El mundo al revés. Día 21
Dibujos confinados en cuarentena
[Vigésimo primer día de confinamiento~Tercera semana de cuarentena]
Número 20: “Gracias” Acuarela y plumilla /papel 21,5 x 27,9 cm
Aunque evidentemente seguiré dibujando y pintando en mi taller, éste será ya el último dibujo, el que en cierta forma cierre o complete la serie #ElMundoalRevés que inicié recién decretado el estado de alarma y el confinamiento. Y bueno, poco puedo añadir, salvo mi agradecimiento a quienes habéis estado siguiendo y apreciando mis dibujitos por ésta y otras redes sociales . Otros proyectos y cometidos me esperan y que tal vez por esta revista algunos vean también la luz.
Estos días de confinamiento, esta primavera atrapada entre cuatro paredes será difícil de olvidar en mucho tiempo y en muchos sentidos. Es de suponer que algo nos habrá hecho reflexionar, algo nos habrá hecho cambiar. Es de suponer porque no sé si, cuando al fin podamos volver a la normalidad, el polvo de la rutina volverá a cubrirlo todo de nuevo con su manto de quehaceres, encerrándonos y aislándonos en “otras” burbujas como son el trabajo o hacer planes de ocio familiares, como ese viaje ideal postergado o esa escapadita a la playa o a la montaña.
Decía una amiga que lo extra-ordinario es todo aquello que se sale de lo cotidiano, de lo conocido. Y qué duda cabe que esta situación de pandemia nos ha enfrentado a un escenario para el cuál no estábamos preparados y hemos tenido que reinventar nuestra propia convivencia sacando del fondo de armario lo mejor que tenemos de nosotros mismos.
Un escenario social que nos ha conducido a relacionarnos con las personas que nos rodean de una forma muy distinta a la habitual. De cerca con nuestros vecinos, antes casi desconocidos -pero a distancia- de balcón a a balcón , de azotea a azotea, ahora espacios de encuentro, espacios comunales en el sentido verdadero del concepto. Y todavía más de cerca, con aquellas personas con las que compartimos nuestra intimidad y espacio familiar aprendiendo a respetar su singularidades pero aprendiendo en definitiva, a convivir y compartir.
De lejos, también nos hemos (a)liado con el whatsapp, con las tecnologías para trabajar en unos casos y para comunicarnos (con llamadas y videoconferencias) con amigos y familias que viven en la distancia física de otro barrio, otra ciudad u otro país.
Lo que sí quisiera es romper una lanza en aras de la cultura y las artes. Hemos podido comprobar cuál necesarias están siendo también ( aparte del personal sanitario y otros colectivos que se están empleando a fondo ) en estos tiempos de crisis sanitaria . Cuando salgamos de ésta a buen seguro viajaremos e iremos a tomar cañas, vinos o a darnos un homenaje en un buen restaurante, pero también seamos agradecidos y devolvamos a los creadores y plataformas culturales la generosidad con la que han ofrecido altruistamente su tiempo, sus recursos disponibles y sus talentos para hacer más llevadero este duro confinamiento.
Por eso también cuando pase todo esto y nos recuperemos económicamente del shock, vayamos a los museos, a las exposiciones, a los conciertos, a los teatros, llenemos los cines, acudamos a las librerías, … consumamos, en definitiva, también un poco de cultura para que ésta alimente a sus creadores, nos alumbre, enriquezca emocionalmente y nos de verdadero sentido como especie humana.
¡ Y que decir de nuestro personal sanitario ! Merecidamente les he homenajeado en otros dibujos de esta serie. También, por supuesto, agradecer a tantos y tantas docentes por hacer lo imposible para que este año escolar no se pierda y poder seguir atendiendo a su alumnado en una nueva e inédita situación para la que han tenido nuevamente que reinventarse.
Decía el escritor y pensador francés Malraux en sus antimemorias que la especie humana solo sobrevivirá al precio de una implacable metamorfosis. Ojalá así sea, mientras nos valga para que apreciemos en adelante el verdadero valor de las cosas y las personas y cosechemos a partir de ahora más humanidad, más cultura, más belleza …
Mis dibujos anteriores y su relatos diarios pueden leerse en esta misma revista
Gracias.
