Hackeando hábitos para amplificar mi aprendizaje

Hace un par de días atrás estuve intercambiando mensajes por Linkedin alrededor del tema de aprendizaje. Ese intercambio terminó en mensaje muy largo sobre cómo utilizo un hack para amplificar el mío.

Para los que me conocen un poco sabrán que me encanta aprender! Es una de las actividades que más disfruto hacer y en la cual invierto un grueso porcentaje de mi tiempo. Adicionalmente paso mucho tiempo aprendiendo sobre los hábitos y cómo utilizarlos para generar cambios.

Así que en este artículo les quiero compartir un poco de cómo uso ambas cosas para amplificar mi aprendizaje.

¿Qué aprendí sobre mis aprendizajes?

Cuando pienso en amplificar mi aprendizaje siempre se me viene a la memoria una conversación con Olaf Lewitz en la conferencia Agile2015 en Washington, DC. Durante la conversación con Olaf, descubrí que mi principal estilo de aprendizaje estaba basado en la ejecución y la exploración. En otras palabras aprendo más efectivamente cuando ejecuto algo incluso sin llegar a comprenderlo del todo y descubriendo en el camino cosas. Adicionalmente, cuando invierto mucho tiempo en entender un concepto sin ejecutarlo de inmediato mi aprendizaje se desacelera o incluso se trunca.

Yo suelo resumir esto como: “Necesito ejecutar en incertidumbre para amplificar mi aprendizaje”

Claramente no pretendo que otras personas resuenen con este estilo de aprendizaje, pero si los invito a reflexionar sobre su estilo propio:

Usualmente, ¿de qué manera aprendes de forma más efectiva? ¿Qué características tiene “esa manera”?

Los hábitos como la puerta

Como alguien que se considera un curioso del mundo de los hábitos, naturalmente pensé en que la mejor forma de amplificar mi aprendizaje es a través de un hábito o mejor dicho a través del hackeo de uno de mis hábitos ya existentes.

Por si alguno no lo sabe un hábito está compuesto principalmente por tres partes:

• Un gatillo (trigger): Este es el disparado del hábito, el estímulo que hace que ejecutemos el hábito. Usualmente relacionada a una necesidad.
• Una acción: Este es el hábito mismo, lo que ejecutamos.
• Una recompensa: Esto es lo que obtenemos al ejecutar el hábito. Usualmente está relacionada a la necesidad del trigger.

Pongamos un ejemplo para ilustrar este tema.

Imaginémonos que un hábito que tengo es tomar una taza de café al levantarme en la mañana, lo podríamos descomponer en:

• Gatillo: Me levanto en la mañana. Además tengo la necesidad de estar activo y quitarme el sueño
• Acción: Tomar la taza de café
• Recompensa: Estar activo para iniciar el día.

Es así que si piensan en cualquier hábito que tienen, seguramente lo van a poder descomponer en esas tres partes.

Tiny Habits como hack

Lo poderoso de identificar tu hábitos es que puedes usarlos para hackear comportamientos propios, en este caso, para amplificar el aprendizaje.

Hay diversas técnicas para hacer este cambio, pero particularmente yo estoy usando uno basado en Tiny Habits.

Tiny Habits lo que busca es introducir un comportamiento nuevo basado en un trigger pre-existente, con la siguiente estructura:

Cuando <trigger existente>

En lugar de <acción actual>

Yo <nueva acción>

Mi último hack para amplificar mi aprendizaje

Es así que tomando un hábito que ya tengo, sumado a mi estilo de aprendizaje, el último Tiny Habit que estoy probando para amplificar mi aprendizaje sigue así:

Cuando termino una sesión

En lugar de saltar a la siguiente tarea

Yo me voy a tomar 10 minutos para escribir en Notion un aprendizaje, ejecutarlo y enseñarlo.

Una sesión en mi caso es un conjunto de pomodoros sobre una tarea en particular, o una call de trabajo, o un webinar/curso. Tengo ya el hábito adquirido de partir mis días en sesiones por lo que el trigger “cuando termino una sesión” es consistente.

Adicionalmente ejecutar y enseñar el aprendizaje está directamente relacionado a mi estilo de aprendizaje, es así que no reflexiono sobre el tema o indago, sino que ejecuto con incertidumbre.

Gracias a este hack usualmente tengo entre 4 o 5 micro-aprendizajes de forma diaria, y en la mayoría de veces no solo perduran sino que les saco provecho en el corto plazo.

Finalmente, los quería invitar a que busquen un hábito al que puedan hackear para amplificar su aprendizaje en función de su estilo particular.