De regreso al inicio
5 días desde la última vez que publique.
Lo que temía y estuve evitando desde el día uno del reto sucedió y no me dí cuenta. El monstruo dentro de mi cabeza volvió a atacar.
El viernes por alguna razón no pude escribir. Después el sábado ocurrió lo mismo. No pude encontrar algo sobre lo que podría escribir. La creatividad no aparecía.
El domingo ni siquiera pensé en escribir. Simplemente pasó el día y lo olvide. Se convirtió en una bola de nieve. Un día después de otro, y nada.
Después de casi 20 días de escribir diario comenzaba a adquirir una buena rutina de escritura. Cada vez me distraía menos, cada vez era más fluido. En este momento puedo ver los estragos de tan sólo 5 días de inactividad.
En estos 5 párrafos me he salido de esta página unas 4 veces. Antes de empezar a escribir esto empecé a escribir otra idea, pero no tenía la coherencia que buscaba. La descarté.
Me siento igual que cuando regreso al gimnasio después de días de inactividad; cansado, decepcionado y frustrado. Sobre todo frustrado. Quieres sentirte igual que cuando ya tenías una rutina, pero estas de nuevo en el inicio. Quieres cargar el mismo peso, correr igual de rápido, pero no puedes.
Dicen que te toma 21 días adquirir un hábito. No lo logré. Me tardé casi 15 días en empezar a tener fluidez en mis pensamientos a la hora de ponerlos en papel. Sólo 5 en tirar todo eso a la basura. Fallas una vez, luego dos. Cada día se vuelve más fácil simplemente dejar pasar otro día. Y en contraste, cada día que dejas pasar en más difícil recuperarte.
Este viernes termina el reto. ¿Qué son otros dos días más sin escribir? Quizás no suene a mucho, pero podrían ser la diferencia entre seguir el mismo patrón que tantas ganas tengo de quitarme o volver a empezar y seguir intentando.
