Entrevista a Matías Bagnato: “No puede ser lo mismo matar a una persona que a cinco”

Lau Goicoechea
7 min readAug 2, 2018

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Matías Bagnato frente al Congreso de la Nación Argentina.

El 17 de febrero de 1994, a las 3.30 de la madrugada, Fructoso Álvarez González roció toda la casa de Matías Bagnato con fósforo líquido y la prendió fuego. En ese incendio, provocado de forma intencional, murieron sus padres, sus hermanos Fernando (14) y Alejandro (9), y Nicolás Borda, un amigo de los niños.

Matías Bagnato es el único sobreviviente de la llamada “Masacre de Flores” y nos cuenta todo sobre la actual Ley de Víctimas, cómo funciona el sistema penal y la experiencia que tuvo a partir de su caso.

Así había quedado la casa de Matías Bagnato luego del incendio.

-¿Qué opinas de la Ley de Víctimas?

La Ley de Víctimas me generó una satisfacción increíble, porque permite un cambio de paradigma en Argentina. La víctima en el proceso penal, era invisible, ya que todo el sistema estaba pensado para el victimario y no para la misma.

Por otra parte, voy a seguir luchando para que la víctima tenga participación en la instancia de ejecución de la pena (esto se da cuando los victimarios cumplen con las condenas y actúan los jueces de ejecución).

La víctima era desplazada en su totalidad, había un artículo vigente que dice que la parte querellante no integra la instancia de ejecución de la pena y eso es algo que todavía está pendiente, pero lo que si logramos en la Ley de Víctimas es que, en la ejecución de la pena, los jueces tienen que informar a la víctima sobre el estado de situación de la causa.

-¿Cómo son las condenas que se brindan en Argentina?

Siento que son una burla a las víctimas, desde el momento que hablan de prisión perpetua, cuando en realidad no lo es.

A mi jamás me van a escuchar pedir pena de muerte, pero si considero que no puede ser gratis matar en la Argentina, hay muchos delincuentes que se pueden recuperar y reinsertar (por ejemplo cuando se cometen robos). Pero cuando hablamos de violadores o asesinos reincidentes, no tienen ningún tipo de recuperación. En mi caso, no puede ser lo mismo matar una persona que a cinco, o que te digan que va a cumplir treinta años en prisión y después a la mitad de la condena, le otorgan una libertad condicional.

-¿Qué consideras que la justicia debería hacer con las personas que terminan con la vida de otras?

Cuando una persona termina con la vida de otra, tiene que existir la prisión permanente revisable en Argentina, ésta se aplica mucho en Europa.
Si una persona demuestra que está arrepentido y en condiciones de ser reinsertado en la sociedad, considero positiva esta posibilidad, pero cuando pasan casos como el mío considero que tendría que existir esa prisión perpetua. La misma, se aplica a las víctimas nada más, eso es perpetuo y el dolor que tengo adentro, él siempre tiene la opción de volver a tener la libertad.

-¿Qué opinas de la Ley de Extrañamiento y cómo afectó la misma a tu causa?

Tuve la posibilidad de juntarme con la comisión que está elaborando el proyecto del Nuevo Código Penal que busca modificar el hecho de que los delincuentes que optan por el beneficio de la Ley de Extrañamiento, si deciden volver a la Argentina, no es considerado un delito. De este modo violan los controles de migraciones e ingresan al territorio nacional.

Esto logre que sea incluido en el Nuevo Código Penal que se presentará en el Congreso y espero que se logre modificar la situación.

-¿Cómo te enteraste que Fructuso González estaba libre, y cómo fue tu accionar?

Yo me entero de la libertad de Fructoso Álvarez González a través de una llamado que me realiza él, una noche en el mismo horario del incendio (3:30 de la madrugada). Me mencionó que me preparara porque me iba a quemar como al resto de mi familia, no hay palabras que puedan describir lo que sentí en ese momento.
Como no estudié abogacía ni nada de ese ámbito, desconocía a dónde debía dirigirme, entonces consulté en el tribunal donde lo habían condenado y me dijeron que estaba en el Juzgado de Ejecución Penal. Allí me respondieron que no me podían dar ningún tipo de información porque yo no era más parte de la causa
(menciona indignado que no le entraba en la cabeza como la justicia podía darle esa respuesta), yo les decía que quemó vivos a toda mi familia pero no servía de nada. En ese momento empecé a interiorizarme con el ámbito judicial y penal.

Fructoso Álvarez González en uno de los traslados penales.

-¿Qué personas perjudicaron al desarrollo de la condena de Fructoso?

