Evangelización creativa en las redes sociales.

Guía para comenzar tu propio proyecto de evangelización.

Socios de Dios
Socios de Dios
18 min readJul 16, 2019

--

“Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda criatura”. Marcos 16, 15

Luego de la II Guerra mundial, la Iglesia debió afrontar una nueva etapa que implicó nuevos retos para los cuales no estaba preparada: el secularismo, la descristianización y el relativismo ético. Dichos problemas desafiaban su misión evangelizadora; y la obligaban a pensar en lo que muchos años después se llamaría una Nueva Evangelización.

Los papas Pío XII, Juan XXIII y Pablo VI dieron pasos importantes en los que nos invitaban a enfrentar los desafíos de los tiempos modernos en la tarea evangelizadora; pero es Juan Pablo II quien nos habla directamente de Nueva Evangelización, cuando se dirige a los obispos de América Latina y les pide una Nueva Evangelización: “nueva en métodos, en expresiones y en ardor”.

Benedicto XVI también dio algunos pasos concretos creando un nuevo organismo, en forma de Consejo Pontificio, con la tarea de promover una renovada evangelización en aquellos países donde resonó el primer anuncio de la fe; pero estaban viviendo una secularización progresiva. Aún siendo cardenal, el ahora papa emérito también nos presentó algunas ideas sobre la Nueva Evangelización, cuando en palabras proféticas nos decía: “la Iglesia se reducirá en sus dimensiones y hará falta comenzar de nuevo”; y a su vez nos hacía un llamado: “debemos recurrir a toda nuestra creatividad para hacer que la fuerza viva del Evangelio no se apague”. Con la llegada del papa Francisco, la Nueva Evangelización adquiere un mayor impulso y así nos lo deja ver en su encíclica Evangelii Gaudium.

Como vemos, tenemos una responsabilidad universal y misionera; a través de la cual estamos llamados a renovarnos y a intentar verdaderamente una nueva forma de evangelización. Una nueva forma que esté atenta a los nuevos desafíos y que a su vez rescate lo mejor de nuestra herencia, que sea capaz de hacerse escuchar y aceptar por un mundo alejado; y que haga posible el encuentro entre la Iglesia y el mundo. ¡Vaya tarea si los trabajadores son pocos y la mies es mucha! — risas.

Ahora bien, tomando en cuenta que actualmente vivimos en una era digital donde sobreabundan los diferentes medios, la información y la diversidad de contenidos… ¿Cómo logramos conquistar, además, el continente digital? ¿Cómo podemos permitir que, la infinita riqueza del Evangelio, encuentre nuevas formas de expresión que puedan alcanzar las mentes y los corazones de todos? Es allí donde entran en juego las redes sociales y la evangelización creativa.

José Valdivia, en su artículo El reto de la nueva evangelización nos dice: El Espíritu Santo sopla siempre con nuevos vientos, no abandona a su iglesia y le sigue dando muestras de renovada intervención a través de nuestra cabeza visible, el papa.

Podemos ver como el papa Juan Pablo II nos llama a remar mar adentro y comprometernos en una Nueva Evangelización, luego vemos como el papa Benedicto XVI, en la Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales (2013); nos habla directamente de las redes sociales y nos dice que además de ser un instrumento de evangelización, pueden ser un factor de desarrollo humano. El papa Francisco, por su parte, nos invita en el 2014 a no tener miedo de convertirnos en ciudadanos del mundo digital que nos rodea; y en su exhortación Christus Vivit, nos dice:

La web y las redes sociales representan un lugar irrenunciable para llegar a los jóvenes e implicarlos, incluso en iniciativas y actividades pastorales.

Teniendo esto claro y habiendo caminado ya en aguas algo profundas — esperamos no haberlos ahogado — nos gustaría hablarles ahora sobre evangelización creativa, o para ser más exactos sobre la creatividad; pero sentimos que no podemos tocar este tema sin antes hablar de aquel que nos creó, porque todo lo que nos rodea es un recordatorio constante de la creatividad de Dios.

