Retargetly Retreat — Bariloche 2018
“Afirmo que uno es un número demasiado pequeño para alcanzar la grandeza,” John Maxwell
Este 2018 establecimos partnerships que nos impulsaron, Equifax una de ellas. Lanzamos la versión más avanzada de nuestra plataforma. Iniciamos la expansión regional en México, Brasil y USA. Recibimos a más marcas de las que esperábamos, y crecimos enormemente en equipo.
En resumen, ha sido un año lleno de retos. Lleno de oportunidades en muchos casos seguidas por caos; pero sobretodo lleno de crecimiento y aprendizaje.
Todos los que conformamos Retargetly vivimos el mindset y cultura de la que somos parte. Acá cazamos oportunidades, trazamos caminos donde nadie probó, creamos de la mano de nuestros clientes y levantamos puentes que parecían imposibles.
Desde nuestros fundadores, que establecieron los cimientos desde los que nos impulsamos hoy, y quienes han dejado un legado que se transmite a cada miembro nuevo. Hasta los heads de cada área y los miembros que las conforman. Nuestras diferencias fortalecen el núcleo de la compañía porque hay un común denominador: Somos curiosos. Estamos en una búsqueda constante de conocimiento e innovación.
Con eso en mente y llegado el cierre del año, sentimos la necesidad de reagruparnos. Fuimos a mil por hora cada día y era momento de parar la pelota y mirar hacia dentro, ver que pasaba.
Fue así como surgió, Retargetly Retreat — Bariloche’18
Buenos Aires HQ fue el punto de encuentro. Vinieron desde Los Angeles, Ciudad de Mexico y São Paulo, y una vez repartidos lo abrazos de bienvenida, pusimos rumbo a destino. Un viaje que daría el cierre perfecto al año.
Nuestro calendario incluía: Desayunos a la mañana en el hotel, reuniones hasta el medio día, almuerzos en grupo y caminatas compartidas. Cenas y conversaciones en complicidad. Ukelele en mano de Dani, Circuito Chico y Cervecería Patagonia. Empanadas de cordero, Trucha a la parrilla, Menú vegetariano para Diego y risas en la minivan. Y una actividad que nos cayó como anillo al dedo: Fuimos a hacer rafting y lo que parecía solo team building, se convirtió en un reflejo del día a día. Casi como si hubiesen trasladado la oficina a la balsa. Lleno de rápidos, momentos de calma, momentos de tirarnos de cabeza al agua y el equipo que quedaba en “pie”, listos para extenderle la mano a los caídos y subirlos como pudieran.
Sin más, nos transladamos a algunos recuerdos que nos quedaron de esa primera semana de Diciembre.
We take photos as a return ticket to a moment otherwise gone.
Tuvimos la oportunidad de recargar y alinearnos para todo lo que vamos a construir en el 2019. ¿Qué nos llevamos? Humildad. Porque sabemos que no llegamos solos hasta acá.
