CASO “MANUEL”
Manuel es un adolescente de 13 años de edad que presenta psicosis. Este caso fue expuesto a la clase el día 12 de octubre, por Daniel, quien intervino en el caso desde un enfoque psicoanalítico.
Cuando Daniel decide tomar el caso en el Centro de Servicios Psicológicos de la Facultad de Psicología, Manuel refería tener “pensamientos de muerte”.
Tras distintos diagnósticos y tratamientos, Manuel, es atendido por Daniel, quien después de varias entrevistas, logró condensar antecedentes relevantes de la Historia Clínica de Manuel, los cuales dan respuesta a su padecimiento. A continuación, se muestran algunos de ellos:
- Negación en la familia: por parte de la abuela, por ejemplo, cuando refiere que su hija (madre de Manuel) frecuentaba una casa donde convivía con personas consumidoras de alcohol, considerando que su hija no lo hacía a pesar de que la notaba “extraña”. En dicho lugar conoce al padre de Manuel, quien es alcohólico.
- Consumo de sustancias durante el embarazo, aunque la madre llega a negarlo.
- Fantasías de la madre como, el deseo de resarcir el amor de su madre, a partir del nacimiento de Manuel.
- Ambiente de crianza inestable: Manuel pasa días en la casa de los abuelos paternos, luego le cuidan en casa de los abuelos maternos, etc. Qué como sabemos, es necesaria la continuidad en el cuidado de los niños para crear una estabilidad.
- Rechazo y agresiones físicas del padre hacia Manuel (golpes, encierro en jaulas, lastimar si pene intentando arrancarlo, quemaduras de cigarro, entre otras) por el hecho de haber nacido varón y no una niña como a él le hubiera gustado.
Desde el psicoanálisis, la psicosis de Manuel refiere permanecer en un estado de desintegración psicológica desde su infancia, en el cual no se identifica con la realidad, y para mantener una conexión con ésta, presenta delirios.
Con “estado de desintegración” se hace referencia a la ausencia del inconsciente en el aparato psíquico de Manuel. La función del inconsciente es reprimir aquellas experiencias o situaciones que han causado daño y angustia a lo largo de la vida, por lo tanto, en Manuel, no ha sido posible reprimir aquellos acontecimientos de su infancia tan caóticos, recuerda todo, significando la conciencia de todo ello, sin la capacidad de contenerlo, no hay olvido. Por ello, Manuel presenta fantasías de muerte y delirios, pues pensarse así mimo, pensar en su vida, en su historia, es igual a pensar en la muerte.
Asimismo, en su discurso, Manuel se expresa sin “complejidad”, es decir, la metáfora del lenguaje y en entendimiento de la misma, no se presenta en él.
La intervención se desarrolló durante dos años, donde en las sesiones se trabajó con la expresión simbólica del discurso de Manuel con distintos materiales, tolerarse a sí mismo y a su odio, buscar su deseo más allá del deber ser que le recalcaba la gente, como comportarse, falta de tolerancia hacia las actitudes de Manuel, contradecirle, etc.
Se propuso a la abuela de Manuel, quien es su principal cuidador, optimizar sus habilidades y gustos, por ejemplo, ser panadero, y lo fundamental: continuar con un acompañamiento psicológico que continúe con el modelo psicoanalítico.