El asunto comienza — al menos para nosotros — en el libro de Génesis (los textos bíblicos nos pueden ayudar a entender el carácter creativo de Dios y también del poder creativo del ser humano). Lo primero que enseña el libro de Génesis es que Dios es el único creador de todo cuanto existe y, aún hoy, Dios sigue creando. Santo Tomás de Aquino nos habla de creación continua. Esto significa que las criaturas no solo tenemos una relación con Dios; sino que las criaturas somos una relación con Dios.

Un dato curioso se deja entrever en el Antiguo Testamento, en el que el verbo “crear”, del hebreo “bará”, tenía por sujeto únicamente a Dios y hace referencia siempre a una acción divina que produce, en particular, un resultado nuevo e imprevisible. Si nos fijamos, aunque la acción de crear era de su exclusividad, Dios, que es amor, no está interesado en crear solo; sino que a todo lo que crea le otorga un poder intrínseco creativo. La flora, la fauna y el mismo hombre, en su totalidad, tienen una tarea; dar fruto y multiplicarse. Como vemos, lo que Dios crea tiene también la responsabilidad de crear. En palabras del P. Cesáreo Gil:

Dios nos ha asociado a su creación, y Él quiere que nosotros empleemos todos nuestros talentos en completarla.

¿No te parece hermoso? ¿El hecho de que Dios cuente contigo para hacer más completa su creación?, ¿el hecho de que al asociarte a su creación Dios te haya puesto a su nivel, corriendo el riesgo de hacer que resulte menos perfecta?

Dios es el creador por antonomasia; de eso no tenemos duda, pero por si aún no te has dado cuenta, tú que nos lees, tienes también la capacidad de ser creativo porque la creatividad no es una habilidad que se tiene o no, sino una forma de proceder. Entonces eres capaz y tienes la responsabilidad de ser creativo. Dios espera que asumas un papel protagónico.

Intenta dejar este mundo un poco mejor de como lo encontraste. Robert Baden Powell.

Bastaría echar un vistazo a la historia de nuestros santos para ver cómo ellos lograron conquistar tantas almas, y eso pudieron hacerlo con la ayuda de Dios, por supuesto, pero también a través de una Nueva Evangelización. Aunque todos llevaron el mismo mensaje, cada uno lo hizo desde sus propias experiencias, su testimonio de vida y haciendo uso de sus capacidades creativas.

¡Ok! Aclarados ya varios puntos; vayamos al grano… La creatividad es un término bastante complejo; un proceso que funciona de una forma misteriosa y a menudo paradójica pero a continuación haremos el intento de explicarlo.

Cuando hablamos de creatividad nos referimos a la capacidad que tiene el ser humano de producir cosas nuevas con cierto valor. Aquí sería bueno preguntarnos si la creatividad significa crear algo totalmente nuevo; y la respuesta es no. No existe nada, creado por el hombre, que sea totalmente nuevo. La creatividad ocurre aplicando herramientas y pensamientos comunes a materiales ya existentes.

“Nada es nuevo en este mundo ni puede nadie decir: He aquí una cosa nueva, porque ya existió en los siglos anteriores a nosotros”. Eclesiastés 1, 10.

Kirby Ferguson, autor de Everything is a Remix (Todo es un remix), expone que hay tres elementos básicos intrínsecos en el proceso de la creatividad: “copiar, transformar y combinar”.

Concretamente, copiando es como aprendemos. Necesitamos copiar para aprender y entender cómo funcionan las cosas. Al imitar podemos crear algo a través de la transformación, tomando una idea y creando pequeñas variaciones de la misma. Ahora bien, la única forma de producir saltos verdaderamente creativos y originales es mediante la conexión de ideas separadas; donde combinamos viejos elementos para hacerlos nuevos y más interesantes.

Digamos que los ingredientes ya existen, pero hay que conocerlos y hay que saber cómo transformarlos y combinarlos para crear algo nuevo; al menos desde cierto enfoque.

¡Copia, transforma y combina!

