Confesiones de una emprendedora ¿Aún sigues pensando en serlo?

Las preocupaciones y miedos al momento de comenzar a emprender siempre serán los mismos, no importando cuanta experiencia tengas al respecto. En estos primeros meses de vida de mi proyecto para apoyar a la mujer en fortalecer su perfil personal y profesional, he visto que en los pasos iniciales de vida del plan salen a relucir más las destrezas humanas que técnicas: la capacidad de reaccionar, readaptarte, escuchar lo que pasa en el entorno, sobreponerte de los desacuerdos, y ser resiliente y firme frente a la idea que tienes.

Comenzar a ser emprendedor no es un signo = a dinero, aunque muchos lo piensan, e incluso es la causa no. 1 en la que las mujeres en latinoamérica emprenden. Se cree que, si no logras visualizar cuanto dinero o recursos has generado en un par de meses, lo mejor es regresar al camino anteriormente conocido, retomar tu empleo y seguir.

Tonny Robins tiene una frase que dice: “no se trata de los recursos que tienes, sino de lo ingenioso que eres”, y es que de verdad como emprendedor nunca tendrás recursos ilimitados al mismo tiempo: recurso humano, capital o tiempo, siempre alguno de ellos estará jugando en la cuerda floja.

5 mitos del emprendimiento, que he descubierto en los primeros 6 meses:

1. Necesitas saberlo todo.

Es válido pedir ayuda. Existen programas de distintas estructuras en incubadoras o herramientas en línea que pueden ayudarte a moldear el plan de negocios, aspectos básicos de filosofía, finanzas, plan de mercadotecnia y ventas. Esto es el plan de inicio que requieres para poder lanzarte por un apoyo de capital. En el afán de saberlo todo puedes enterrarte solo en un cerro de documentos y no saber que hacer con tanta información.

2. Tienes que tener la mejor idea, si no ni pierdas tu tiempo.

Creo que, durante la estructura, tener la idea de hacerlo de una forma distinta o más acercada a lo que tu mercado desea, es suficiente para lograrlo. El éxito tendrá siempre que verse en la ejecución del plan.

3. Experiencia, experiencia, experiencia, lo es todo.

Diferentes autores de innovación hablan de convertir esas debilidades, jugando con la percepción hacia verlo como oportunidades.

La innovación también puede venir de personas que están fuera de la industria, porque se tiende a hacer las cosas distintas a como se conoce que ha funcionado, la mejor herramienta que se puede tener para crecer tu experiencia y que con ello ganes credibilidad, es hacer que tu proyecto vaya teniendo un real progreso. El tiempo es relativo.

4. Debes ser aventurero, creativo y el mejor en las relaciones públicas

Como lo comentaba al inicio de este blog, es que al comenzar a estructurar el plan, muchas de las cualidades por supuesto que debes tenerlas, sin embargo, otras vendrán con el tiempo y el trabajo en el progreso del proyecto. Creo que el requerimiento base es no desistir, aprender y recuperar el ritmo rápidamente, y siempre estar abierto al cambio que es la única constante.

5. Necesitas mucho dinero

Lo pongo como no. 5 porque siempre es la preocupación #1 al pensar en emprender, si hay que tener un plan de supervivencia, y luego de producción para que llegue a ser la base que te permita continuar el proyecto, sin embargo no es un factor solitario en la ecuación.

A través de asesorías con empresarios y especialistas, cursos online de reconocidas universidades como Harvard o el MIT y literatura de emprendedores para estructurar mis ideas, aún me queda camino por recorrer para que el proyecto madure y pueda presentárselos, mientras tanto solo me queda responder la pregunta ante ustedes ¿aún sigues pensando en ser emprendedora?, la respuesta es: Sí.