Montevideo y la pandemia . Parte 12.

Los dictadores estarán felices, en tiempos de pandemia se logró lo que ellos no pudieron…

“Hoy se hicieron 562 test. Dando como resultado 550 negativos y 12 positivos”. Los comunicados diarios siguen en ese tono, luego hablan de medidas, y al final los periodistas hacen preguntas. Pero curiosamente ninguno preguntó algo básico. Si los resultados de los test tardan 3 o 4 días, ¿Cómo se hicieron hoy y se sabe cuántos positivos hay? Serán test que se hicieron otro día, ¿cuándo?, ¿dónde? Si quieren que salgamos a contagiaron en masa son datos importantes. La información actualizada no es tal. Entonces, ¿por qué salió a dar el comunicado el presidente?, ¿por qué esta vez? Sencillo, quería defender una ley de más de 500 artículos que presentó en el parlamento. Una medida que convierte al máximo ´órgano democrático en un mero trámite.Ni una sola medida de esas 500 y pico hablan de algo relacionado a la salud y las medidas económicas que toma son pre- crisis. En el mismo día, el nuevo director de los medios públicos, un periodista muy crítico del gobierno anterior (o sea, no es alguien nombrado por consenso, ni por concurso) manda su primer comunicado, dice que revisarán los contenidos de los informativos. Y en la misma semana, (no hay tiempo que perder), cambian al director de uno de los principales hospitales públicos de la ciudad. El caso, en tiempos de pandemia, es muy llamativo: En el noticiero hacen uno de esos reportes minuto a minuto, dicen que un delincuente se fugó del hospital baleando a dos policías y está atrincherado en un muelle. La policía termina disparándole y rescatan el cuerpo del hombre del Río de la Plata. Pero luego se sabe, que el hombre,delincuente fugado, no era tal. Tenía 21 años, no tenía antecedentes y ni siquiera estaba detenido. Era un joven que estaba en una calle, fue llevado a la fuerza por la policía porque estaba descompensado y estaba haciendo disturbios y una vez en la emergencia quitó el arma uno de los policías, les disparó a las piernas y se escapó, diciendo que no se iba a entregar, lo único cierto es que terminó muerto. La noticia desapareció de los medios, está en investigación administrativa. El director del hospital reclamó en Twitter sobre el riesgo que la acción policial llevó a la puerta de emergencia y ese mismo día lo echaron, “ya lo tenían pensando hacer”, dicen.fue llevado a la fuerza por la policía porque estaba descompensado y estaba haciendo disturbios y una vez en la emergencia quitó el arma uno de los policías, les disparó a las piernas y se escapó, diciendo que no se iba a entregar, lo único cierto es que terminó muerto. La noticia desapareció de los medios, está en investigación administrativa. El director del hospital reclamó en Twitter sobre el riesgo que la acción policial llevó a la puerta de emergencia y ese mismo día lo echaron, “ya lo tenían pensando hacer”, dicen.fue llevado a la fuerza por la policía porque estaba descompensado y estaba haciendo disturbios y una vez en la emergencia quitó el arma uno de los policías, les disparó a las piernas y se escapó, diciendo que no se iba a entregar, lo único cierto es que terminó muerto. La noticia desapareció de los medios, está en investigación administrativa. El director del hospital reclamó en Twitter sobre el riesgo que la acción policial llevó a la puerta de emergencia y ese mismo día lo echaron, “ya lo tenían pensando hacer”, dicen.El director del hospital reclamó en Twitter sobre el riesgo que la acción policial llevó a la puerta de emergencia y ese mismo día lo echaron, “ya lo tenían pensando hacer”, dicen.El director del hospital reclamó en Twitter sobre el riesgo que la acción policial llevó a la puerta de emergencia y ese mismo día lo echaron, “ya lo tenían pensando hacer”, dicen.

La ley que será aprobada en el parlamento tiene un gran capítulo sobre “inseguridad”, un tema que era la principal preocupación en Uruguay. No era la economía, el desempleo o la contaminación, era la cantidad de delitos que la Tv relataba día tras día. Hasta la pandemia., hasta que la TV sólo comenzara a contar historias relacionadas, directa o indirectamente, por el coronavirus, entonces la principal preocupación pasó a ser, lógicamente, el coronavirus.

Por la ciudad, cada vez se ven menos tapabocas. Todavía no pasaron los días de incubación y ya aburrió el tema. Los buzones, virtuales y reales, se llenan de facturas, como si en ningún momento nada se hubiera detenido, las ayudas no parecen encajar en ningún colectivo. Una legisladora del gobierno dice en el parlamento, estar harta de los colectivos. No se puede manifestar, por las aglomeraciones y porque está mal visto protestar contra un gobierno que al fin y al cabo lleva sólo un par de meses y tuvo que lidiar con una pandemia que paradójicamente no golpeó mucho a nuestra República.

La militancia a favor del gobierno festeja. Están felices de todo lo que pasa. Dicen que en el gobierno anterior, se votaban cosas por mayoría absoluta y no se escuchaba a nadie. Si dentro de cuatro años gana otro partido e impone leyes con este nuevo método, el parlamento deja de tener sentido. Los dictadores estarán felices, en tiempos de pandemia se logró lo que ellos no pudieron matando, secuestrando y torturando personas, y encima hay mucha gente que lo festeja. Dicen que murió otra persona, tenía más de sesenta años, y había estado enferma alguna vez. No parecen lamentarlo tanto, lo dicen de pasada y van a publicidad, y comienza esos programas nuevos de TV que se hacen vía Skype, con famosos desde las casas, siempre con una biblioteca atrás, publicitando productos que no sabemos cómo vamos a hacer para consumir.