No parece tan complicado hablar sobre la creatividad ¿cierto?; es que lo verdaderamente complicado radica en ser creativo. El mayor desafío de generar ideas creativas se encuentra en el hecho de esperar a que el cerebro haga las conexiones necesarias; y vea las relaciones entre esos elementos aparentemente aleatorios. Ese es el secreto de la creatividad.

A través de este material queremos darte algunos tips y consejos que te ayudarán a ser más creativo al momento de generar tu propio contenido; y así puedas comenzar a evangelizar en las redes sociales. Si ya lo haces, esperamos entonces que esta guía te permita hacerlo de una manera más efectiva. Hemos dividido la guía en dos partes: En la primera parte te ayudaremos a disponer tu mente y tu corazón para recibir la inspiración divina; y en la segunda parte te ayudaremos en tu proceso creativo. ¡Comencemos!

Dispón tu mente y tu corazón (I parte).

1. Vive en gracia.

La gracia es un regalo divino por el cual el alma se embellece, llenándose de Dios. Estar en gracia, o vivir en estado de gracia, significa entonces estar libre de pecado grave que impida que Dios habite en nosotros; y así podamos disfrutar de Él, hablar con Él, escucharle, sentirnos amados y obrar de acuerdo a su santa voluntad. Podríamos decir que vivir en gracia equivale a estar sintonizado con la voz y el poder de Dios. Ahora bien, Dios es Dios y siempre podrá obrar en nosotros incluso si no estamos en un estado de gracia; pero es aquí donde debemos detenernos a pensar que el servicio que estamos prestando no es un servicio cualquiera; es un servicio para el Señor, y aunque Él pueda hacer lo suyo en nosotros, también quiere hacerlo con nosotros; en sociedad. Para comprender más fielmente lo que Dios, a través del Espíritu Santo, quiere que hagamos y que comuniquemos; debemos estar sintonizados al canal correcto, y ese canal debe estar lo más claro y despejado posible para que el mensaje sea entendido y transmitido correctamente.

2. Invoca al Espíritu Santo.

Es bueno pedir al Señor que nos asista en todas nuestras tareas y más que bueno, es necesario, si lo que vamos a hacer será para Él. Por eso, siempre que nos dispongamos a servirle desde algún don o talento, pidámosle antes al Espíritu Santo que nos ilumine y nos permita descubrir aquello que Él desea transmitir a través de nosotros. Ofrezcamos nuestro trabajo, nuestro intelecto, nuestras manos, habilidades y todo aquello que Él necesite usar para transmitir su mensaje. Que nos convierta en instrumento útil y que su gracia nos guíe para que no fracase ese plan de Dios para con nosotros.

3. Sirve desde los talentos propios.

Dios nos ha confiado dones y talentos de acuerdo a nuestras capacidades, y nos invita a dar frutos de esos dones y talentos en particular. Dios espera que seamos creativos haciendo uso de las habilidades singulares que Él mismo nos concedió, por tanto, no echemos de menos lo que han recibido otros; no busquemos servir desde lo que no nos fue otorgado — por más buena intención y disposición que tengamos — porque de esa manera, sin quererlo, entorpecemos la labor de Dios. No es suficiente que reconozcamos nuestros dones y talentos; también debemos ser buenos administradores de ellos. Seamos agradecidos con lo recibido, sea poco o sea mucho, y demos frutos desde allí; porque de esta manera estamos cumpliendo con la voluntad de Dios y estamos facilitando su trabajo.

4. Sé coherente.

Vive todo aquello que publicas, o mejor dicho, vive antes y publica después. De nada sirve llenar una cuenta de hermosas reflexiones teológicas o catequéticas que no se llevan a la práctica en la vida cotidiana; porque la Nueva Evangelización se lleva a cabo desde el testimonio y no solo desde las palabras. Desde nuestra experiencia personal, podemos contarte que Dios nos eligió, no precisamente por ser los mejores o por ser perfectos… Realmente Dios nos eligió porque tiene mucho qué mejorar en nosotros y a través de este apostolado nos está transformando. Por tanto, en esta tarea de evangelización el primer objetivo hemos sido nosotros mismos y estamos seguros que así ocurrirá contigo… Dios primero trabaja en ti; para luego trabajar contigo. Publica entonces solo aquello que realmente estás viviendo y no le vayas con cuentos al Señor; porque tu labor de evangelización comienza primeramente contigo.

