Riberas del Bravo; “un capricho de administración priista”
La temporada de lluvias para Araceli Rentería como para algunos residentes de la etapa 8 de Riberas del Bravo implica andar por la casa con el agua hasta la cintura, que los muebles floten, algunos objetos personales se hundan y la infraestructura se deteriore. Es como si hubieran construido esa etapa en una piscina de aguas residuales que acarrea una gran cantidad de infecciones, de malos olores, basura, plagas entre otros males post tormenta. “Hasta los niños andan dentro del agua… pues es agua sucia”, comentó Araceli Rentería quien no está dispuesta a quedarse en Riberas del Bravo. “No puedo dejar que se me echen a perder mis cosas por estar aquí”.
Historia y causas
Riberas del Bravo fue construido en 2002, la zona donde se estableció el proyecto, según un ingeniero de CONAGUA distrito 4, eran terrenos agrícolas los cuales deben de contar con canales de riego y arroyos que alimenten los cultivos de algodón, trigo, nuez y alfalfa.
Se levantaron muros, una casa, dos casas, tres y luego decenas de ellas sin tener la aprobación del Plan de Desarrollo Urbano (y según data una nota del El Diario Abandonan el rescate de Riberas del Bravo hasta el 7 de junio de 2002, obtuvieron tal aprobación). Así, sobre cuenquillas de riego y entre un canal de aguas negras fue construido este desarrollo habitacional del que destacan las últimas dos etapas: la 8 por su magnitud y la 9 por su lejanía y por no tener problemas de inundaciones. La etapa 9 está situada en una zona plana, la lluvia que cae ahí tiene salida libre a la etapa 8 que está a desnivel, luego se distribuye en la enorme etapa y ahí se queda, en las fincas que se encuentran en hoyo.
Alcance
La construcción de un fraccionamiento alrededor de un canal de aguas negras y tan cerca del Río Bravo traería consecuencias graves, y efectivamente, cada temporada de lluvias los habitantes se enfrentan a inundaciones, pérdidas materiales, plagas entre otras cosas, sin embargo el gobierno del estado, en administraciones pasadas, ha expuesto a nivel nacional como obra en recuperación a Riberas del Bravo, pero actualmente cualquier nube cargada de agua que se posa sobre el fraccionamiento puede hacer desbordar el canal de aguas negras.
¿Será realmente una obra recuperada?
Pio García Panamá originario de Veracruz lleva 9 años viviendo en Riberas del Bravo, etapa 8, una de las etapas más grandes y declarada por Protección Civil en zona de riesgo. Él vivió la tromba del 2006 y las intensas lluvias del verano pasado y expone que la estructura de su casa sufre deterioro, se está cuarteando, y las goteras en su techo contribuyen a inundar los 50 metros cuadrados de su propiedad. El ha perdido documentos y algunos muebles, porque el agua estancada puede durar días en lo que llegan las autoridades con pipas.
Riberas del Bravo
A pesar de que en este fraccionamiento, aprobado por la administración de Patricio Martínez, se abrieron proyectos con aportaciones de: Fundación Hogares, Sedesol, Ayuntamiento, para remodelar la infraestructura, la problemática de inundación y deterioro de casas continúa. El encargado de Protección Civil dice que de acuerdo con la edificación de las casas, cerca de un río y de un canal de aguas negras, la desarrolladora y la constructora, no respetaron el Plan de Desarrollo Urbano, “fue un mero capricho”, expone, por ende ese proyecto necesita mucha inversión en obras. El ex director de la JMAS, Antonio Andreu Rodríguez, refiere que: “hacer obras se requiere mucho recurso y muchas veces no tienen los recursos necesarios para hacer obras”.
Se ha querido rescatar poco a poco el proyecto Riberas, Efrén Matamoros, Antonio Andreu y el académico Óscar Dena en sus respectivas entrevistas, concordaron con que se han hecho obras y que se busca impulsar más proyectos para evitar las inundaciones solo que la economía es un obstáculo, tanto para funcionarios al igual que para especialistas como Oscar Dena Ornelas, jefe del Centro de Información Geográfica de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, quién ha propuesto proyectos que han sido rezagados por algunos diputados por falta de recursos. Y de las obras que se hacen, he constatado en notas del Diario de Juárez, Norte, El Economista, que el Municipio se jacta de dichas Obras. Cómo la recuperación de vivienda… Sin embargo, hasta 2010 se registraban en toda la ciudad más de 100 mil viviendas en abandono por distintos factores. Riberas del Bravo forma parte de la estadística de viviendas en abandono y escandalizadas. Además de ser considerada una zona de riesgo, Riberas también ha sido escenario de crimen y violencia.
La red de drenaje sanitario
Otro problema es la ineficiencia en la red de drenaje; es antiguo y no se cuenta con un sistema pluvial qué según el encargado de protección civil, Efrén Matamoros, le hace falta a la ciudad, para disminuir algunos problemas en Riberas.
Andreu explicó que la red de drenaje sanitario se distribuye en 5 mil kilómetros de colectores. La ciudad y este fraccionamiento no se dan abasto con la red de drenaje sanitaria y el ex funcionario de la JMAS explica que el funcionamiento de la tubería es solo para descargas sanitarias y se supone que las tuberías deben llevar la mitad de carga por tanto, cuando llueve las personas abren las alcantarillas con la idea de que funcionan como resumidero, pero al contrario, todos los desechos que lleva la tubería son expulsados por la sobrecarga de agua de lluvia que entra cuando se levantan las tapaderas. Además, los ciudadanos no tenemos conciencia del uso que se le debe dar al drenaje, ya que lo hemos utilizado como un basurero. ¿Cómo no queremos tener graves problemas en la red si tiramos lo que sea que quepa por el desagüe? Tiramos comida, papeles, perros, y el director de la JMAS comenta que hasta colchones han llegado a las plantas tratadoras. Por ende propone no utilizar el drenaje como basurero, para ayudar a conservar las tuberías y así mejorar las corrientes de desechos y evitar que se tapen en temporada de lluvias.
También, Andreu en la entrevista secunda la idea de Matamoros sobre la falta de un sistema pluvial, que anda alrededor de los 2mil millones de pesos. Pero dice que como aún no es un hecho el proyecto de sistema pluvial, Riberas tiene que sobrevivir con el desagüe artificial llamado rebombeo.
Manuel Herrera director de la JMAS explicó por vía telefónica la forma de drenar las zonas que se inundan en Riberas y explica que la única salida del agua es mediante rebombeo en las etapas 8 y 5, de esta forma el agua viaja al dren de interceptación que viene de la planta norte, dren que se conecta con el de la planta sur y llegan a las sequias del Valle de Juárez. Aquí no termina todo ya que de estar llenas las sequias debido a la lluvia pueden desbordarse e inundar otros sectores como Praxedis o El Millon.
Las expectativas vs realidad de Riberas del Bravo
Esta sería la segunda ocasión en la que el proyecto Riberas entra en lista de recuperación, pero tiene que esperar su turno a que se terminen las obras de las otras colonias que estaban antes en lista de espera porque se supone que Riberas ya fue atendida en años anteriores, (2011). A la fecha, Riberas continua en esa lista debido a la secuencia de deterioro que han ocasionado las últimas lluvias.
“Muy bonito, como todo muy bonito, no nos había tocado inundarnos”, dijo Arnoldo Arreola González, residente de la etapa 8. Claro que las casas muestras se veían de ensueño, pero las lluvias, inundaciones, goteras en las casas, han deteriorado su hogar. Su patrimonio esta cuarteado y los bienes que ha invertido ahí no son reembolsados en caso de la devolución o la reubicación. Un buen precio, un buen crédito que lograba ajustarse al salario que ofrece el sector maquilador, era perfecto y el lugar, comenta Araceli Rentería estaba bien. Sin embargo, al paso de las temporadas pluviales se dieron cuenta que las lluvias traerían grandes problemas, además del deterioro de la vivienda ya mencionado, la perdida de bienes; muebles y
electrónicos mojados; infecciones en la piel, plagas, el mal olor del canal…
Ese canal pestilente que ha ocasionado malestar en los residentes, actualmente se encuentra rodeado de yerbas, hay una capa de moscos e insectos sobrevolando las aguas que van a medio cauce y el olor se percibe apenas te acercas unos metros. La JMAS pretende cerrar con un tubo ese canal, así evitará todo esto, sin embargo un ingeniero de CONAGUA distrito 4, destaca que se planteó el proyecto, pero es imposible debido a la problemática mayor que ocasionaría taparlo. El ingeniero dice que ese canal es una salida para el agua de lluvia y de ser tapado incrementaría el nivel en la inundación. Preguntamos al Ingeniero Andreu y comenta que es posible entubarlo y que no afectaría puesto que el canal de aguas negras solo trae problemas al momento de desbordarse…
Algunos testimonios
Lucero tiene 13 años viviendo en Riberas del Bravo etapa 2, ella no se ve afectada por inundaciones y no mencionó tener problemas con el deterioro de su casa debido a las lluvias, sin embargo ella dice que las cosas han cambiado. Hace 13 años, las casitas distribuidas en secuencia se veían limpias, el lugar era vigilado y tranquilo. Ahora nada de eso existe. Comenta Aracely que actualmente se batalla con las plagas, el mal olor del canal, lo peligroso que es el canal ahora que no tienen protección (malla) y la delincuencia (robos). Al preguntarle ¿qué es lo mejor de vivir en Riberas?, ella titubeo un poco y después contesto que ha estado a gusto. Tal vez porque sabe que estas problemáticas se agravan a partir de la etapa 7 añadiendo las inundaciones a la lista de males. “Los más dañados, los más afectados, creo que son de la 7 a la 9, ahí yo creo padecen mucho inundaciones, más delincuencia y todo eso”, dijo Lucero.
Además de a la delincuencia, la falta de alumbrado, las viviendas abandonadas y en mal estado, los residentes de la etapa 8 tienen que enfrentarse a inundaciones cada temporada de lluvia, en la que solo se puede drenar el agua mediante bombas y para eso hay que esperar. Hay que esperar a que las autoridades se desplacen de las zonas céntricas de la ciudad hasta la periferia del suroriente. ¿Por qué si el problema es recurrente no se le da solución? O mejor aún ¿Por qué no se realizó el proyecto con las obras necesarias?… Porque el municipio no tiene el presupuesto que requieren estas obras… Una respuesta resumida de Antonio Andreu ex funcionario de la JMAS quien nos informó de la distribución de agua en la ciudad y del trabajo que se hace en la Junta Municipal; se ofrece agua potable las 24 horas, ellos pagan por la extracción del bolsón, pagan por el mantenimiento de las plantas tratadoras, la maquinaria y no olvidemos los últimos gastos de más de 216 colectores colapsados; que no mencionó mucho porque estaba resaltando el buen servicio que ofrece la JMAS. Andreu atribuye todo esto como gastos que no permiten tener el presupuesto para solucionar problemas como el de Riberas del Bravo etapa 8. Se ajustan a lo que tienen mientras el presidente municipal de la administración pasada nos trae a Miguel Voce, Natalia Lafourcade, un Juarez Fest, Juan Gabriel entre otros eventos que nos maravillamos de que son gratuitos, pero no nos damos cuenta de las malas condiciones en las que se encuentra la ciudad.
Arnoldo Arreola González lleva 13 años viviendo en la etapa 8 de Riberas del Bravo. En ese tiempo se ha dado cuenta de que la zona no fue la mejor elección para residir, después de las lluvias y que con el paso del tiempo el municipio se olvidó de ese fraccionamiento, su casa sufre deterioro, los parques están arruinados y los pozos de absorción están llenos de arena y basura. “No hay solución por ningún lado” dijo el señor Arnoldo y después de esto responde acerca de los beneficios que tiene vivir en Riberas del Bravo. Su respuesta se puede adivinar, después de describir las problemáticas a las que se ha enfrentado durante los 13 años que ha vivido en Riberas; su casa se está cuarteando, muebles dañados, moho en las habitaciones; efectivamente, para él, no hay ningún beneficio de vivir en Riberas etapa 8, únicamente, destaca el crédito Infonavit que de lo único que le fue útil fue para evitarse la renta, “pero así como está aquí no, ya ahorita no hay ningún beneficio”, enfatizó.
