El desperdicio: octavo pecado capital del siglo XXI

Santiago Valdés
Santiago Valdes
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11 min readApr 1, 2017

English version here.

Yo creo que a casi todos nos tocó en su momento nuestra mamá/papá diciendo con un tono inculpador: “Hay muchos que no tienen nada que comer. Termínate tu plato de cucarachas…” (bueno, a eso nos sabía). Todos los que no podíamos aceptar la derrota sin tener primero un intento de disuadir a la autoridad teníamos frases que podían ir desde “pues ve a darles lo que me sobró a mí”, “de todos modos ellos no lo van a comer”, hasta “pero estoy lleno”, dependiendo de nuestro grado de altanería.

A lo que voy con esto no es a que hicimos mal de pequeños, sino que teníamos un punto: “¿para qué esforzarme comiendo esto si conmigo no se aprovecha por (insertar razón)?”. Claro, el punto estaba, no el criterio ni la madurez, por eso de todos modos llegaba la cucharada de espinacas a nuestra boca a la fuerza. Pero aprovechando que ya crecí y aprendí a bañarme sin que me caiga shampoo en los ojos, quisiera volver a intentar profundizar un poco en el tema del aprovechamiento/desperdicio de los recursos, con su debido permiso.

1. Problema

Creo firmemente que el desperdicio es práctica común de virtualmente cualquiera que lea esto. ¿Pero por qué me interesa hablarlo? Sin afán de recurrir a “¿tienes el valor, o te vale?”, saqué unos cuantos datos de 3 tipos de desperdicio que, independientemente de la causa, nos sirven para hacer un poco de consciencia de las magnitudes que alcanzamos como comunidad cuando extrapolamos nuestros hábitos cotidianos. Y sí, estos pueden incluir sobrellenar un estómago, mamá.

Nota: Pondré algunos datos. Si son demasiados como para distraerlos, los invito a saltarse los bullets y ver el mensaje al que quiero llegar con ellos.

Nota 2: Agregué las referencias de mis datos al final de esta entrada.

1.1. Desperdicio de agua

No hice el estudio académico, porque mucho es de sentido común (y por flojera… también por flojera). Pero busqué datos en el Centro Virtual de Información del Agua (link en apartado de referencias). De acuerdo a ellos:

  • El mayor desperdicio se da en el inodoro con un 36% del consumo (¿y cuánto de esto se va en descargas puramente líquidas?), seguido de la higiene personal con un 31% (mientras cantamos en la regadera), y 33% restante en otras actividades menores.
  • El cálculo de las pérdidas de agua por día y mes causadas por deterioro de aparatos sanitarios es el que sigue:
  • Un grifo que gotea desperdicia 80 litros de agua por día; un chorro fino de agua, de 1.6 mm de diámetro, pierde 180 litros por día. Uno más grueso, de 3.2 mm de diámetro, pierde 675 litros por día.
  • Un inodoro en mal estado pierde al día 5,000 litros de agua.

Está cañón, ¿no? Yo sabía que el daño es fuerte, pero no dimensionaba estas cantidades. Y ni siquiera es que sea cosa exclusiva de los adinerados despilfarradores. Hace una semana vi a la señora de limpieza de la oficina sostener una conversación de unos minutitos con el grifo abierto a casi el máximo. Me empecé a inquietar y estuve a 10 segundos de decirle algo, hasta que volvió a prestarle atención al fregadero.

Incluso para los que a veces tenemos posturas un poco egoístas y pensamos que a nosotros no nos afectará, debemos saber que no es cosa de “en África, India …”. En la misma página de la que obtuve los datos encontré que México es un país con relativamente muy baja disponibilidad de agua en relación al resto del planeta. En gran parte, somos un país árido y semiárido, y actualmente tenemos solo el 22% del agua que teníamos en los 50’s. En otras palabras, no tenemos cambio de sobra.

1.2 Desperdicio de comida

Esta se me hace muy interesante, porque no necesariamente somos culpables de los números de la Food and Agriculture Organization (FAO) que voy a presentar. Aunque no hay que olvidar que siempre cargamos con algo de responsabilidad colectiva.