NOTA.- No te obsesiones con las fechas o con el número de publicaciones por día/semana/mes — más si no cuentas con un equipo de trabajo — ; porque eso, en cierto modo, te obligará a trabajar más, a vivir menos lo que publicas y a publicar más sobre aquello que no estás viviendo. Vive coherentemente tu fe y deja que Dios vaya obrando en ti, en sus tiempos. Cuando sientas que no estás siendo testimonio, es bueno y oportuno que te tomes un tiempo de desierto para reencontrarte contigo mismo y con Dios. Verás que regresarás renovado y con nuevas fuerzas para continuar.

5. Ora constantemente.

Necesitamos orar porque en nuestra humanidad podemos fallar y lo haremos. Dios es ese socio que espera con ansias una plática de amigos. Cuando oramos le damos la oportunidad de mostrarnos lo que espera de nosotros, lo que quiere hacer en nosotros y lo que quiere hacer con nosotros; para bien nuestro y de los que nos rodean. A través de una sincera conversación con Dios sabremos si vamos por buen camino o, si por el contrario, necesitamos hacer correcciones durante la marcha.

6. Fórmate.

Bien dice el dicho: “Católico que no se forma, se deforma”. Si queremos servir al Señor, debemos esforzarnos por formarnos integralmente, buscando conocer las verdades de nuestra fe. ¿Cómo podemos invitar a otros a vivir cristianamente si nosotros sabemos muy poco sobre Cristo? ¿Cómo podemos dar razón de aquello en lo que creemos si no lo conocemos? Aquí es importante acotar que debemos ser muy cuidadosos con el contenido que compartimos. Si no manejamos muy bien algún tema en particular, estamos en el deber de hacer el trabajo de investigación respectivo; respaldándonos en fuentes y autores fiables y comprobables. También podemos apoyarnos en nuestro director espiritual — si lo tenemos — o en algún amigo sacerdote. Aquí no aplica aquel dicho que dice: “Si no puedes convencerlos, confúndelos”; porque lo menos que buscamos es crear confusión.

7. La gloria va para Dios, no para nuestro ego.

Es de Dios de quien procede nuestro querer y actuar, nuestras ideas y nuestros pensamientos y es Él quien nos dota de las habilidades y talentos para llevar a cabo esas santas ideas; por tanto, si no recibiéramos todo esto de Dios; no podríamos hacer nada. No permitamos que nuestro servicio a Dios se convierta en un servicio a nosotros mismos. En palabras de mons. Robert Barron:

Puede que suene paradójico pero si Dios es quien fundamenta nuestro ser, mientras más gloria demos a Él, más nos elevaremos nosotros.

8. Deja a Dios ser Dios.

Luego que hicimos nuestra parte, dejemos que Dios se encargue del resto. No nos agobiemos esperando resultados, pensando que hemos llegado a muy pocas personas; tampoco nos preocupemos por sumar más y más seguidores, por obtener más likes o por que nos comenten o nos mencionen; porque aquí estaríamos faltando al punto anterior. Nuestro verdadero trabajo consiste en ganar almas para Dios y no en sumar números que nos hagan sentir bien a nosotros. Dios nunca tiene prisa, siempre llega a tiempo y Él sabrá llegar a quien lo necesite y en el momento en que esa persona lo necesite. Si nuestro contenido llega a una sola alma, ya con eso debemos darnos por bien servidos.

Manos a la obra (II parte).

En cada consejo te dejaremos una tarea que podrás llevar a la práctica. No es necesario que crees una cuenta empresarial; puedes comenzar desde tu cuenta personal y si eres perseverante y tienes el tiempo y la disposición para trabajar un poco más para el Señor, más adelante puedes pensar en un nombre para tu proyecto y crear una cuenta exclusiva para tu labor de evangelización.

