OPHELIA contra la ‘asesina silenciosa’
OPHELIA nace como un tratamiento complementario, prescrito por el profesional de atención primaria, con el objetivo de ayudar a los pacientes con hipertensión a lograr mejorar sus hábitos de vida.
“La mejor medicina de todas es enseñarle a la gente cómo no necesitarla” (Hipócrates)
Desde la Nave Nodriza nos plantearon el siguiente reto:
¿Cómo podríamos favorecer la salud y el bienestar de la ciudadanía, a través de productos y servicios digitales relativos a la salud pública, con especial atención a las necesidades post-pandemia?
Ante la amplitud del contexto del reto, lo desglosé primero en dos sub preguntas: qué es salud y bienestar por un lado y, qué es pandemia por otro.
Profundizando sobre todo en ésta última, si bien en el enunciado del reto se hace referencia al COVID-19 como pandemia, quise investigar más sobre las pandemias en general. Esto me llevó a descubrir algo insólito; en lo que va de año 2022 han fallecido 6 millones de personas por enfermedad cardiovascular, las mismas que por Covid, pero desde que empezó la pandemia. Lo cual hizo plantearme…
Entonces, ¿Cuál es la verdadera pandemia?
HIPERTENSIÓN, “la asesina silenciosa”
En España, el 40% de la población adulta tiene la presión arterial alta, un porcentaje que aumenta hasta el 60% en personas mayores de 65 años.
La hipertensión es ya tan frecuente que lo hemos normalizado.
El aumento de la prosperidad en todo el mundo, los cambios en los hábitos de vida y la alimentación, son causa de nuevas amenazas para la salud.
Se puede tener un cuadro de tensión arterial elevada y encontrarse bien.
Tras este hallazgo, me surgió una nueva pregunta para lo cuál seguí realizando desk research y clasificando la información:
¿Cómo podríamos conseguir reducir el porcentaje de población con hipertensión?
Se ha visto que cambios en el estilo de vida son eficaces para mejorar la salud de las personas y disminuir la carga de enfermedad, siendo las medidas de promoción de la salud las que tienen una mayor rentabilidad preventiva.
“Si controlas tu presión arterial exitosamente con un estilo de vida saludable, podrías evitar, retrasar o reducir la necesidad de tomar medicamentos” (Dr. Pallarés)
Por tanto, si hay un alto porcentaje de hipertensos en España y, estudios demuestran que los hábitos de vida están estrechamente relacionados, me surgió otra pregunta:
¿Cómo podríamos conseguir que las personas con hipertensión inicien hábitos de vida saludables?
En este punto de la investigación, ya estaba preparada para hacer entrevistas para validar la información y entender mejor el problema.
Entrevisté a 5 personas de entre 39 y 69 años con hipertensión y con medicación prescrita.
Como resultado de mi investigación identifiqué patrones de conducta comunes:
- La persona acude a consulta como resultado del accidente cardiovascular de un familiar cercano
- Tras recibir la prescripción de medicamentos, la mayoría deja de acudir a las revisiones
- Ninguna hizo caso de las recomendaciones de su médico sobre bajar de peso, dejar de fumar y eliminar la sal de las comidas
- Todos preferían tomar una pastilla a hacer “sacrificios”
“He dejado de tomarme la tensión después de empezar la medicación”
“Me medico desde hace 22 años”
“Me gusta mucho vivir “normal”
“No me quité de fumar, ya fumaba antes de la HP y sigo fumando ahora”
“No quiero llevar una vida privada de todo”
“Me da igual medicarme, no me importa, se que a la larga por tema familiares con medicación y todo te puede pasar algo, pero de momento prefiero estar así”
Para validar estos aprendizajes, hice una segunda ronda de entrevistas a las mismas personas, incidiendo esta vez en los motivos o barreras que encontraban estos pacientes a la hora de seguir las recomendaciones del médico.
Como resultado de este ejercicio, extraje los siguientes insights:
“El médico de atención primaria quiere ayudar al paciente con hipertensión a adquirir hábitos de vida saludables porque así éste previene o retrasa la enfermedad, pero la saturación de la sanidad obstaculiza al médico, que no tiene ni el tiempo ni las herramientas.”
“Las personas con hipertensión que tienen malos hábitos de vida quieren empezar a cuidarse porque saben que es positivo para su salud pero no tienen la fuerza de voluntad.”
A raíz de estos insights, vi la necesidad de redefinir el reto, focalizando en la dificultad que encuentran los pacientes a la hora de llevar a cabo parte del tratamiento:
¿Cómo podríamos hacer que las personas con hipertensión, inicien y mantengan hábitos de vida saludables, acompañándolas en el proceso?
Para ello creé un arquetipo de comportamiento que reuniera las características de personas que tuviesen esta condición y las plasmé en el siguiente user persona:
Desarrollé los User Journey o recorrido de médico y paciente antes, durante y después de la consulta para detectar los pain points de ambos y las áreas de oportunidad de cara a la ideación de mi solución:
- Vicente se encuentra solo entre consulta y consulta, desorientado y sin saber muy bien cómo llevar a cabo las recomendaciones de su médico, por lo que finalmente decide no volver .
- Y por parte del médico, la falta de tiempo en consulta, le convierten en un mero prescriptor de medicamentos para tratar enfermedades, sin apenas recursos para poder practicar la medicina preventiva, con lo que los enfermos aumentan y la consulta se satura más, en un ciclo que se retroalimenta.
Integrado dentro del servicio de Atención Primaria como un servicio complementario, Ophelia está dirigido a pacientes con factores de riesgo, medicados y de entre 35 a 55 años.
Con Ophelia, el paciente entra a formar parte de un programa , en el que una figura denominada “entrenador de salud”, le guiará y acompañará para lograr cambiar su estilo de vida.
El paciente deberá descargarse una aplicación móvil, donde se llevará un seguimiento de su tratamiento al compartirse los datos con su médico y su entrenador.
Especificar que, el entrenador de salud, no actuarían como “dador de consejos” sino como aliado del paciente y facilitador del cambio:
Se trata más de dejar que el paciente piense y de que tome las decisiones y, los entrenadores de salud, simplemente ser la persona que los ayuda a tomar esas decisiones.
¿Por qué Ophelia?
Ofelia (Ophelia) es un nombre personal femenino que deriva del griego antiguo όφελος (ophelos) que significa ‘ayuda’, ‘fomento’.
Y aquí como quedó la app:
Impacto en el sistema sanitario
Con Ophelia ayudamos a los médicos en la tarea de promover la salud en los pacientes con hipertensión, acompañarles y conseguir reducir o evitar la medicación, con el consiguiente beneficio, no solo de la población, sino también en el sistema sanitario con la reducción de costes en medicamentos.
Y, por otra parte, el paciente ya no está solo durante su tratamiento. Cuenta con la ayuda de un entrenador de salud como aliado que le empodera logrando mejorar significativamente su salud y calidad de vida, con el consiguiente aumento de autoestima.
Un poco sobre mi…
Me llamo Nuria Muñoz y cuento con 15 años de experiencia en el ámbito del diseño. Disfruto creando soluciones de diseño innovadoras y reflexivas para hacer la vida un poco más placentera.
Agradecimientos a: Daniela, Isa, Amparo, Ángela, Carmen, Lu, Nacho, Kike, Bowie y, en general, a todos los profesores… por su ayuda, apoyo y predisposición durante todo el proceso de aprendizaje.
Puedes contactarme aquí: nuriamugar@gmail.com
