La logoterapia y la búsqueda del sentido.

La logoterapia se encuentra basada en tres conceptos, la libertad de la voluntad, la voluntad y el sentido, el sentido de la vida; en el primer punto se trata de oponer al determinismo que se viene manejando en la mayoría de los enfoques, principalmente a la idea de que el hombre se limita a existir, como si estuviera condicionado o determinado; en el segundo aspecto, la voluntad y el sentido, se pretende poder diferenciarla de la voluntad de poder y de placer (lo que sería el principio de placer propuesto por Freud); en cuanto al sentido de la vida se intenta demostrar que sin importar la caída de aspectos significativos, la vida sigue teniendo un sentido para cada uno de los individuos.

La logoterapia enseña que aún en los sucesos trágicos de la vida, como lo es el sufrimiento, la actitud que la persona tome ante ellos puede convertirse en un logro humano; por lo tanto la logoterapia no es absolutamente pesimista, pero si es realista ya que enfrenta a la tríada trágica de la existencia: sufrimiento, muerte y culpa (Frankl, 2012).

Debido a que parte del supuesto de que el hombre no solo posee una dimensión física y psicológica, sino también una dimensión humana, si la finalidad es entender al hombre en su totalidad se deben tomar en cuenta cada una de las dimensiones. Así, esta última dimensión es lo que le permitirá el trascender, aspirar a una dimensión superior pero que no se quede en el querer, sino que sea capaz de incorporarlo a su realidad, siempre teniendo en cuenta que la vida tiene sentido sin importar las circunstancias, por más difíciles que sean.

Retomando la crítica que hace Frankl al principio del placer propuesto en la teoría de Freud, el primero considera que el hombre no tiende primariamente al placer, ya que más bien busca tareas vitales que lograr y que el verdadero placer lo consigue al realizarlas (Fabry 1977).

Un aspecto principal dentro de esta terapia es la libertad, la cual desde esta visión se considera que no debe tomarse arbitrariamente, sino siempre debe estar presente la responsabilidad de sus propias decisiones.

En la logoterapia el hombre es visto como un ser en el que su vida es una serie de situaciones, pero cada una de estas situaciones está destinada específicamente a él, así entendemos que la felicidad e incluso la salud mental, depende de que encuentre el sentido a cada una de las situaciones.

Este sentido lo puede encontrar en una infinidad de posturas (religión, ateísmo, agnosticismo, etc), no importa donde encuentre este sentido, lo importante aquí es que sea capaz de comprender que es libre de actualizar los sentidos de su vida, que está obligado a hacer y sobre todo que nadie lo hará por él.

Pero intentemos comprender mejor a lo que se refiere con sentido, ya que es la meta dentro de ella, en la logoterapia este sentido es tomado desde diferentes puntos de vista, el científico, religioso, filosófico y existencial. (Fabry, 1977)

La búsqueda de sentido se inicia en un nivel simple y cotidiano, como podría ser responder a las exigencias del momento y aceptar las las tareas que la vida puede poner. Pero detrás de lo que podrían parecer sentidos simples, es que realmente hay misiones más importantes, uno puede realizar en el momento una actividad, pero hay finalidades superiores al hacerlo, en una de las entrevistas que Frankl dió sobre la logoterapia, la tarea inmediata consistía precisamente en hablar sobre ella, pero existía una tarea con mayor trascendencia, que era que el mensaje de la logoterapia pudiera llegar al mayor público posible. Se puede decir que debe haber tanto una atención al presente, como al próximo paso a dar.

Fabry toma las palabras de un químico que acudió a un simposio en torno a la logoterapia, las cuales retomo aquí debido al entendimiento que logró acerca de ella esperando hacer más entendible lo expuesto “ Frankl formula la hipótesis de que la vida tiene sentido, en seguida exhorta al paciente a que tome una lámpara y avance en la oscuridad. Al principio éste únicamente podrá ver un círculo de luz muy reducido a su alrededor. Luego Frankl le sugiere al paciente que eleve su lámpara a una altura cada vez mayor y que continué avanzando, paso a paso, conforme sus alrededores se vuelven visibles. De esta manera es posible que el paciente encuentre finalmente su camino”.

Y es que esta es la finalidad de la logoterapia, iluminar, permitir que ese sentido que tanto se busca resplandezca para que las personas lo puedan ver.

Referencias:

• Fabry J. (1977). La búsqueda de significado, la logoterapia aplicada a la vida. México: Fondo de Cultura Económica .
• Frankl, V. (2012). Fundamentos y aplicaciones de la Logoterapia. Barcelona: Herder.
• Frankl, V. (1990). Logoterapia y análisis existencial. Barcelona: Herder.