1. Sé curioso.

Lee, investiga, busca ideas y cosas que te inspiren. Reúne una variedad de materiales y elementos de referencia que puedan nutrir a tu cerebro y te ayuden en tu proceso creativo. Las mismas redes sociales son una gran biblioteca de información e inspiración. Nuestras favoritas son Instagram y Pinterest — son las que más han ayudado en nuestro proceso creativo. Si no tienes Pinterest aún, te recomendamos abrir una cuenta y comenzar a crear tableros que poco a poco vayas nutriendo de contenido útil. Austin Kleon, en su libro Roba como un artista dice:

Eres la suma de tus influencias, por lo tanto tu trabajo es recolectar ideas. Mientras más buenas ideas colecciones, más amplio será el espectro del cual podrás dejarte influenciar.

Tarea.- A continuación compartiremos contigo las cuentas que seguimos y que más nos han influenciado; pero también queremos que tú vayas trabajando en tu propio marco referencial. Puede que el contenido que nos inspire a nosotros no te inspire a ti, es válido, así que empieza siguiendo esas cuentas que realmente alimenten a tu imaginación.

2. Lleva siempre contigo una libreta de apuntes.

Nunca sabes cuando llegará una nueva idea… Algunos llaman a esos momentos de inspiración “musas”. En la mitología griega creían en las musas que, según los escritores más antiguos, eran divinidades inspiradoras de las Artes — cada una de ellas relacionada con ramas artísticas y del conocimiento — ; y que bajaban a la tierra a susurrar ideas e inspirar a aquellos mortales que las invocaran. Por otra parte, otros creían en los “daimones”; que eran seres intermedios entre los mortales e inmortales; una especie de guías y genios protectores que transmitían los asuntos humanos a los dioses y los asuntos divinos a los hombres. Para nosotros, esos momentos de inspiración sencillamente provienen de Dios; que obra en nosotros a través de su Santo Espíritu. Hay una anécdota de Elizabeth Gilbert, en su charla TED sobre darle alas a la creatividad, que nos gustó tanto que la queremos compartir contigo:

Hace siglos en los desiertos de África del Norte, la gente se juntaba en bailes sagrados con música a la luz de la luna que continuaban durante horas y horas hasta el amanecer. Y siempre eran magníficos, porque los bailarines eran profesionales y eran geniales, ¿verdad? Pero de vez en cuando, muy raramente, algo pasaba, y uno de estos interpretes se volvería trascendente. Y yo sé que ustedes saben de lo que estoy hablando, porque sé que todos han visto, en algún momento, una ejecución así. Era como si el tiempo se detuviera, y el bailarín pasaba por un tipo de portal y no estaba haciendo nada diferente de lo que había hecho las mil noches anteriores, pero todo se alineaba. Y de repente, no parecía ser un simple humano. Estaba iluminado internamente y desde abajo y todo iluminado con divinidad. Y cuando esto pasaba, en esos tiempos, la gente sabía lo que era, saben, y lo llamaban por su nombre. Juntaban sus manos y empezaban a cantar, “Allah, Allah, Allah, Dios, Dios, Dios.” Eso es Dios, ¿saben? Una curiosa nota histórica — Cuando los moros invadieron el sur de España, llevaron esta costumbre con ellos y la pronunciación cambió con los siglos de “Allah, Allah, Allah” a “Olé, olé, olé,” que aún se escucha en plazas de toros y bailes flamencos. En España, cuando alguien ha hecho algo imposible y mágico, “Allah, olé, olé, Allah, magnífico, bravo,” incomprensible, ahí está — una visión de Dios. Lo que es grandioso, porque lo necesitamos.

Como no sabemos cuándo el Espíritu Santo soplará en nosotros; debemos estar preparados si no queremos perdernos esa visión, que Dios ha querido regalarnos, en ese justo momento.

