Trump, Huawei y la guerra por mis datos
“En este ajedrez no se trata de mover las piezas para lograr el mejor negocio, sino para tener información y quien la tenga, va a dominar el mundo”.
Por Manuel Suárez
Todos habríamos apostado que la próxima guerra sería por el agua. Pero el imaginario nos quedó corto y la guerra llegó antes: el conflicto es hoy y no es por petróleo, territorio o una ideología predominante: hoy, el poder está en obtener la información en todas sus formas.
Los últimos días el mundo ha sido testigo de lo que la prensa tituló como la primera guerra fría tecnológica: el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, apretó el botón de pánico y puso el veto a las empresas que funcionen con tecnología estadounidense, a no comercializar con Huawei.
Si antes fue el bloqueo económico de Cuba, hoy esto amenaza con cerrar las puertas de Google para la multinacional china … ¿Se imagina un teléfono sin Gmail?.
La premisa desde el mandatario de Estados Unidos, es que debe proteger al país de un supuesto espionaje industrial, poniendo sobre la mesa la vulnerabilidad de equipos Huawei encontrados en Vodafone en Italia, no respetar sanciones contra Irán, o estar muy cerquita de Xi Jinping.
Un espionaje industrial que se produciría porque si Huawei aplicara la tecnología 5G, tendría que poner aparatos de no más de 50 cms de largo y 30 cms de ancho cada tres cuadras emitiendo señal, que captarían todo lo que estamos haciendo. Esto, según Trump afectaría a los Estados, ¿por qué?… Mi información me pertenece; no al país donde nací, ni a donde resido, ni a la empresa donde contraté mi plan telefónico, ni a mi Isapre, ni a la cuenta rut. Y del beneficio de conocer los datos confidenciales Trump sabe. Basta recordar el episodio del uso de datos que hizo Cambridge Analítica con usuarios de Facebook para formular promesas de campaña durante la última elección presidencial en Estados Unidos.
Se estima que que quien controle la red 5G en menos de 20 años más, controlará un negocio multimillonario, una velocidad de transmisión de datos 400 veces más rápido que abrir y cerrar los ojos, podrá manejar las fuerzas militares, la inteligencia artificial del futuro y… el acceso de la la información. Y ahí está la clave.
En este ajedrez no se trata de mover las piezas para lograr el mejor negocio, sino para dominar el mundo. Porque quien tenga la información, quien maneje nuestros datos, tendrá el verdadero poder.
En este enfrentamiento entre superpotencias, la propuesta más sensata, pareciera ser la de la mandataria alemana Ángela Merkel: crear un organismo multilateral con características similares a la OTAN que aborde asuntos como ciberseguridad, tratamiento de los datos, ética de la inteligencia artificial, globalización, avances tecnológicos y científicos donde todos los estados parte, se hagan precisamente parte para se resguarde la información y no quede en manos de unos pocos y siempre en los mismos la toma de decisiones. Ésta pareciera ser la única solución en que desarrollo, seguridad y moderar el poder de algunos parecieran ir de la mano.
El partido ya comenzó, los jugadores tomaron posiciones y los reyes están protegidos. A ver si alguno logra el jaque mate.
Originally published at https://medium.com on June 7, 2019.
