La decadencia de Black Mirror

Ya casi se van a cumplir 9 años del primer capítulo de Black Mirror, y ese en realidad no es el pretexto por el que quise escribirles sobre esta serie tan maravillosa que nos vino a dejar ciertos miedos de nuestro presente simulándolos a futuro. La realidad por la que quise escribir sobre Black Mirror fue por que soñé con la serie. Lo único que recuerdo fue que veía una reseña donde hablaban sobre aquella falta de argumentos en un capítulo nuevo en donde había una especie de zombificación debido al apego a los celulares, y si, así de horrible como suena así fue mi sueño.

Dicen que tan solo el mismo 2020 es un capítulo de Black Mirror, incluso ellos hicieron una broma al respecto en Facebook, no sé si recuerdan esa imagen que publicaron en sus redes:

Y pues cómo no, toda esta temporada tan surreal en la que prácticamente nos comimos las uñas más de una cuarentena. Y miren la verdad no quiero tocar temas sobre eso, porque ya bastante estamos fastidiados con el tema. Así que a lo que vamos, encontremos juntos aquella decadencia que fue bastante notoria en la ultima temporada de Black Mirror y en algunos otros capítulos e incluso en su entrega especial: Bandersnatch.

Pero antes recordemos algunos de los mejores capítulos (que al menos para mi lo fueron).

Be Right Back (Capítulo 1, Temporada 2)

A este capítulo le guardo un cariño en especial, y es probablemente por ese sentimiento que es de mis favoritos. Fue el primer capítulo que vi de esta serie, en el 2016 cuando estudiaba cine, lo proyectaron en mi clase de ficción, justo para analizarlo, fue así como conocí todo el mundo de Black Mirror, y así comencé a tener más acercamiento a la serie.

Al ver por primera vez una producción de este tipo y en una clase me dejó con muchas expectativas a lo que seguirían siendo los siguientes capítulos. En ese entonces Black Mirror aún no se encontraba en Netflix, así que me pasaron toda la primera y segunda temporada por USB.

Be right back, aparte de su argumento y de ser otra cosa más que ciencia ficción, me dejó ese sentimiento de incertidumbre y desesperación de no saber que haría yo en esa situación, ya que como Martha (Hayley Atwell) también me considero muy vulnerable a las pérdidas y con una eterna nostalgia. Ella, al perder a Ash (Domhnall Gleeson) entró en el clásico proceso psicológico de sanación donde justo en la etapa del duelo entre dejar ir o aferrarse al recuerdo, vino a ella una interesante propuesta por revivir a quien fuera su único compañero de vida. Y pues en esas palabras determinó este capítulo: incertidumbre y nostalgia.

The Entire History Of You (Capítulo 3, Temporada 1)

Este sin duda es de los capítulos que más impotencia me ha generado, creo que una de las mayores fortalezas y búsquedas de todo Black Mirror es ocasionar ese tipo de emociones en sus espectadores tales como frustración, desesperación el incluso incertidumbre a lo que pareciera un futuro muy cercano pero con historias muy reconocibles y vivenciales.

“Toda tu historia” como se llamaría el capítulo en español, nos muestra una terquedad por obtener ese privilegio de confiar en tus recuerdos por el hecho de grabar absolutamente todo y literalmente con los ojos; donde existe una memoria de una manera artificial y así mismo olvidarte de lo que habita en una consciencia natural… no sé ustedes pero al menos yo me considero que recuerdo demasiado las cosas y que incluso así como Liam (Toby Kebbell) parece que recupero datos atrasando o adelantado el recuerdo como si este se tratara de un capítulo en alguna serie.

Darnos visualmente la oportunidad de ver en los personajes aquella herramienta solo nos hace pensar que quizá nosotros hubiéramos optado por la misma opción que Liam, y recabar información que su esposa Fi (Jodie Whittaker) le guardó por tanto tiempo ocasionándose así, una quiebre intenso en nuestro protagonista, de cordura y de paciencia, llevándolo al borde la locura donde no solo se sintió engañado, sino casi encarcelado de sus propios recuerdos combinados con la línea de memoria de Fi y de Jonas.

Hated in the Nation (Capítulo 6, Temporada 3)

Este capítulo ya contaba como el primer largometraje de Black Mirror, sin necesidad de hacerle una mención especial o más propaganda externa, (si, si estoy hablando de Bandersnatch).
Odio Nacional fue un capítulo más de la temporada 3, pero por decir un capítulo más no lo estoy subestimando, sino que me refiero a que es un capítulo que sin ser pretencioso, (si, de nuevo me refiero a Bandersnatch) logró convertirse en lo que siempre busco Black Mirror, darnos un detalle de lo que en un futuro lejano, con actividades cotidianas puede llegar a pasarnos.

En este capítulo ya empezarían a entregarnos más easter eggs, en los que los siguientes capítulos, conoceríamos más artefactos con los que jugaría la serie, por ejemplo la posibilidad de ser vigilada por medio de los datos en que tenemos en la web y en las redes sociales, de cómo seguir tendencias juega un papel importante en pertenecer al mundo actual, Black Mirror prácticamente fue entregando sus elementos poco a poco a nosotros para que aunque las historias dieran ilusión que no tenían nada que ver una con la otra, había mucha conexión; incluso, ya lo habíamos visto en el capítulo de Blanca Navidad donde nos mostraron esa forma de recapitular recuerdos, ¡yissus craissst! hasta de bloquear gente de verdad.

Pero sin duda, aunque en los artefactos o elementos tecnológicos nos daban la intuición hacia la ciencia ficción, ese no era el brillo más importante de Black Mirror, era en la historia y el argumento donde la ciencia ficción jugaba con nuestra mente en donde nos posicionada en situaciones que parecieran tan irreales y sin embargo lográbamos empatizar al 100% por sentirlas tan cercanas.

