Las Indias, pioneros en Internet
Educan, dan herramientas y llegan antes que nadie. El grupo inspirado por el cyberpunk es una fuente de inspiración
Silicio nunca habría existido sin muchas tardes en Martínez Campos, sin las visitas para aprender a montar un servidor con IP fija al patio de Piaomonte, sin las largas conversaciones en San Bernardo, los pisciwifi con sandías o el sushi ibérico del Barrio del Pilar. Las Indias, cuyo nombre oficial es La Sociedad de las Indias Electrónicas, fue el germen de este amor por América Latina, de tener una conciencia de aportar y sumar con ánimo comunitario, no colonizador.
Después de esta flor bañada en almíbar es necesario decir qué es Las Indias. O casi mejor qué no son. Es una consultora tecnológica llena de sabiduría, contexto y profundo conocimiento económico. Es una análisis humanista del potencial de casi cualquier sector con la historia y la geopolítica como hechos diferenciales. Destacan por su visión con transversal, sin clichés ni tabú alguno.
Desde hace más de 15 años trabajaban con PDAs (el smartphone primigenio) en enfermería. Ahora que todo el mundo mira a América Latina, ellos fueron y volvieron, con equipos de ida y vuelta y alma de exploradores.
Ahora que el feminismo, entendido como igualdad, no como revancha, despierta en el mundo tech, cabe recordar que desde sus inicios el papel de las mujeres en la Sociedad Cooperativa de Las Indias ha sido el ejecutivo. Puede que en un primer contacto todos quedemos impactados por el carisma personal de David de Ugarte (leyenda urbana), pero pronto dejan claro que todos y cada uno de ellos aportan un valor distintivo.
Nadie enviaría una postal con un código bidi que apunta a un libro, salvo ellos. Nadie se atrevería a trabajar con bancos que quieren una blogosfera propia, gobiernos e influencia.
Tienen un programa de reclutamiento (ojo, no es para todo el mundo, tiene mucho de adiestramiento y se espera del candidato un amor especial por hacer las cosas por sí mismo)abierto. Quizá seas el candidato perfecto. O quizá, simplemente, te sirva para conocer a un grupo maravilloso que abre la mente como pocas experiencias vitales.
Natalia, María, Mayra, Manuel, Caro y David son el eje de una red silenciosa que educa y dota de herramientas para interpretar y crear en la Red, sin perder la perspectiva, sin grandes equipos, pero de gran efectividad. Cero humo.
Hecho con cariño y esmero en San Francisco