Entre las múltiples declaraciones que se televisan, se destacan las lluvias “atípicas” como culpables del desastre en zonas bajas de la ciudad, sin embargo para Arnoldo cada vez que llueve es lo mismo.
Las soluciones son reactivas y es algo de lo que los ciudadanos están cansados. Cuando llueve; acuden a revisar el canal de aguas negras, las bombas de agua y en casos extremos, han propuesto como solución la reubicación.
Expertos del tema ofrecen información
¿Qué es el Plan De Desarrollo Urbano? Agustín González Medrano, ex director de Obras Públicas, explica que este Plan nace del Gobierno Federal en 1963, inicialmente llamado Plano Regulador, creado por especialistas, urbanistas entre otros conocedores y fue enviado a cada uno de los principales municipios del país. Ese Plano se generó a partir de la investigación geográfico de cada estado con fin de establecer reglas de construcción “Un plano que te dice: aquí puedes construir esto, aquí puedes crecer, hasta aquí nada más, aquí no puedes construir esto, o sea, sectorizarla ciudad. Un crecimiento ordenado, disciplinado con el beneficio consecuente para la ciudad”, explicó González Medrano. Para que el plano pudiera aplicarse ante la ley, primero tenía que ser revisado y aprobado por el cabildo en Ciudad Juárez y después tenía que enviarse al Congreso del estado… nunca se mandó. El Arquitecto y urbanista, revela que al darse por cuenta de lo que representaba impulsar la propuesta del Plano Regulador; delimitar construcciones; decidieron negarse, puesto que habría limitaciones para las personas poderosas, influyentes, terratenientes de esa época, por tanto, ellos se encargaron de que no llegara al Congreso del estado.
La iniciativa de sectorizar la ciudad se frenó, así que. De esta forma comenzó el exagerado crecimiento, la acelerada invasión promovida por líderes y lideresas, refiere González Medrano, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que se dedicaron a acarrear personas para otorgar terrenos a cambio del voto. Es así cómo comenzó este despliegue de la ciudad, en zonas de riesgo, asentamientos irregulares, cerca de Ríos, entre arroyos de riego, cerros, con soluciones y obras a largo plazo que no fueron ni han sido cumplidas. Fernando Lozada Islas, urbanista, coincide con esta dinámica política; otorgar casas, a cambio de la simpatía ciudadana y lograr más votos la hora de las elecciones; la autoridad da el permiso a las constructoras y pide las obras de las que se hará cargo la constructora, ellos proponen y entonces se les permite construir, pero ambos (constructora y autoridades) saben que no se cumplirá la promesa. Con el fraccionamiento Riberas del Bravo, ocurrió algo similar, en la administración de Patricio Martínez. “Se pasó por el arco del triunfo las coordinaciones” aseveró el Urbanista Lozada y explicó que Patricio Martínez, autorizó la construcción de Riberas del Bravo, no el municipio, no el gobierno del estado, en ocasiones no es ni el primero ni el segundo en su conjunto quienes cometen corrupción sino el líder, gobernante o alcalde, quienes sobre pasan las administraciones para permitir este tipo de obras que se encuentran en zonas de riesgo, por el placer de atribuirse “buenas labores” y “medio satisfacer una necesidad ciudadana”. Luego de realizadas estas obras caprichosas, después de la foto de inauguración, se descuidan deterioran, el costo de los servicios se multiplica, y no hay mantenimiento.
