada vez más preocupada por las interacciones, por lo emocional, por las relaciones sociales. La tecnología se usa no sólo para transmitir información, si no para fomentar o continuar las interacciones.
👧🏻Andrea:
En el panorama global veo varias tendencias, pero varias tienen como medio a la tecnología. Esta actúa creo como un catalizador. La Internet ha permitido una democratización de la información. Todos podemos acceder desde nuestras computadoras a cursos, talleres y tutoriales para aprender un programa de edición de vídeo o desarrollar alguna habilidad como el bailar salsa. Es decir, ahora tengo la opción de elegir qué aprender, de cierto modo tenemos más poder sobre nuestro aprendizaje. Ese poder lo empezamos a explorar en la vida universitaria y luego ya siendo profesionales en búsqueda de ir especializándonos más. Pero por otro lado en la educación que recibimos en primaria, secundaria es el clásico modelo del profesor y alumno, ahí somos de cierto modo un receptor pasivo. Es todo.
Volviendo a la pregunta veo la educación del futuro con las siguientes características: personalizada a mi estilo y ritmo de aprendizaje, los roles de profesor y alumno desaparecen, hablamos de un facilitador y un grupo de personas buscando aprender, por lo mencionado anteriormente es entonces horizontal.
¿Y qué es aquello que hoy, consideran, un usuario debería aprender para anticiparse a todo hecho cambiante del futuro?
Carlos:
El ser humano en general tiende a crear ambientes de control, no hacerlo le genera crisis constante. Sin embargo, es en la crisis donde aprendemos que el caos es la oportunidad. Creo que un usuario más que anticiparse, puede prepararse para ver la oportunidad en el caos cuando es tolerante a la frustración y a la incertidumbre.
Inés:
Creo que ya en estos tiempos, por lo menos en el sector profesional nos damos cuenta de que nuestros equipos y nosotros mismos no estamos muy preparados para mucho de las vivencias que tenemos. Si tuviera que elegir sólo cuatro, porque seguramente son muchas, creo que estas cuatro cada vez son más necesarias y a futuro serán determinantes.
Gestión del cambio: es una competencia de lo que se habla poco, pero el mundo educativo será cambiante. Por ejemplo, la crisis del COVID ha permitido que los más recelosos de la educación a distancia, vean que es una de las mejores estrategias para dar un acceso a una educación de calidad.
Empatía, al contrario de gestión del cambio, la empatía es el pan de cada día en cada charla, en cada conferencia. Hay miles de materiales que te explican qué es, pero poco te orientan a cómo desarrollarlo. En épocas de individualismo, de la presión por lograr las metas, la competitividad; la empatía es algo que solo está en el discurso. Si no eres empático en el futuro tendrás problemas, porque el futuro será la conexión, interconexión no solo entre humanos, sino entre robots, en cómo generar una inteligencia artificial empático por ejemplo. La empatía hora es la base de todo lo que se habla en experiencia del usuario (UX, LX, Research, etc).
Pensamiento sistémico, mirada integral. No sé cómo decirlo, pero cada vez más los problemas se deben resolver con miradas integrales. Puedes ser el más experto en tu especialidad, pero los problemas del mundo necesitan un enfoque interdisciplinar. Y eso no lo enseñan en la universidad o escuela, es una competencia que requiere aprender a salir de tu punto de vista, de lo mini y mirar cómo lo que haces se conecta con otras áreas, proyectos, temas, personas, especialidades.
Habilidad digital. Este año he visto cómo recién en el sector educación se habla con fuerza, y ahora con el COVID cómo los que toman decisión han empezado a angustiarse pensando si sus docentes o alumnos tienen habilidad digital. Pero, habilidad digital no solo implica cómo manejar tecnologías o softwares, eso es lo más sencillo. Hay muchos tutoriales, apoyo en ese frente. Habilidad digital es realmente aprender a comunicarte digitalmente, a gestionar y producir información digital relevante, a tener un sentido ético y crítico de la tecnología; ser inteligencia en el empleo de las TIC para resolver tus problemas cotidianos.
Andrea:
Creo que más haya de conocer de tal o cual tecnología, es aprender a aprender. Como vemos el mundo siempre vive en cambio constante, pero ahora este es acelerado, así que nos toca el aprender y desaprender a un ritmo vertiginoso. Mucho de lo que aprendemos en los 5 años de universidad, 3 de instituto pueden quedar en la total obsolencia. Esto es más común en carreras relacionadas a la tecnología, que cada vez está más presente. Y es así que las habilidades blandas tales como adaptabilidad, pensamiento creativo, flexibilidad, pensamiento crítico, empatía, entre otras, serán la base, serán el medio que nos permitan adquirir de forma más eficiente nuevos conocimientos o la llamada parte hard.
Y finalmente, ¿qué habilidad, los seres humanos, comenzaremos a desarrollar más, una vez que nuevos aprendizajes lleguen al espacio que estamos diseñando?
Carlos:
Yo esperaría que el hombre sea capaz de aprender bajo esta mirada dos cosas que desde la antigüedad nos repiten, pero que por alguna razón incomprensible no escuchamos: empatía y valor. No juzgar sino proponer. Si no se coopera la educación puede convertirse en una cárcel egoísta y eunuca.
Inés:
Son varias, pero creo que las más fuertes serán estas.
Autorregulación. Tengo fe que cuando los estudiantes ingresen a un sistema donde no tengan quién les diga minuto a minuto qué leer, qué ver, qué escribir, qué pensar. Esto dependerá no solo de la educación y la familia, sino de la sociedad, de ver a los niños como individuos con capacidad de análisis, decisión, tomar acción.
Creatividad, la competencia tan restringida al sector artístico. Vuelve con fuerza a partir de la boga de la innovación en todos los niveles. Una creatividad de personas que abren sus mentes, buscan soluciones diferentes y de mejorar las soluciones.
Comunicación. Con los nuevos modelos educativos aprenderemos a reconocer que todos podemos ser buenos comunicadores si aprendemos a identificar nuestros propios talentos, los medios y las formas que hacen mayor conexión con nosotros. Una comunicación diversa, respetuosa. Ya no necesariamente un buen orador es el mejor comunicador. Esta competencia es la base, no es nueva. Nueva será la forma cómo valoremos los diferentes modos de comunicarnos y el impacto que genera.
Andrea:
Siguiendo la línea de mi respuesta anterior creo que la habilidad de aprender y desaprender será fundamental.
🤘 Bonus Track:
Y si algo puedo constatar, sobre todo luego de llevarlo a la práctica desde Repensar ya en el 2018 con nuestra área de Mindset para todos nuestros alumnos, es el poder de las habilidades blandas y en general, el ‘poder’ de desaprender con las habilidades de uno para diseñar nuevos sistemas centrados con soluciones rápidas, y como parte del desarrollo de casos reales, cómo esto impacta también en nuestros aliados: hablo de Startups, bancos, medios de comunicación, retail y del sector educatico, y en donde las emociones juegan un papel clave y serán más claves a futuro.
El final de la Cuarentena
Y con esta pregunta deseo culminar:
