Decidiendo qué libro leer: la marca personal del escritor

Una técnica sencilla y accesible para decidir nuestras lecturas, con base en la marca personal de los autores que nos interesan

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Amigo lector:

Soy el profesor Vladimir Estrada y te saludo nuevamente desde el Boletín Semestral BIBLIOUAPA, editado por la Biblioteca Universitaria de la Universidad Abierta para Adultos.

Cuando entras a la Biblioteca a buscar información general o especializada, ya sea por iniciativa propia o por orientación de quien te está formando, e independientemente de que seas estudiante, académico, investigador, o simplemente alguien interesado en aprender, puedes quedar abrumado ante la enorme cantidad de textos existentes sobre el área en que deseas informarte. Hay muchísimos escritores de gran nivel y renombre publicando contenidos especializados sobre múltiples áreas y temas, en todo el mundo; y sus obras están allí, disponibles para ti. ¿Cómo saber cuál o cuáles de ellas seleccionar para leer de forma priorizada, y enterarte de lo que necesitas?

Te propongo una técnica sencilla y práctica que me ha dado muchos resultados, así como a mis estudiantes de grado, postgrado y educación continuada, y a mis clientes de consultoría profesional, durante bastante tiempo. Está basada en Internet, específicamente en una de sus principales herramientas: el megabuscador Google.

En toda área del conocimiento humano hay autores considerados de referencia (los de mayor y/o mejor producción intelectual relacionada con el campo); otros de nivel intermedio (quienes han producido algunos libros importantes, o una cifra significativa de artículos de interés, pero no al nivel de los referentes); y otros de reciente ingreso al área de especialización, que incursionan en la investigación y producción desde fecha todavía cercana y no han cosechado aún resultados de alto impacto. Y en esta nueva época, todos tienen al menos un punto en común, además de ser especialistas del mismo campo: aparecen en Internet, y son localizables a través de Google.

Generalmente, lo que aparece sobre nosotros en la red (el entorno online) -ya sea por decisión nuestra o de otros- es el reflejo voluntario o involuntario de lo que somos, hacemos y logramos fuera de ella (o sea, en el entorno offline). Y aquí entra al juego un poderoso concepto relativamente reciente (apenas 21 años de vida), conocido como marca personal, la cual es gestionable en los dos entornos que te he mencionado: en nuestro diario quehacer en contextos no virtuales, y en el entorno virtual que representa Internet. Veamos cómo sucede esto, y qué provecho podemos sacarle para decidir cuáles serán nuestras lecturas especializadas, sea cual sea el objetivo que perseguimos.

La marca personal no es más que la huella que dejamos y el impacto que conseguimos en los demás a partir de la integración de lo que somos, lo que hacemos y lo que logramos en las diferentes facetas de nuestra vida. Aquí y aquí tienes unas 70 definiciones recientes del concepto (muy bien recopiladas por la Maestra Eva Collado Durán) y en el siguiente video puedes ver otro grupo de ellas — algunas reiteradas- las cuales integran la excelente selección que nos propone el Maestro Guillem Recolons. Ambos, formadores, consultores, escritores, conferenciantes, y grandes expertos internacionales en el tema.

Muy claro, ¿verdad? Resulta difícil no tener una claridad meridiana sobre lo que es, significa e implica la marca personal, luego de apreciar esta variedad de tratamientos conceptuales sobre ella; y para que podamos avanzar al objetivo que hoy nos ocupa, te propongo una última mirada al concepto, la cual he propuesto hace algún tiempo extrapolando al tema el genial enfoque gerencial de los momentos de la verdad, acuñado y practicado por el legendario empresario sueco Jan Carlzon en los 80 del siglo pasado:

Evidentemente, considerando este concepto, un autor impacta y marca a partir de la calidad, cantidad, pertinencia y trascendencia de su obra. Entonces, su marca personal estará basada en cómo sus públicos reciben y valoran el impacto de su trabajo, lo posicionan en sus mentes como un verdadero experto en el campo, y le convierten en una de sus referencias informativas para las actividades que desarrollan.

Y como ya te comentaba, todo autor con algún nivel de impacto puede ser localizado en Google. O sea, si escribes su nombre en el buscador, accederás a gran cantidad de información sobre él; generalmente, en las primeras páginas de las búsquedas aparece el espacio donde se lo presenta en Wikipedia (muy útil para estos fines), su página en Google Académico (también de gran utilidad, aunque de índole más especializada), los sitios de las Universidades u otras instituciones en que trabaja, otros portales especializados donde se recopila, reseña o comercializa su producción, así como su blog temático, su página web personal y sus perfiles en redes sociales o profesionales (Twitter, LinkedIn, Facebook, Medium, etc.) y académicas (Research Gate, Academia.edu, y otras). En todos estos espacios virtuales -y posiblemente otros-, lo que tú ves constituye el reflejo de lo que dicho autor es, hace y logra fuera de la red, y del impacto que consigue gracias a todo ello; o sea, es la versión virtual de su marca personal, o como algunos autores llaman a esto, su marca digital.

¿Cómo puedes aprovecharla?

Pues muy “sencillo”. Si hallas 10 libros en la biblioteca (todos voluminosos y parecen importantes), y no sabes por cuál comenzar tu revisión bibliográfica, anota los nombres de sus autores, y googléalos uno por uno. Encontrarás, por ejemplo:

  • La biografía profesional del autor.
  • Su producción intelectual.
  • Su participación en Congresos, otros eventos, premios recibidos, etc.
  • Las citas académicas y no académicas hechas a su trabajo.
  • Las reproducciones de sus artículos en redes.
  • Sus propios artículos en su blog.
  • Artículos escritos sobre él y su obra.
  • Reseñas de sus libros.

Todo ello hace parte de la marca personal de un autor. Y para ti, representa un excelente punto de referencia para priorizar tu lista, partiendo de la siguiente interrogante: ¿cuál de los autores cuyos libros tienes disponibles evidencian haber marcado a sus públicos de forma más sólida, pertinente, abarcadora y perdurable?

Por ejemplo, puedes operacionalizar el asunto así:

  • ¿Cuál es más citado, reproducido, referenciado, reseñado?
  • ¿Cuál tiene una presencia más frecuente en Congresos y otros eventos, y con cuáles temas?
  • ¿Cuál parece ser el más respetado o mejor valorado por los otros autores cuyos trabajos analizas?
  • ¿De cuál se dicen más frecuentemente cosas como “el más importante”, “el máximo referente”, “el renovador del tema”, “el clásico de clásicos”, “el super gurú”, y similares?
  • Y por supuesto… ¿cuál o cuáles son los que tus profesores o colegas utilizan y recomiendan más, y por qué lo hacen?

Una vez conformada tu lista corta con los tres o cuatro autores más relevantes, revisa los índices y resúmenes de sus textos, y procura responder con objetividad la siguiente pregunta:

¿Cuál o cuáles de ellos parecen ofrecer propuestas temáticas conceptuales y metodológicas más compatibles con tus objetivos e intereses profesionales actuales?

El orden que definas en tu respuesta deberá ser el que sigas para iniciar el estudio. Y puedes consultar a tus profesores o colegas al respecto, para reafirmarlo.

Amigo lector:

Hasta aquí la técnica que te propongo. Esta no te ofrece un criterio absoluto, por supuesto; pero sí es una guía que puede orientarte y ayudarte mucho para tus búsquedas, consultas, estudios y análisis en la literatura especializada. Espero que la apliques, que te resulte útil, y que compartas conmigo y con toda la comunidad estudiantil y académica tus resultados. ¡Y por supuesto, te deseo muchos éxitos!

Cordialmente…

Dr. Vladimir Estrada

Blog: https://profesorestrada.pro/

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Vladimir Estrada
Revista Digital “Educación y Academia”

Cubano. Padre. Académico. PhD. Mentor profesional internacional, RGM. Consultor. Comunicador. Miembro fundador de Personal Branding LATAM. Blogger académico.