Qué necesita Riberas
Sé que el subtema encierra la solución en una comunidad, pero es una necesidad que embarga a toda la ciudad. Por lo tanto, Riberas y en general Ciudad Juárez, necesitan urgentemente un sistema de captación y canalización pluvial que contribuya con la red de drenaje de acuerdo con el director Efrén Matamoros . El especialista Fernando Lozada, da a conocer que es un problema que surge desde la planeación, cuando se estima un presupuesto barato y no se dimensiona sino que las obras se ajustan a la necesidad actual de la ciudad, sin pensar en los problemas venideros; climáticos, políticos o ciudadanos; por esto, no se reflejan construcciones de calidad. Además, otro de los problemas en la construcción, es el crecimiento expansivo de la ciudad. Efrén Matamoros y Fernando Lozada coinciden en que lo ideal es que la ciudad crezca hacia arriba, de esta forma mejoraría la calidad de los servicios, y se puede abastecer mejor debido a que se concentra en puntos más cercanos. Entonces, la ciudad necesita dejar de ampliarse de forma ensanchada y necesita comenzar a concentrarse hacia arriba para dar mejor mantenimiento a los servicios; preferente la construcción hacia arriba a dejar fraccionamientos abandonados en la periferia, porque la lejanía hace olvidarlos y dejarlos sin mantenimiento. Al mismo tiempo que resanar la red de drenaje y planear más con el objetivo de lograr un nuevo sistema de captación y canalización pluvial.
La solución
Tal vez el subtema pasado pueda decirnos la respuesta a la necesidad, sin embargo, no se tiene una solución y esto me lleva a la pregunta obligada, una pregunta tan cíclica como aquellas tormentas que azotan la frontera: ¿Por qué si las autoridades saben que Riberas del Bravo se inunda no han hecho nada?.. Sí podría planearse un crecimiento hacia arriba o la instalación de este sistema pluvial, que al mencionarlo se siente tan palpable como si las obras pudieran comenzar mañana mismo, pero las respuestas de algunas autoridades, terminan con esa solución a la problemática de inundaciones.
Las respuesta un poco resentida por parte de todos aquellos funcionarios pudiera ser la falta de recursos y esa será la gran excusa a las carentes y abaratadas obras. Ahora sí que lo barato les ha salido caro. ¿Realmente el cobro de los servicios no suple aquellas soluciones? ¿Los ciudadanos no pagan lo suficiente para una vida digna?… Tantas preguntas, para obtener una solución, pero antes se debe encontrar el problema y el problema aquí, parece ser económico. Los funcionarios se quejan por la falta de recursos y los ciudadanos están hartos de pagar por un buen servicio que no se ve reflejado en su comunidad.
Antonio Andreu argumenta que el servicio que ofrece la JMAS es bastante bueno como para llevar agua potable a toda la ciudad, a cambio del cobro que ellos aplican por el consumo, el cuál dice debería aumentar, sin embargo, las soluciones respecto al canal de aguas negras, o de un sistema pluvial, no llegan para Riberas ni para la Ciudad, por ende en la temporada de lluvias se ven preocupados y de una colonia a la otra con pipas para desalojar el agua.
Para Fernando Lozada, la JMAS es un organismo descentrado del control municipal, con cuentas de dinero más libres, auditorias menos, por lo que cuestiona la respuesta de Andreu sobre mantener un corto presupuesto. Fernando Lozada llama a esto, incompetencia y afirma que la incompetencia es también corrupción. Ese es aquí en la ciudad un grave problema en el que todos nos vemos envueltos.
“Riberas no se hubiera hecho si la gente no se prestará a la corrupción: como trabajador, arquitecto, empresario, diseñador (permitiendo (estos actos corruptos) solo por un salario o porque me dijo mi jefe)” dijo Fernando Lozada. La solución es exigir el ajuste de cuentas, revisar los intereses de aquellas obras, que nacen en el norte, sur, este, oeste… de la ciudad; cuestionar ¿por qué se construyen ahí?, ¿quién construye?, ¿cómo es el lugar? ¿Toda esa falta de presupuesto en las instituciones y servicios públicos pero Duarte con helicóptero nuevo?.. Entre otras dudas; que como derecho nos es otorgado una respuesta por aquellos que dirigen la ciudad, a los que se les confía el fruto de nuestros esfuerzos, ya sea en el sector que labore cada quién y es muy justa una respuesta honesta.
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