  • El volumen mundial de despilfarro total de los alimentos para la parte comestible equivale a 1,300 millones de toneladas.
  • El volumen total de agua que se utiliza cada año para producir los alimentos que se pierden o desperdician (250km3) equivale al caudal anual del río Volga en Rusia.
  • La agricultura es responsable de la mayoría de las amenazas a las plantas y especies animales en peligro de extinción controladas por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. Esto es tema serio.
  • El compostaje doméstico puede desviar potencialmente hasta 150 kg de residuos de alimentos por hogar al año (hay aproximadamente 30M de hogares) y que no terminen en el sistema local de tratamiento de basuras.

Ok, eso nos da una idea Y dentro de este último punto, me metí a otro link que decía un poco más sobre los factores principales de desperdicio de comida en México. Resulta que nuestra falla del 37.26% de desperdicio está cargada principalmente en la cadena de valor y en los hábitos de consumo. Para que sepamos cuál es nuestro rol en este problema, les comento que estos últimos incluyen:

  • Sobre-madurez (no lo comimos a tiempo).
  • Compras excesivas (sobre estimamos nuestra panza).
  • Manejo inadecuado de la mercancía (se nos cayeron los elotes).
  • Producto maltratado/en mal estado (all of the above, ¿supongo?)
  • Mezcla de producto en buen estado con producto no apto para el consumo.

Por lo que cuidar el desperdicio personal de comida sí tiene un impacto en las groseras cifras que enlisté.

1.3 Desperdicio de electrónicos

Fácil, FÁCIL han escuchado a alguien decir “… y como ya me van a cambiar el celular, me vale.”, ya sea antes o después de echarlo a perder o tener algún accidente. Gente, ¡los aparatos electrónicos valen una buena lana incluso cuando dejan de funcionar! Y si siguieran funcionando, estoy seguro de que hay muchas personas que arrebatarían el celular de la mano en las condiciones que lo tengamos si se los ofrecemos (y algunos hasta sin ofrecerlo, claro).

De acuerdo a la Environmental Protection Agency (EPA) y algunos datos de Earth 911:

  • Reciclar 1M de laptops ahorra la energía equivalente a la electricidad utilizada en 3,500 hogares estadounidenses anualmente.
  • Solo 1/8 de los desperdicios de electrónicos se recicla.
  • Hay más celulares que gente en el mundo (>7 billones). Y su tasa de crecimiento es 5 veces mayor que la del crecimiento poblacional.
  • Por cada 1M de celulares reciclaros se recuperan: 16,000 kg de cobre, 350 kg de plata, 34 kg de oro, 15 kg de paladio.

Y la gente está haciendo experimentos para hacerlos explotar, romperles la pantalla, y ver cuánto dura en la licuadora/el microondas. Cabe mencionar que a estos datos todavía falta sumarles los materiales que se pierden en la producción (agua, químicos, combustible, etc.) en vano.

2. El punto

Ahora sí. La Real Academia Española define desperdicio como: “residuo de lo que no se puede o no es fácil aprovechar o se deja de utilizar por descuido.” Para facilitarnos las cosas, aclaro que cuando hablo de desperdicio me refiero a la parte en negritas.

Podría ponerme a predicar aquí todo lo que creo que hacemos mal en nuestro día a día. Pero ahorita no tengo ganas de hacer libros, con el blog me basta. Además, creo que la gran mayoría conoce sus talones de Aquiles. Pero el mensaje que quiero transmitir realmente es que el desperdicio es básicamente no aprovechar los recursos al máximo, y se puede desperdiciar mucho menos sin necesidad de hacer cambios significativos en nuestro estilo de vida; logrando así mejoras significativas en conjunto. Por lo que creo que es tiempo de que comencemos a tenerlo un poco más en mente, para que eventualmente no lo pensemos en lo absoluto y hagamos todo de forma correcta.

