Reseña de la película «Más allá de las colinas»

Víctor
Reseñario
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3 min readFeb 23, 2018

Ganadora en la categoría de Mejor Guión en el Festival de Cannes 2012, Más allá de las colinas retrata lo peculiar que resulta la vida en un convento que se mantiene alejado de las exigencias sociales que implican los territorios urbanos. La protagonista Voichita es una mujer joven que debe enfrentarse a la difícil decisión de continuar en el convento o salir para seguir los planes de la infancia orquestados con su mejor amiga.

No toda la soledad es un tormento, mucho menos cuando ha posibilitado un encuentro con una vida pacífica. Es el caso de Voichita, quien vivió una infancia complicada en un orfanato de Rumania y al crecer encontró refugio con las monjas, un camino opuesto al de su amiga Alina, quien la protegía cuando eran niñas y al crecer decidió partir hacia Alemania para trabajar bajo la promesa de volver por ella. El reencuentro de las amigas rompe la paz de Voichita y la obliga a elegir entre el amor a Dios que durante años la ha reconfortado, y el amor a su mejor amiga de infancia quien no está de acuerdo con la doctrina del humilde convento.

La presencia de Alina en el convento tiene efectos también en las demás monjas y en el sacerdote radical y autoritario. Voichita y el ortodoxo convento deben luchar con sus propios demonios mientras son confrontados por el mundo exterior que con tanto esfuerzo habían logrado evadir.

Basado en hechos reales, el guión que elabora Cristian Mungiu -guionista y director- narra con calma y destreza una historia sumamente violenta. Conforme se tejen los diálogos pausados se esboza una crítica a la rigidez de los procedimientos en algunas instituciones religiosas y gubernamentales. A pesar de desarrollarse en un contexto religioso demasiado radical, el problema de las posturas radicales se extiende hasta el sistema jurídico, las instituciones de salud y las costumbres familiares.

El sonido ambiental prevalece los 150 minutos del metraje, poniendo el acento en la amistad de Voichita y Alina. La paz que se rompe en los protagonistas se refleja en el ritmo de la película, pasando de mostrar los pasos firmes de los personajes a enfocarse en la respiración agitada que emerge de la tragedia y el llanto.

Cristian Mungiu

El director de cine Cristian Mungiu tuvo un aceptable recibimiento de la crítica con su película Cuatro meses, tres semanas y dos días, en donde aborda el muy debatido tema del aborto de una manera directa, con la ayuda de personajes en apariencia simples, que mantienen diálogos hábiles y movimientos de cámara rápidos, en una trama que no se aleja del tópico principal y toca los dilemas ya conocidos sobre el tema, aunado a la transformación de los protagonistas. En Más allá de las colinas la cámara actúa de forma distinta, se limita a seguir lentamente a los personajes y a través de planos generales capturar la lejanía del lugar y la distancia entre los hombres, remarcando los momentos emocionales con primeros planos que enmarcan los rostros de sufrimiento.

Más allá de las colinas es una película con alto contenido crítico y con un estilo que consolidó a Cristian Mungiu como director y escritor. El tema de la migración de los rumanos encuentra un espacio reflexivo en Alina y es retomado por Mungiu en su siguiente película titulada Bacalaureat -que aparece hasta el año 2016- en donde reaparece la corrupción institucional y humana, evidenciando la pesada sombra de la violencia que opaca la esperanza de los hombres.

FICHA
Título: Dupa Dealuri (Beyond the Hills / Más allá de las colinas)

Año: 2012

País: Rumanía

Director: Cristian Mungiu

Guión: Cristian Mungiu

Fotografía: Oleg Mutu

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