Tarea.- Acostúmbrate a anotar todas tus ideas, tus pensamientos y tus observaciones, por más tontas que te parezcan. De todo eso que leíste, investigaste, viste y recolectaste; documenta todo aquello que hable a tu mente y a tu corazón. Puede que al momento sean simples anotaciones pero, más adelante, en ese libro de apuntes tendrás registros valiosos que podrán ayudarte a desarrollar ideas grandiosas y más complejas.

3. Sé creativo en todo momento.

Es un error pensar que la creatividad es sólo diseño porque la creatividad está en todas partes; y por tanto, debes aplicarla en todo lo que haces. En la forma como vives, como piensas, en como preparas y desarrollas tu contenido, como te planificas, como escribes, como interactúas con los seguidores, en tus estrategias de marketing, en el diseno de cada post, en fin… ¡Todo es creatividad!

Tarea.- Tómate el tiempo para pensar en ejemplos de cómo aplicar la creatividad para evangelizar. Toma lápiz y papel, identifica los dones y talentos que Dios te dio y escribe algunas maneras específicas de cómo vivir y multiplicar, creativamente, esos dones y esos talentos. Si no se te ocurre nada — haz el esfuerzo, por favor — pide ideas a tus amigos o a tus familiares. Luego piensa en aquellas áreas que están siendo olvidadas y que tú podrías atender. Algo que te puede ayudar es darte una vuelta por esas cuentas que ya estás siguiendo porque te inspiran. Ve lo que hacen y cómo lo hacen; luego dedícate a analizar lo que puedes desarrollar tú. Lo ideal es que generes contenido diferente; ahora bien, si te arriesgas a desarrollar lo mismo, estás en la obligación de transformarlo, de tomar esa idea y llevarla a otro nivel; porque como dice Jean-Luc Godard:

De lo que se trata no es de dónde tomas las cosas, sino de a dónde las llevas.

Caso práctico. Un excelente ejemplo de lo que te acabamos de hablar es el trabajo que viene haciendo el padre Jorge Reinaudo en las redes sociales @jlreinaudo. Cuando comenzó con su proyecto de evangelización, ya existían muchas cuentas que compartían reflexiones del evangelio en vídeos pero… ¿Qué hizo él? De acuerdo a sus dones y talentos, sus capacidades creativas y su experiencia como joven y como sacerdote; tomó esa idea y la llevó a otro nivel, la hizo nueva. Pensó también en ese espacio poco atendido — los niños y los jóvenes — y desde allí, a través de su hermosa labor, ha llegado a muchísimos corazones. ¡Tomemos nota!

4. Haz tu parte.

Pablo Picasso decía que la inspiración existe pero debe encontrarnos trabajando; entonces: ¡Preséntate y haz tu trabajo! — sea cual sea — todos los días; que Dios se encargará del resto. Si te preguntas qué debes hacer: el mejor consejo, según Austin Kleon, no es que hagas lo que sabes, sino lo que te gusta…

Dibuja el arte que quieres ver, empieza el negocio que quieres administrar, toca la música que quieres oír, escribe los libros que quieres leer, crea los productos que quieres usar. Haz el trabajo que quieres que se haga.

Tarea.- Planifica una estrategia para aplicar una de esas ideas que apuntaste de la tarea anterior. ¿No se te ocurre nada?… ¡Corre a tu libreta de apuntes! Revísala, léela, vuélvela a leer y trata de buscar las relaciones entre diferentes ideas que hayas registrado. Cópialas, transfórmalas y luego combínalas para hacerlas nuevas; pero no intentes atraparlas desesperadamente. El estar obsesionado con generar una buena idea muchas veces nos bloquea; así que no te abrumes… Desconéctate, relájate, piensa y espera que tu cerebro haga las conexiones necesarias.

5. Y hazlo todo con amor.

El amor es creativo, decía Ratzinger, porque el amor crea y da vida; entonces: la tarea será que hagas todo con amor porque el amor siempre produce resultados nuevos e imprevisibles.

