Poliglota

Jorge Nova
Startups Chilenas
Published in
6 min readJun 10, 2020

El mejor método para aprender idiomas, ahora también Online

Una persona políglota es aquella que puede hablar más de tres idiomas diferentes. Algunos suelen ser lingüistas académicos, profesionales del negocio internacional, o incluso seres casi sobrenaturales con la capacidad de hablar hasta cincuenta y tantos idiomas, cualidad que los lleva a aparecer en programas de televisión y en alguna edición del libro de Records Guinness. Bueno en este caso no queremos hablar de una persona, sino de una comunidad, un emprendimiento chileno que, literalmente, entre conversación y conversación, fue creciendo hasta convertirse en un servicio de idiomas de alta demanda en Chile, Perú y México. Ladies and gentlemen, bienvenidos a Poliglota, un emprendimiento que sí o sí tenía que estar en nuestra red de Startups chilenas. Conversamos con Carlos Aravena, CEO y cofundador de Poliglota, para conocer con más profundidad esta startup, emprendimiento, entreprenørskap, Przedsięwzięcie, o como quiera llamarle según su idioma preferente.

A soltar la lengua

Poliglota es un emprendimiento enfocado en enseñar idiomas bajo un método social. Su modus operandi consiste en reunir a interesados en aprender idiomas en una cafetería. Aquí un “coach” experto en la lengua elegida va guiando una conversación cotidiana y lúdica en la cual todos participan y hablan, sin dejar de lado los conocimientos gramaticales, la pronunciación y el vocabulario. En un principio esto se realizó en bares, convocando a los participantes a través de redes sociales.

Estas primeras experiencias fueron las raíces que dieron vida a un movimiento poliglota que respondía a una necesidad de aprender idiomas de manera entretenida, con buenos resultados y sin la necesidad de una sala de clases.

Mucha gente queda disconforme con el dinero y tiempo invertido en otros servicios. En las cafeterías vez a la gente hablando desde la primera clase, es práctica real y constante. Carlos Aravena, CEO y cofundador de Poliglota

Fue en esta etapa inicial, entre el 2010 y el 2012, cuando la aceleradora Wayra les inyectó una primera dosis de inversión. “Ellos fueron los primeros que creyeron en nosotros, eso nos dio cierto empuje. Empezamos a ir a Talca, Chillán, Concepción, y vimos a la gente juntarse en los bares para hablar y aprender. Al final hacían un brindis por Poliglota, era increíble”, cuenta orgulloso Carlos.

Take it easy, no todo es color rosa

Durante el 2013 levantaron fondos con CORFO y Capital Semilla. Luego al año siguiente recibieron una inversión del fondo suizo Mountain Nazca. Hasta aquí funcionaban sin un modelo de negocio definido, poniendo principal énfasis en la experiencia presencial para el aprendizaje de idiomas, mientras en paralelo buscaban y probaban diferentes modelos para darle mayor rentabilidad al servicio. Todo iba relativamente bien hasta que en septiembre de 2015 se percataron del riesgoso runaway de la empresa: si no encontraban rápido un modelo rentable, Poliglota quebraría durante noviembre.

“Desde ese momento ya no podíamos pagar la oficina, por lo que nos vimos obligados a crear un modelo estable para paquetizar y cobrar. En octubre empezamos a vender 3 sesiones a 50 mil pesos. Ese mes vendimos nuestros primeros 150 mil pesos. En noviembre, vendimos 2 millones. Desde ahí en adelante no paramos de crecer”, cuenta Carlos.

Ya con un modelo de negocio efectivo y rentable, el equipo fue adhiriendo nuevos talentos y el espíritu Poliglota empezó a expandirse hacia nuevos destinos. Simultáneamente abrieron oficinas en Lima y Ciudad de México. “Estuvimos dos meses preparando esta expansión, conociendo los mercados, generando contactos y probando diferentes audiencias en redes sociales para hacer bien el marketing. Veníamos con todo un modelo de ventas creado en Santiago. Ya sabíamos cómo vender, todo lo estandarizamos para llegar e instalar, afirma Carlos. Claramente, nada de esto habría sido posible sin el apoyo de un equipo comprometido y apasionado que cree fielmente en el propósito de su empresa.

Por muy tecnológico que seas, todo se basa en tener buenas relaciones para crear una buena empresa. Ya pasó la figura del emprendedor donde todo gira en torno a él. Hoy todo es el equipo. Carlos Aravena, CEO y cofundador de Poliglota

El método social

Según el relato bíblico de la Torre de Babel, la soberbia llevó a que la humanidad recibiera el castigo divino de dividirse en diferentes lenguas para dificultar su entendimiento. Poliglota plantea una tesis contraria: usar los diferentes idiomas para empatizar y entendernos con el prójimo a un nivel global. “Aprender un idioma es cultura pura. Qué mejor manera de entender el mundo que aprendiendo otros idiomas” Afirma Carlos.

