Cómo evitar el desgaste emocional al enfrentarse a los machos, el silencio no nos protegerá
Siempre me disculpo por hablar mucho, por no quedarme callada, por decir que no diré nada y casi ya hasta armé una presentación de power point para exponer, no sé si es mi propia ansiedad por los traumas que aún no resuelvo, lo menciono porque desde niña siempre fui muy platicadora o muy curiosa con todo, y siempre había ese regaño de: ya, ya, Sh, shh. A lo que voy es que creo que solo debería disculparme conmigo misma por sentirme mal por hablar mucho y sentir que terminaré aburriendo a la gente con los mismos temas o cuando hablo sobre algo que no me parece y que me molesta. Hace unos días vi una imagen en Facebook que contenía la siguiente frase:
Yo no soy un ejemplo de feminismo y no soy leída como una feminista congruente ni radical, pero he enfocado mi trabajo político en combatir agresores y no en combatir a otras feministas. Con eso estoy orgullosa y satisfecha. Eso es lo que todo lo que quiero y decido dar.
Enfrentar, discutir, dialogar o cualquiera de las manifestaciones que se tomen ante comentarios misóginos e intolerantes que su único objetivo es fomentar el odio, termina siendo desgastante para nosotras, a veces es mucha la impotencia por la pésima empatía de ellos, y yo agregaría que es mucho el coraje por tratar de iniciar un diálogo y recibir sarcasmo y burlas.
Nosotras no terminaremos re-educando a hombres sin empatía y con pensamientos machistas, mucho menos con conductas patriarcales y de violencia. No somos un centro reformativo, ni de asesoría a los machos, la televisión, la publicidad, y todo el enfoque de comunicación está permeado de conductas misóginas que nosotras hemos visibilizado y combatido con mucho esfuerzo, porque me atrevo a decir que yo no recibí una educación meramente feminista, crecí en una familia con acciones patriarcales en donde hoy es fecha que siguen realizándolas. Sin embargo he decidido poco a poco alejarme de aquel ambiente, arreglarme más en mis pensamientos y apapacharme con mis amigas y con las que he podido fluir de manera que no se sienta que incomodo solo por manifestar las inconformidades que tengo ante los machos. Al final la lucha feminista es para y por nosotras excluyendo a los hombres y todavía más a los misóginos.
La familia ideal es un núcleo que nos vendió el estado, la televisión y últimamente cualquier medio de comunicación, en donde incluso se han aprovechado de temas como el feminismo, la sexualidad, el despojo del amor romántico y diversos temas que han salido a la luz, para generar marketing en sus productos principalmente audiovisuales, son pocos los medios que realmente buscan la reconstrucción de todos para un ambiente de justicia y respeto, los demás solo se andan colgando de las iniciativas para recibir más vistas.
Cómo he mencionado antes, a la única que le debo una disculpa es a mi misma por tratar de callarme solo por sentirme mal por hablar tanto, o por incomodar, y como el objetivo de este texto en teoría es resolver un "cómo", regresaré a ello: (me siento con la confianza de compartir una experiencia personal como lo fue al inicio de este texto) me ha servido, no callarme, escribir, ser bien revoltosa y bien incómoda, y si de plano algo ya está sofocándome emocionalmente decido desterrar y ser cero tolerante ante eso, y aunque sabemos que no nos sirve llenarnos de mala vibra y corajes por nuestra salud emocional y física, el coraje sirve para eliminar personas y acciones violentas y misóginas de mi núcleo, y de mi círculo, y otro punto importante para evitar el hostigamiento emocional es enfrentarlos, balconearlos, visibilizar la violencia y denunciarlos.
Me he construido con el feminismo, y debo decir que no me ha sido doloroso alejarme de quienes me han agredido o de quienes me he enterado que han agredido a otras mujeres, solo me hubiera gustado haber recibido esa iniciativa hace muchos años, así se habrían evitado tantas injusticias. Sentir coraje y desgaste emocional al enfrentarse a los machos es algo que quizá hemos vivido más de una vez al día, no lo sé ustedes pero yo cada que veo algo en facebook, instagram o cualquier lado que promueve burlas contra la lucha feminista me da mucho coraje y me enojo tanto. Por lo que he tratado de cuidarme emocionalmente y de seguir actuando, defendiendo y denunciando.
Ante el desgaste emocional, también está la parte buena que es sentirse cada vez más fuerte y más protegida por otras hermanas, así que lo vale todo, ser incómoda y ser revoltosa para lograr más actos a nuestro favor, empezando por estar más cómodas con nosotras mismas, ser felices por crear lazos afectivos cada vez más sanos, amistades más reales y familia que no nos juzgue y para ello no debemos callarnos jamás.
