Caso Familar: María

Durante la clase del 24 de noviembre, analizamos el caso de María, una mujer de 32 años de edad que se encontraba en un dilema familiar. María había perdido a su madre a muy temprana edad y su padre se casó por segunda vez con una señora que en realidad no soportaba a María y era humillada y maltratada por ella al igual que por sus medios hermanos.

A los 19 años de edad María se une en matrimonio con Carlos. Menciona que se casó muy ilusionada, se sentía protegida por él y lo que eran celos agudos ella lo evaluaba como amor, nunca antes había se había sentido importante y querida por alguien. Con el tiempo María tuvo a su primer hijo Rodolfo y a los dos años de haber nacido, María se separa de Carlos debido a problemáticas causadas por su adicción al alcohol.

Posteriormente María conoce a Luis, con quien tuvo su segundo hijo y mantuvieron una relación por un tiempo, pero nunca vivieron juntos ni se hizo cargo de su hijo. Después tuvo una relación con Ángel, con quien tuvo una fuerte relación emocional, al igual que los niños que lo vieron como un padre. A los dos años de vivir juntos, Ángel fallece en un accidente automovilístico.

En el 2004 María regresa con Carlos quien se encuentra arrepentido y pide volver juntos, sin embargo al poco tiempo de un año volvió a tomar y la violencia reapareció, en sus ataques de violencia principalmente era Luis (el hijo pequeño) quien recibía los golpes, incluso llegó a ahorcarlo. Después de atacar a Luis, iba contra Rodolfo o María.

Con el paso del tiempo María se embarazo por tercera vez y Carlos le pidió que abortara, ella no aceptó y la agresión, se agudizó, llegando a los golpes y en varias ocasiones tuvo que huir de la casa junto con sus hijos.

En el 2007 después de una violencia física, Carlos deja la casa y solo regresa de vez en cuando para tomar cerveza de la tienda de abarrotes que tenían. Cuando va hay agresiones psicológicas.

Durante un tiempo María entró en depresión y refirió que un año antes de iniciar la terapia comenzó a bajar mucho de peso, en dos meses pasó de 90kg a 55kg, sin embargo decidió salir adelante por sus hijos. Poco tiempo después Carlos empezó una relación de noviazgo con una muchacha y les pidió a sus hijos que la conozcan y que la traten bien.

María decide tramitar los papeles de divorcio y acudió a la Unidad de Atención y Prevención de la Violencia Intrafamiliar (UAPVIF) para solicitar asesoría jurídica y apoyo, porque vivía violencia de pareja.

Es un caso muy interesante y la verdad alentador, ¿por qué alentador? María se da cuenta de que las cosas no le han salido bien y sigue aguantando su dolor, pero decide cambiar las cosas por el bien de sus hijos. Visto desde un enfoque humanista, decide salir de lo que la hace daño y tener un “empoderamiento” de su situación, no solo por ella sino también por sus hijos.

En el enfoque humanista decidimos dar como un inicio una identificación de las necesidades de María, basándonos en la pirámide de Maslow, la cual ordena las necesidades humanas, pero desde las necesidades que considera María como más relevantes (en este caso, nosotros pensamos en la seguridad). Continuando con la terapia continuamos con un ejercicio conocido como “la silla vacía” la cual trataremos de externalizar los problemas de María y dar una solución a ellos.

Una vez logrado el avance esperado con María nos gustaría introducir a sus hijos para manejar el concepto de violencia, por medio del psicodrama y la biblioterapia, dar a conocer optativas para saber cómo tratar con la frustación y el enojo, canalizar esas energías y que sean liberadas por un medio saludable, ya que guardan un temor a “convertirse en su padre” (Carlos).

Esto ya es un comentario personal, pero esta es una solución visto desde el enfoque humanista en clase observamos que se puede trabajar por medio de distintos enfoques, pero lo más importante es proteger la vida y la integridad de las personas.