La comunidad se siente como estar hablando con amigos en una cafetería en Nueva York. Las conversaciones son dinámicas y tratan sobre temas de contingencia, la vida, proyectos, sueños. Carlos Aravena, CEO y cofundador de Poliglota

Carlos brinda principal importancia al método social que ofrece Poliglota. La energía empática y amistosa que generaban los grupos de conversación logró hacer que hasta las mismas cafeterías se sintieran interesadas por formar parte de este emprendimiento. Con el tiempo lograron generar alianzas con más de 100 cafeterías, e incluso con la franquicia a cargo de Starbucks. Ahora hasta los baristas querían aprender idiomas con los grupos sociales de Poliglota. “Ellos necesitan de ti y nosotros necesitamos de ellos, es un comercio. Así se genera una interacción y todos nos beneficiamos” dice Carlos.

Sin embargo, no todo fue siempre enfocado en la importancia de lo social. En un principio pensaban que el principal atributo estaba en realizar clases presenciales, limitándose siempre a las cafeterías como instancia de aprendizaje. Tenía que aparecer una crisis para que el equipo de Poliglota se diera cuenta de que el “método presencial” era realmente un “método social” que podía salir de la cafetería e instalarse en otras plataformas.

Crisis means oportunidad

La gente entendió que una crisis puede aparecer de la noche a la mañana y que aprender un idioma es más que fundamental tanto para crecer, como para distraerse y pasarlo bien. Carlos Aravena, CEO y cofundador de Poliglota

Antes de la crisis social, el equipo de Poliglota contaba con un universo de 1500 alumnos activos asistiendo a clases grupales. Luego con el estallido vino el cierre de varias cafeterías y algunas devoluciones de los pagos realizados por usuarios de la comunidad. Sin embargo, la mayoría de los alumnos decidió esperar a que las aguas se calmasen para volver a la sintonía de clases grupales. Nadie en el equipo de Poliglota imaginó que diciembre post estallido se convertiría en uno de los meses con mejores ventas del 2019.

Con respecto a la actual contingencia sanitaria, Carlos nos cuenta que se vieron obligados a adaptarse al entorno y cambiar todo el modelo en una semana, llevando el método social hacia una plataforma digital. Esta iniciativa fue todo un acierto comercial que sin duda brindará grandes oportunidades para el futuro. “Antes solo podíamos vender en algunas zonas de Santiago, Lima y México. Hoy la alternativa online nos permite llegar a toda Sudamérica y quizás al resto del mundo”, explica Carlos.

En poliglota creen que van a salir mucho más fortalecidos después esta crisis. Eso sí vender en el presente no es nada de fácil, pues la inseguridad circundante hace que sea más difícil concretar una venta.

Equipo, team, squadra, équipe

Poliglota cuenta hoy con un equipo global de aproximadamente 80 profesionales con presencia en Chile, Perú y México. Cada país tiene un área de marketing, ventas, post ventas, administración y un equipo de académicos. Estas células internacionales se comunican directamente con la oficina principal que se ubica Bellavista, la cual cuenta con otras áreas como tecnología, empresas, producto, operaciones y finanzas. “En general son personas bastante jóvenes. De hecho, creo que soy el mayor del equipo”, cuenta Carlos.

Los planes para el futuro, a corto plazo pretenden “surfear esta ola de crisis. Estamos a full en todos los mercados, creando planes y trabajando con todo”, afirma Carlos con convicción y optimismo.

Con respecto al largo plazo, pretenden expandirse hacia Colombia y al resto de Latinoamérica, y tienen toda la fe de que el método social de Poliglota será todo un éxito.

Creemos que vamos a transformar la industria de la educación. Tenemos un servicio con un propósito claro que es cool, diferente, y que se lo merece todo el mundo. Carlos Aravena, CEO y cofundador de Poliglota

Nuevamente, no nos podíamos despedir de nuestro entrevistado sin preguntarle cuáles son sus 3 startups chilenas favoritas. En el caso de Carlos, sus referentes son Cornershop, NotCo y Fintual. Por supuesto lo invitamos a que ingrese a nuestro sitio para que conozca más startups chilenas que puedan darle la pelea a este sólido top 3.

Podcast de buenas historias de Startups Chilenas

Escucha la entrevista entera de Carlos Aravena en nuestro podcast

Descubre Poliglota en su sitio web https://www.poliglota.org/cl/

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Jorge Nova
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Líder de experiencia de usuario en Option. Creador de #startupschilenas 🚀✨ https://startupschilenas.cl Amo a mi familia y compañera ❤