Fructoso Álvarez González era una persona con mucho poder adquisitivo antes de ingresar a la cárcel y puso mucho dinero para obtener su traslado a España. Cuando vuelve para Argentina, Axel López fue el juez de ejecución que desestimó un comunicado de migraciones que le advertía el ingreso de Fructoso Álvarez al país.

El juez Axel López.

Este juez me ha dicho en la cara “estoy tapado de expedientes y me lo morfe”, esta es una respuesta inadmisible para cualquier familiar de víctimas. Todo el sistema está deteriorado y es muy perverso por donde lo veas, los jueces, lo que se tarda en las causas, las leyes, hay que hacer un cambio radical en muchos puntos.

-¿Pudiste corroborar si era real esa deuda que aparentemente motivó a Fructoso a realizar ese acto?

En ese momento yo tenía 16 años, a medida que fui creciendo, mi abuela me admitió que había una deuda pero no era el monto que reclamaba Fructoso Álvarez González, sino muchísimo menos.

Más allá de la posible deuda, nada justifica el haber quemado vivos a mis hermanos y padres. Si esa deuda existía, yo la hubiera tratado con mi papá. Aún considero que ponerse en la mente de un psicópata como éste, que prendió fuego una casa con chicos durmiendo adentro, es muy difícil.

¿Qué rol tuvieron los medios en tu causa?

Tuve suerte, a pesar de todo es muy loco decirlo teniendo a toda mi familia en el Cementerio de Chacharita, porque pude tener acceso a los medios y periodistas que hicieron pública mi causa. A raíz de eso, funcionó una Ley de Víctimas sin existir, porque cuando uno hace público el caso los jueces te atienden, las causas se mueven, y ahí empezó todo a activarse; me pusieron custodia y pase un año y medio encerrado en mi casa, esperando obtener algún tipo de respuestas.

Así se comunicaba la noticia en el diario.

¿Sentís que se hizo justicia en el caso de tu familia?

Me la pase mendigando que se haga justicia muchísimos años, considero que sería justicia si esta persona no hubiera salido nunca de la cárcel, y cuando volvió a amenazarnos a mi abuela y a mí, sentí que este capítulo no se termina nunca. Espero que en algún momento podamos cerrar esta historia tan dolorosa, dedicarnos a vivir tranquilos con mi abuela, mi familia, conviviendo con el dolor y dejar de ser víctimas de esta justicia también.

Matias Bagnato junto a su abuela y los retratos de sus familiares fallecidos.

-¿Qué mensaje le dejarías a las personas que no se informan sobre estos temas?

Quiero decirle a la sociedad que se involucre en estos temas, cuando hablamos de la Ley de Víctimas o de las penas y demás. Estos cambios por los cuales estamos luchando, están orientados para que el día de mañana cualquier ciudadano que le toque estar en esta situación, pueda contar con las herramientas que nosotros no tuvimos.

Queremos que la víctima tenga un rol activo en la ejecución de la pena, esto va a generar un gran freno para que los jueces no liberen tan fácilmente a los asesinos o violadores. Al momento de otorgar una libertad, si previo a eso tienen a la víctima delante de sus ojos y la escuchan, puedo asegurar que no va a ser tan fácil que sean liberados los responsables de los delitos, y eso en definitiva es algo que protege al resto de los ciudadanos .

Cronología de la condena de Fructoso Álvarez González

El detenido fue condenado a la pena de prisión perpetua en 1995, en ese momento la perpetua eran 25 años, el cumplió 15 y lo dejaron libre durante 3 años.

Lo volvieron a detener y se tuvo que hacer un nuevo computo, en la actualidad le faltarían cumplir 5 años más de condena, y él desde que lo volvieron a detener hasta la actualidad , busca obtener una libertad anticipada. Solicitó salidas transitorias, libertad condicional, y la Ley de Extrañamiento; este último beneficio no fue otorgado y Fructoso Álvarez González sigue cumpliendo la condena en el penal de Ezeiza.

El equipo de profesionales médicos que lo siguen dentro del penal, detecto que no muestra signos de arrepentimiento y presenta rasgos psicopáticos.

Actualidad de Matías Bagnato

Matias nos cuenta que “Sin buscarlo y sin quererlo, termine siendo un referente de familiares de victimas de delito, y lo único que intento hacer es que, como tengo esa suerte de poder hablar con los periodistas y funcionarios, debo poder comunicar estas situaciones y así poder modificar algo en el país”.

También menciona: “Eso indirectamente es un motor en mi vida, me ha ayudado a transformas los millones de “por qué a mí” en un “para qué”, poder ayudar a que futuras victimas de delito, cuenten con todas las herramientas para luchar, que yo no tuve en su momento cuando busque justicia por mis viejos y mis hermanos.

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