6. Sé valiente y arriésgate.

Realmente es muy inquietante enfrentarse a una página en blanco. Crear siempre asusta, incluso a los que tienen más experiencia. ¡Cuánto más intimidante será entonces, para aquellos que no se consideran personas creativas! Crear exige ser valiente, arriesgado, generoso y auténtico. No tengas miedo de comenzar y tampoco tengas miedo de equivocarte o de fracasar. Para vivir según el propósito que Dios tiene preparado para ti; debes estar dispuesto a arriesgarte, a alejarte de lo seguro y muchas veces a fracasar — inserte a continuación frase cliché motivadora — ; porque donde realmente aprendemos es en los fracasos — risas.

Tarea.- Luego de haber generado la estrategia de implementación de tu idea, genera el contenido y publícalo en tu cuenta. Si te animas, puedes etiquetarnos en instagram @sociosdedios y así te damos nuestro feedback. Anota tus avances en tu libreta de apuntes, y celebra tanto tus intentos como tus éxitos.

7. Deja ir tus ideas.

No te aferres a tus ideas. Las ideas, al igual que los talentos, están diseñadas para ser compartidas. De qué vale acumular ideas si no las usas y no las compartes. De hecho, las ideas aumentarán precisamente en la medida en que las uses y en que las regales. Paul Arden dice:

Si regalas todo lo que tienes, no te queda nada. Esto te obliga a mirar, a estar atento, a reabastecerte. Cuanto más regalas, más vuelve a ti.

Tarea.- Crea y comparte todo lo que puedas, no solo las ideas, también tus conocimientos y tu experiencia. Todo en tu vida es un regalo de Dios, dalo todo tú también a quien lo necesite; no te guardes nada para ti porque así tendrás más espacios que el Señor podrá ir llenando con sus regalos.

Para terminar nos gustaría invitarte a valorar y a celebrar más el trabajo apostólico de los demás. La evangelización, sobre todo en las redes sociales, no debe ser vista como una competencia que se debe ganar, porque en realidad todos los que evangelizamos estamos trabajando para un mismo jefe y por un mismo objetivo; somos socios y somos hermanos que compartimos un mismo Padre y un mismo pan. Desde nuestros propios dones y talentos hagamos el mejor trabajo posible ¡sí!; pero no para competir contra el hermano — no desvirtuemos nuestra labor —; sino porque así como Abel queremos agradar a Dios ofreciéndole lo mejor. Recuerda que a través de los dones de los demás también puedes alabar y regocijarte en el Señor. Cerramos con esta hermosa frase de nuestros hermanos Nicole y Ricardo:

Que todo lo que hagamos sea una alabanza al Padre.

Con ayuda de estos consejos, traza tu propio camino y ve sumando a la lista tu propio aprendizaje. Sé fiel en lo poco, socio, y Dios te premiará con más.

¿Consideras útil este artículo? Aplaude o comenta para saber que nos leíste. ¡Un abrazo! Nos vemos en la oración y, por supuesto, en la comunión.

¿Quieres indagar más? Aquí te dejamos las referencias que utilizamos para redactar este artículo.

El reto de la Nueva Evangelización. https://es.catholic.net/op/articulos/32706/cat/583/el-reto-de-la-nueva-evangelizacion.html

Un Método para la Nueva Evangelización. Francisco el Papa de la Nueva Evangelización. http://www.celam.org/cebitepal/detalle_t.php?id=Njk=

La santa Biblia.

Serie “Catolicismo” del obispo Robert Barron. https://store.wordonfire.org/products/serie-catolicismo

Creativity is a Remix by Kirby Ferguson. https://www.youtube.com/watch?v=zd-dqUuvLk4

Elizabeth Gilbert sobre darle alas a la creatividad. Charla TED 2009. https://www.ted.com/talks/elizabeth_gilbert_on_genius/transcript?language=es#t-419821

Roba como un artista: Las 10 cosas que nadie te ha dicho acerca de ser creativo; por Austin Kleon https://www.amazon.com.mx/Roba-como-artista-acerca-creativo/dp/6071120853

--

--

Socios de Dios
Socios de Dios

Porque al igual que María, todos somos colaboradores de Dios en su obra creadora y en su plan de salvación.