Debo decir que cuando vi está historia de Odio Nacional lo hice completamente sola y con la luz apagada en mi cuarto, no había nadie en casa y fue de las sensaciones más terroríficas que llegue a sentir, el solo imaginar que una simple mala decisión de compartir una tendencia en redes sociales podría acabar con mi vida, eso y que también le tengo pavor a las abejas.

Shut up and Dance (Temporada 3, Capitulo 3)

ALV, solo de ver este gif se me pone chinita la piel, y es que sin duda es uno de mis favoritos mostrando no solo un excelente guión, actuaciones, locaciones, continuidad, banda sonora, argumento y por supuesto la carita tan creíble de Kenny (Alex Lawther), por este capítulo fue que comencé a ponerle curitas a la cámara web de mi computadora y bueno, me gusta demasiado este capítulo porque son tantas las veces que nos hablan sobre la facilidad del acceso de virus e incluso existen páginas de internet donde puedes observar las cámaras web del mundo… este capítulo solo genera mayor estrés al respecto dándole así una dosis mayor de drama, juntando la historia de las diferentes victimas de este troll que prácticamente les pide lo que sea y nuestros personajes lo hacen a manera de amenaza y manipulación.

Aquí nos adentramos una vez más a una situación en donde aunque no hubo tantos elementos tecnológicos como lo hemos visto en otros capítulos, llegamos al clímax con una historia tan pero tan fuerte que nos hace considerar dos veces lo que hacemos actualmente de nuestra vida privada.

Crocodile (Capítulo 2, Temporada 4)

Antes de empezar a dar mi punto de vista les quiero reconocer que yo también pensé que esté capítulo se iba a trata de la tal droga esa que deja a las personas como zombies, pero quedé como estúpida cuando lo vi. (xD)

Vaya que esté capítulo es de mi top si no es que mi favorito número 1. Cuando ya salió esta temporada en Netflix fue el primero que vi por la misma razón de morbo que les acabo de contar. Fue sin duda el capítulo que mayor pavor me generó, gracias esa magnífica actuación de Mía (Andrea Riseborough) quien con una sola expresión en su rostro nos daba una cantidad inmensa de incertidumbre, pánico, a la vez violencia pero sobre todo miedo. De nueva cuenta los elementos tecnológicos hacen un papel importante en esta historia como ese pequeño artefacto para localizar en la memoria recuerdos necesarios para la resolución de pequeños crímenes.
Crocodile nos hace analizarnos desde una posición que posiblemente no creemos futura donde prácticamente debemos olvidar nuestro pasado y reivindicarnos, pero donde la moraleja más antigua del mundo hace un papel importante: la verdad siempre saldrá a flote, y eso es justamente lo que crea el terror en este capítulo.

Les dejé 5 de mis capítulos favoritos con los que quise iniciar a hablar de esto ya que vuelvo a repetir: que lo grandiosos de al menos primeros capítulos de Black Mirror fue que no estábamos centrados en aquellos elementos tecnológicos sino en la sensación que estos ocasionaban, en situaciones irreales, siendo nuestro interés alrededor de las decisiones de los personajes con la problemática y no nuestro interés alrededor del artefacto.

Creo que lo que provocó que algunos capítulos llegarán a ser tan flojos fue donde la historia se concentraba únicamente en el elemento tecnológico. Tal y como le paso a los últimos episodios de la temporada 5, y a la entrega especial Bandersnatch.

En pocas palabras la decadencia de Black Mirror fue concentrarse en los elementos tecnológicos para la historia dejando de lado los argumentos las sensaciones y sobre todo las emociones que podría generar la serie como lo hizo en otros capítulos.

Ya que aquellos elementos claro que funciona como esos easter eggs, que hacen conexión entre temporadas para entenderlo a una manera futura y en la que casi pareciera que nos hace falta mucho para llegar, sin embargo, Black Mirror convierte estas historias en ciencia ficción por medio de la sensación, la reinterpretación, reflejos personales y por supuesto referencias de nuestro cotidiano.

Sin duda, la mayoría de seguidores de esta saga, nos sentimos bastante resentidos con la última entrega de Black Mirror junto con el especial de Bandersnatch donde nos engañaron haciéndonos sentir emociones efímeras con el juego de la tecnología y pues la importancia de aquella decadencia fue por subestimar a la audiencia por medio de patrones tecnologicos para jugar con nuestra sensación, pero al final fue eso efímero.

No nos dejó nada. Aún así yo recuerdo más a Black Mirror como esa serie que me provocó tener pesadillas luego de ver capítulos donde un primer ministro tenía sexo con un cerdo por culpa de una manipulación en internet, sin irnos tan lejos a la tecnología, una serie que en un capítulo nos mostró la facilidad y la impotencia de bloquear gente, que también nos enseñó como una simple mala decisión de seguir tendencias nos podría provocar el ataque de una abeja… como para darnos la historia donde Miley Cyrus seguía siendo Miley Cyrus o incluso Hannah Montana pero más depresiva.. en fin nada es eterno ni lo bueno que fue Black Mirror, el consejo que les doy es que no hagan corajes como yo, al final, de las historias efímeras nadie se acuerda, y de las que nos dejaron todo tipo de emociones son las que siempre debemos recomendar.

Por cierto, ya suficiente teníamos con la quinta temporada como para que nos dieran ese trailer donde salían influencers.. afortunadamente eso solo fue una mala broma y nunca salió a la luz.

Espero mi puntuaje: