Enola, en tu piel
La asistencia sanitaria en dermatología necesita nuevos recursos para poder dar acompañamiento y tranquilidad a sus pacientes más afectados. Enola es un proyecto de diseño de experiencia de usuario e interacción cuyo propósito parte de la idea de que la salud de la piel empieza en saber mirarla.
Desde La Nave Nodriza nos propusieron un reto:
Diseñar para favorecer la salud a través de productos y servicios digitales con especial atención a las necesidades post-pandemia
Durante mi primer acercamiento a él hubo una idea que resonó conmigo: acompañar a los pacientes en procesos largos de tratamiento o diagnóstico en los que la incertidumbre y el malestar son una constante. Las preguntas que seguían a esta premisa eran evidentes: ¿acompañar a qué pacientes? y, ¿en qué procesos?
Hice lo que habría hecho en cualquier otra situación, le planteé esta inquietud y estas preguntas a la profesional de la salud que tengo más cerca: mi hermana Elvira, estudiante de MIR.
Encontré un problema
Elvira ya había estado un tiempo en consulta dermatológica donde detectó una necesidad muy concreta, muy real y muy actual:
Los dermatólogos necesitan hacer seguimiento de algunos de sus pacientes crónicos, esto es: observar su evolución, estar en contacto con ellos y controlar su caso. Sin embargo, la mayor parte de las veces la consulta presencial no es suficiente o no es posible por múltiples factores.
Encontré una oportunidad
Por un lado, la dermatología es una especialidad donde las imágenes juegan un papel muy importante en la evaluación de un caso. Por otro, hoy en día gran parte de la población dispone de una cámara, como mínimo, decente en la palma de su mano. Y para rematar, el contexto post-pandemia que vivimos no ha hecho más que normalizar la comunicación en remoto. Estos factores hacen que la consulta dermatológica online (también llamada teledermatología) sea una práctica factible.
Y encontré ¡una inspiración!
De facto, ya están haciendo teledermatología. Dermatólogos y pacientes intercambian de forma extraoficial sus contactos personales de WhatsApps o de email para hacer un seguimiento telemático.
El problema es que no existe un medio que lleve de manera oficial la relación médico-paciente al entorno digital, con todos los riesgos que implica utilizar productos de terceros para tratamiento médico. He aquí mi reto:
Formalizar, facilitar y agilizar la comunicación telemática médico-paciente en la especialidad de dermatología
Entender la casuística
Para acercarme a la teledermatología y dar respuesta a esta necesidad primero debía entender 3 cosas:
- Cómo diagnostican, analizan y evalúan las lesiones los dermatólogos.
- Qué enfermedades o condiciones de la piel necesitan un seguimiento continuado y es posible hacerlo de forma telemática.
- Cómo es la teledermatología en la actualidad: quienes la practican, cómo y porqué.
Me puse en contacto con tantos dermatólogos como pude y saqué varias conclusiones. Entre ellas, que existen infinitud de enfermedades crónicas de la piel muy variadas pero una destaca por su complejidad, su prevalencia y su imprevisibilidad: la psoriasis. Motivo por el que he centrado en ella el desarrollo del diseño y del prototipo, aunque la solución sea aplicable a otras muchas condiciones.
¿Cómo es la vida médica de un paciente de psoriasis?
El siguiente paso fue entender la experiencia del paciente hoy. Encontré a varias personas que sufrían esta condición de la piel y cuyas variopintas experiencias me hicieron identificar las áreas de oportunidad.
Centrémonos en concreto en el caso de Cristina quien sufre brotes de psoriasis desde hace más de una década. Estos brotes son inesperados, no responden a los tratamientos que le han dado resultados anteriormente y dificultan su vida normal.
“Hay que probar muchos tratamientos hasta que encuentras uno idóneo para ti. Y aunque un tratamiento te funcione un tiempo puede aparecer un nuevo brote y no te queda otra que volver a empezar el proceso de nuevo.”
— Cristina
En resumidas cuentas, lo que Cristina necesita es:
- Sentirse acompañada y observada en el proceso por su especialista
- Estar en contacto con su dermatólogo para comunicarle cambios en las lesiones, imprevistos, dudas… entre cita presencial y cita presencial
- Agilidad y continuidad en el seguimiento
Y su médico, el Dr. Luis, necesita:
- Observar la respuesta de Cristina al nuevo tratamiento
- Detectar cambios significativos a tiempo
- Mantener el contacto con su paciente para comprender su caso a fondo
- Obtener fotografías útiles que cumplan unos mínimos de calidad
Como respuesta nace Enola
Enola es una app (mobile para pacientes y desktop/tablet para médicos) de seguimiento y telecomunicación médico-paciente centrada en casos crónicos y delicados de dermatología.
Fue decisión de diseño simplificar la navegación y las funcionalidades de la app lo máximo posible. El objetivo principal es ayudar al usuario a documentar sus lesiones activas y, de esta forma, mantener informado a su médico en el día a día y con el tiempo ofrecerle una vista global de su caso. Objetivo que se aborda a través de tres secciones: un diario, una acción rápida de “documentar” y un chat con dermatólogo-paciente. Puedes explorar el esquema de arquitectura de la información aquí.
1/ Diario
La home sirve a modo de diario. Lo primero que muestra es la información referente al presente: las lesiones que tiene que documentar hoy y qué tratamiento debe aplicar. Estos datos son actualizados por su médico.
Con la barra de tiempo puede previsualizar si tiene una cita próxima y navegar hacia los días pasados y futuros.
Además siempre está disponible la vista de calendario.
2/ Documentar
Cristina puede documentar tanto sus tareas programadas como cualquier otra nueva lesión que aparezca. Su médico será notificado en cualquier caso.
El proceso de documentación es guiado. Tendrá que completar 4 pasos en total, primero tres fotografías de la lesión (cada parte del cuerpo se documenta de una forma concreta).
Para asegurar la calidad de las fotografías la app detecta la luz, el encuadre y el enfoque. En caso de que alguna fotografía no cumpliera alguno de los estándares anteriores la propia app informaría al usuario sobre el tipo de error para que repita la toma con mayor calidad.
Tras las fotografías llega al paso final, un cuestionario en el que la usuaria puede indicar qué síntomas y en que nivel está padeciendo en la lesión. Además puede complementar esta información escribiendo más detalles en el campo de texto.
Más tarde su médico revisará la información enviada y podrá dejarle comentarios en la ficha de la tarea. En la tarea la usuaria puede ver si su médico la ha revisado o está pendiente de hacerlo.
3/ Chat
Cristina y su especialista están en contacto a través del chat. En él no solo pueden escribir mensajes sino que también quedará registrada cualquier actividad dentro de la app por ambas partes. Cada módulo de información tiene un color asociado.
👉 Puedes probar el prototipo en Figma aquí
Acompañar en procesos largos
Con Enola el proceso que transita Cristina es muy diferente al que estaba acostumbrada. A pesar de que como paciente crónica tiene que pasar por momentos difíciles, ahora las situaciones de malestar se amortiguan gracias al acompañamiento constante de su dermatólogo.
Para el médico Enola significa continuidad, facilidad y agilidad en un seguimiento que de otra manera sería muy difícil llevar a cabo. También significa conocer a fondo a sus pacientes y ver su caso desde una perspectiva amplia.
El diseño de experiencia de paciente es un campo de trabajo tan necesario como amplio. Yo he intentado abordar la cuestión desde una problemática muy concreta y acotada como respuesta a una necesidad palpable. Más allá de este caso, más allá del resultado, más allá del proyecto y sus procesos, me quedo con algo esencial y que no tenía hace ocho meses:
La idea de que el buen diseño comienza poniendo a las personas en el centro forma parte de mi.
Enola no existiría sin el acompañamiento constante que he tenido a lo largo del proyecto. Mi hermana Elvira que me indicó el camino. Las personas que dedicaron su tiempo a responder mis preguntas, especialmente Cristina, que me hicieron entender los problemas reales de los pacientes, ponerles cara y alma. Mi mentor Diego que me ayudó a pensar, a tomar decisiones fundadas y, más importante aún, a bajarlas a tierra. Mi mentora-de-vida Ángela que ha estado ahí desde que escribí el primer post-it. Mis queridísmos compañeros grumetes que sin ellos esta app no tendría un naming tan guay, ni podría haber terminado este proyecto en mi sano juicio, ni el proceso hubiera sido tan divertido. La Nave Nodriza y toda su tripulación que me han dado las herramientas, las guías y el cuidado para que yo pudiera diseñar una herramienta de guía en el cuidado. Gracias a todos.
