“Caso Michel y Caso Ético”

Almaguer Cuellar Itzel Denise

De la Cruz Miranda María Fernanda

Díaz Castillo Paola Stephania

Durán Pérez Hilda Andrea

Madrigal Valdés Karen Janelly

Ortega Marquina José Enrique

Pérez Salazar Alonso

Ramírez Medina Eric Tonatiuh

Sanabria de la Rosa Karla Nayelli

El pasado viernes 17 de noviembre se expuso el siguiente caso, con la finalidad de aplicar los diferentes modelos psicológicos que se han visto en la resolución de el; además era importante abordar el dilema ético que se presentaba en el caso y plantear posibles soluciones:

“Michel, de 7 años y medio, llega derivado por la escuela por sus dificultades escolares, lentitud lectora y confusión de sonidos. Se trata especialmente de problemas de conducta, “tiene miedo a todo”, especialmente a quedarse solo en casa. Los padres se han separado muchas veces, la última hace dos años.

Los cinco hijos vivían con la madre, pero los dos mayores, después de algunos encuentros verbales con la madre, exigen vivir con su padre. El tercero que tiene 12 años y es violento con los más pequeños (Michel y su hermano menor de 5 años) les amenaza con un cuchillo y se une a los dos mayores para irse.

Estas separaciones continuas provocan una depresión en la madre, que ha de dejar su trabajo durante nueve meses, después de los cuales lo retoma a media jornada, como medida terapéutica. En este tiempo vive en un hogar para mujeres maltratadas y después en un piso protegido.

Durante un fin de semana con su padre, Michel le dice que su madre le ha dado una bofetada porque él había tirado comida a la basura, lo que inmediatamente provoca un paso al acto del padre se dirige a casa de la madre con un arma en la mano a lo cual la madre llama a la policía.

A todo esto Michel pretende no haber dicho nada. El niño se encuentra solo y rechaza cualquier proposición que se le haga, actuando por inercia, manteniendo la cabeza entre las piernas.” (Klein, 2009)

Las forma de proceder propuesta por el modelo psicoanalítico fue más enfocada hacia la parte legal, principalmente por la constante violencia que se presenta en la familia donde Michel está creciendo, y las posibles repercusiones que ello tendría en su desarrollo. Sin embargo, consideran las posibles afectaciones que pudieran tener los padres, por ejemplo, se mencionó que el conflicto familiar podría afectar directamente a la madre llevándola a un estado de ánimo depresivo.

Por su parte, el modelo sistémico, considera el llevar a cabo una intervención con la familia, debido a que si una de las partes del sistema (en este caso la familia), presenta dificultades o problemas, es un reflejo de que los demás miembros presentan dificultades también, y partiendo de los datos que se tienen sobre el caso del menor, hay una notable incidencia de violencia en la mayoría de los miembros. Así mismo, el dilema ético que ellos consideraron se dirigió más ha que pasaría con la custodia del menor si se procedía un proceso jurídico, ya que no consideraron que alguno de los padres fuera un mejor cuidador para el menor.

Desde el modelo humanista, la resolución que se encontró fue por medio del arteterapia, ya que en el caso de Michel, el principal problema era la palabra, el menor relacionaba el hablar con la agresión, a lo largo de su historia recibió agresiones verbales por parte de sus hermanos, y cuando él le cuenta a su padre el problema de la comida lo que generó su discurso fue más agresión hacia su madre, debido a ello Michel optó al final por no emitir más, así que partiendo de ello la arteterapia se vuelve una vía de acceso o de comunicación de Michel hacia los demás.

Para ello y una mejor comprensión de la forma de abordar el caso, es necesario recordar algunos de los principios de la arteterapia. Principalmente que a través de ella las personas logran conectar su mundo interno con el externo, además de que se vuelve una forma de expresar aquello que puede causar conflictos debido a que las defensas se bajan y es más fácil acceder a ello, sobre todo que es un medio de comunicación no verbal, de tal forma Michel tendría una manera de comunicar aquello que estaba siendo reprimido.

Un punto importante que se debe mencionar es que el caso que se analizó no correspondía como tal a un dilema ético, más bien a una mala práctica por parte de quien lo realizó, ya que al existir este índice de violencia en el medio del menor, era necesario remitir a instituciones que tuvieran la autoridad para proceder de manera adecuada.

Posteriormente, se discutió un caso expuesto por la profesora acerca de una paciente y su madre a quienes ha atendido por 9 años. Dentro del caso se presentaron dos dilemas éticos: el primero, con el psiquiatra que las atendía, ya que dicho profesional se mostró sumamente directivo con la madre, llegando a los extremos de decir “El que se debe hacer” cuando la madre de la paciente preguntó qué acción tomar con sus hijos a raíz de un conflicto de índole sexual, respondiendo que “lo que tenía que hacer era correr a sus hijos de la casa”, acción realizada por la madre, quien hasta la fecha considera que fue la mejor decisión que pudo haber tomado en aquel momento pudo tomar (qué pudo hacer). El segundo dilema ético surge años después de aquel incidente, y otros cuantos desaires más; ya que ¿Qué debería hacer aquella madre si ese hijo que sacó de su vida quiere volver a incluirse años después? Esa fue justo la pregunta que la madre realiza a la profesora, esperando una respuesta que le dijera que hacer, sin embargo la profesora contesta de manera correcta diciendo ¿Tú que consideras que es correcto?, dándole a la madre y a la paciente la responsabilidad de la decisión que van a tomar, ella simplemente orientándolas a que su decisión sea lo mejor para ellas.

REFERENCIAS

Klein, J.-P. (2009). Arteterapia. Octaedro. 67-72.

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