En relación a este mensaje, hace unos años leí una frase conocida de Gustavo Petro que les quiero compartir (no sé quién es, pero busqué su frase y me salió que era de él): “un país desarrollado no es donde los pobres tienen autos, sino donde los ricos usan el transporte público”. Se me hizo muy poderosa, y creo que es algo a lo que debemos aspirar en cada oportunidad que se presente. Tenemos que buscar siempre hacer uso eficiente de nuestros recursos. Eso incluye desde el tiempo hasta las servilletas. Hay que quitarnos ese “da igual, a mí no me afecta”, “¿para qué? no va a hacer diferencia a nadie”, “uno más, uno menos” o el que sea que usemos para justificar lo que sabemos que no es dar nuestra mejor versión personal. No estoy diciendo que estemos siempre equivocados al decirlo. Pero es muy difícil realmente tener la perspectiva completa de lo que nuestras acciones causan, así que más vale pecar de prudentes y hacernos buenos hábitos; ya que todo, en mayor o menor medida, nos afecta. Muchas veces volteamos a ver a los europeos aspirando a ser como ellos, pero ese estatus no lo alcanzaron de la noche a la mañana. Sino que más bien lo fueron fomentando con pequeños hábitos que poco a poco se hicieron culturales. Es por eso que ahora, mientras que en CDMX pierden 14 días de su vida al año en el tráfico, pensamos: “en Holanda usan bicicletas, y avanzan más rápido que yo”.

Los datos que utilicé en este primer escrito no son más que unos cuantos ejemplos de lo más nuclear del problema. Pero no se limiten a comida, agua, y aparatos. En verdad pensemos en el potencial que podemos explotar si hacemos esfuerzos mínimos para aprovechar lo que tenemos a la disposición. Porque ahí sí, tenemos el deber moral de aprovechar lo que muchos otros matarían por tener (insisto, desde tiempo hasta servilletas). Los tiempos en que la humanidad pensaba en recursos ilimitados quedaron atrás hace mucho. Es momento de despertar y ponerse al corriente.

3. Acciones concretas

Decidí que esta primera entrada en mi primer blog fuera sobre este tema porque me inspiró el movimiento de @RevolucionRefill: #UnSoloVaso #RevolucionRefill. Básicamente propone algo tan sencillo como reusar el mismo vaso para hacer el refill de la cerveza en el festival Pa’l Norte. Reusar. el. mismo. vaso. Algo tan sencillo puede hacer que las 170,000 personas asistentes no generen literalmente toneladas de desperdicio de plástico, un material muy poco favorable al medio ambiente.

Así que siguiendo el ejemplo, y con el afán de no regañar pero sí promover, aquí hay algunas ideas de cosas que pueden hacer para aportar un granito de arena a la vez. Sí, yo sé que muchos no ven el potencial que esto tiene. Pero al menos creo que debemos hacerlo por el beneficio directo (incluso económico) o indirecto que pueda llegar a tener en nosotros y en la comunidad, y por tener una consciencia sana en cuanto a la huella y el ejemplo que dejamos. Tal vez ya han escuchado algunas, pero por si acaso no, aquí las enlisto. POR OTRO LADO, los invito a que comenten otras ideas que se les ocurran y que compartan el mensaje.

Algunas sugerencias que se me ocurren son:

Agua

  • Cerrar la llave cuando no la usamos.
  • Cerrar la llave cuando no la usamos.
  • Cerrar la llave cuando no la usamos.
  • Al bañarse, usar el agua para mojar y enjuagar. Pero no para rasurarse o pensar lo que se pudo haber dicho al bully a los 7 años. Entrar al agua aunque esté fría con la pura cabeza, en lo que se calienta y se mete el cuerpo, y cerrarla una vez mojados. Volver a abrir y cerrar siempre que se ocupe para mojar la esponja, el trapo, el jabón, etc. Yo creo que nos daremos cuenta de que realmente no se ocupa el 80% del tiempo.
  • Al lavarse los dientes y rasurarse, misma lógica.
  • En el baño personal, poner botellas de agua en la carga del baño si se considera que le sobra agua en la descarga.
  • En el baño personal, no jalarle si se usa para la primera necesidad.
  • En los baños públicos, si se puede, hombres usar el mingitorio y no el trono para la primera necesidad.
  • Aguas con las fugas.
  • Asegurarse de cerrar bien llaves para que no goteen. Si de plano el empaque está malo, poner algo para acumular el agua que gotea (neta se junta un chorro).
  • Usar cubetas -no mangueras- para lavar el carro.
  • Avisar al responsable de fugas de las que pueda no estar enterado.
  • Acabarse las botellas de agua antes de tirarlas y procurar de pasada reusarlas.

