¿Por qué no nos gusta sentir lo que sentimos?

Quizás te hayas percatado en algún momento de estar sintiendo una emoción que no te gusta o que quisieras dejar de sentir. En lo personal me ha pasado en varias ocasiones; por ejemplo cuando me siento triste entro inmediatamente en una fase que llamo de “autorecuperación”, como si estar triste fuera algo de lo que forzosamente me “tengo que” recuperar. Y sí, para mí el estar triste no es del todo agradable, sin embargo también puedo aprender a encontrar en la tristeza lo agradable que es estar conmigo a solas, el escuchar otro tipo de música o incluso el estar simplemente en silencio. Todas las emociones traen un regalo dentro de ellas… pero solo lograremos verlas cuando no nos escapamos de ellas de forma inmediata por juzgarlas de negativas o malas.

No me gusta estar triste, enojado o con miedo porque así lo aprendí y está bien. Ese es el que estoy siendo al día de hoy. Más también existe la grandiosa posibilidad de encontrar nuevos caminos en mi relación con las emociones que siento y me dejo sentir. No solo hay un camino. No soy un ser fijo e inmutable, por eso la vida creo que nos pone en el camino aquellos espacios de oportunidad para conocer nuevos horizontes y sumergirnos en terrenos desconocidos que sin lugar a dudas nos traerán sorpresas.

Si tu eres de los que como yo, creen que no es tan agradable estar en una u otra emoción te invito a que explores, solo eso, explores qué de esa emoción le puede funcionar a tu vida al día de hoy. Quizá no te guste, más indaga en lo que te puede funcionar.