Comida

  • Pedir de menos y no de más comida en los restaurantes, ordenar más si hace falta (ahorra lana).
  • Evitar pedir a domicilio, pasar por la comida de camino a casa (por todos los empaques y bolsas de plástico que se desperdician).
  • “Sin popote por favor”. También sirve, ¿qué le hago? Agregarle: sin servilleta, cubiertos, bolsa, que no se necesite. Creo que en Londres ya pusieron cargo extra a las bolsas de plástico.
  • Pedirle al mesero que le quite las decoraciones que no se consumirán del platillo.
  • Cuidar la comida y no comprarla madura de más para no terminar queriendo tirarla.
  • ¿Composta? ¿Por qué no? No creo que sea difícil de hacer.

Electrónicos

  • Para la computadora o laptop, considerar actualizar el hardware o software en lugar de comprar un producto nuevo.
  • Considerar estirar la vida del producto en vez de renovar cada 6 meses o cada año.
  • Retirar las baterías del aparato, es posible que tengan que ser reciclados por separado.
  • Revisar las instalaciones de reciclaje en la comunidad. Más vale regalar los aparatos a los que pueden sacarle provecho que tirarlos. PERO algunos incluso pagan por lo que tirarías a la basura.
  • No importa que el plan de la compañía de celular ya mero dé el siguiente aparato, está de más echar a perder el que tenemos.
  • Apagar luces, televisiones, computadoras, consolas, tablets. Todo lo que no se use.
  • Leer el instructivo para saber cómo protegerlos contra variaciones de voltaje y contra desgaste de prematuro de la batería, para evitar aparatos freídos.

Generales

  • Más que usar UBER, hacer viajes con amigos al trabajo o la escuela. Turnarse el carro cuando viven cerca. Ahorramos gasolina, emisiones, tráfico, soledad, aburrimiento, estrés en el tráfico… etc. Ahorita lo estoy haciendo y, en verdad, tiene muchos beneficios con muy poco sacrificio. No tengo duda de que salgo ganando.
  • Hablando de tráfico, pitar muchas veces sale sobrando, así como el odio y los insultos. Hay que vivir la paz, brother/sister from another mother. Todos cometemos errores y rara vez se gana algo de hacer corajes por el otro. Eso sí, si evitamos ser gandallas pues ahorramos corajes ya de cajón.
  • De la mano de los insultos y corajes, hay que ser impecables con nuestras palabras. Recomiendo el libro “Los cuatro acuerdos”; está cortito y vale la pena.
  • Llevar bolsas de plástico propias o bolsas reusables al supermercado. Y no pedir bolsas cuando no hacen falta. En Europa cobran por bolsa para incentivar que lleven las propias.
  • Tirar basura (incluye colillas de cigarro) en un lugar apropiado.
  • Usar shampoo, pasta de dientes, crema de afeitar, crema normal, loción, entre otras cosas, en la medida que sea suficiente. De nada sirve escupir la mitad de la pasta que al principio pusimos en el cepillo para que se pareciera a la del anuncio.

4. Cierre

Y bueno… hay mucho más, estoy seguro. Anímense a escribir lo que hacen ustedes en el día a día. Debe haber muchas ideas creativas que no cuesten nada.

Espero que les haya gustado el mensaje y que quizás hayan aprendido algo valioso de lo que les compartí. Estaré revisando sus comentarios y críticas (ambos bienvenidos) y me propondré seguir escribiendo de cosas de las que creo que todos podemos sacar provecho.

Love,

Santi.

Para conocer las intenciones del autor con sus escritos, lee la primera entrada: ¿Qué pretende este blog?

Referencias:

Comida

http://www.fao.org/news/story/es/item/196450/icode/

http://www.fao.org/3/I4655S.pdf

Agua

http://www.agua.org.mx/index.php?option=com_content

http://www.agua.org.mx/el-agua/agua-en-mexico

Electrónica

https://www.epa.gov/recycle/electronics-donation-and-recycling

http://earth911.com/eco-tech/20-e-waste-facts/

Tráfico

http://www.elfinanciero.com.mx/nacional/por-plantones-y-marchas-cada-capitalino-pierde-al-ano-242-horas.html

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Santiago Valdés
Santiago Valdes

Management Consultant and lifetime Drummer, passionate of the different forms of expression and the everlasting social instrospection and improvement.