Rumbo al titulo de Maestría
El día viernes 30 de noviembre del 2018, tuve la fortuna de asistir al examen de maestría de Mariana, una talentosa profesionista que curso la licenciatura en la Facultad de Psicología de la UNAM, en el área clinica. Mariana curso varias materias con la Doctora Eva Esparza, y también realizo el Servicio Social bajo su cargo.
Para obtener el titulo de “Maestra en Psicología” Mariana curso dos años en el posgrado, y trabajó con un caso en el Centro de Servicios Psicológicos Dr. Guillermo Davila. El caso trabajado, fue el de una adolescente de 14 años llamada Mara, quién se encontraba sumamente molesta con todos y con todo. Esto porque desplazaba el coraje que le tenia a sus padres, a los otros. Dicho coraje fue provocado por una madre psicótica, que no deseaba tener a la niña, que incluso pensó en matarla en dos ocasiones, y un padre que era de carácter fuerte, y explosivo.
La hoy maestra Mariana, tuvo un gran reto al enfrentarse con un caso como el de Mara con tanta carga contratransferencial. Mara provocaba a su psicóloga coraje, frustración, y ganas de querer abortarla, como en un momento las tuvo su madre. Sin embargo, a pesar de que en indistintas ocasiones se encontraba al borde de abandonar el caso, sabia que esa chica la necesitaba, y jamas renunció a ella, logrando así que Mara tomará consciencia de su tono de voz, que buscará entender el porque de su enojo, y que despertará en ella un interés por aceptar su sexualidad, interesarse en arreglarse, y salir a divertirse con otros en festividades culturales, como lo es el día de muertos.
Creo que el punto importante a resaltar aquí es el gran papel que jugo la Maestra Mariana, con Mara, ya que, en caso de no haber intervenido probablemente el coraje de Mara pudo haber sido canalizado a actos delictivos. En este punto me parece importante resaltar la importancia que tiene la intervención psicológica en la prevención de la delincuencia, ya que si bien trabajar con un psicópata, o sociopata es una tarea sumamente difícil, atender y prevenir a los perversos, puede contener y evitar el daño potencial que estos podrían hacer.
Volviendo un poco al tema del examen profesional, me gustaría compartir, como lo viví. Cuando la Maestra Mariana presentaba su trabajo, me pareció sumamente admirable el haber intervenido con un caso como el de Mara, y pensé ¿qué hubiera hecho yo?, ¿qué me hubiera causado contratransferencialmente Mara a mi?, ¿hubiera renunciado?. Una vez finalizada la exposición, se procedió a la replica, dónde cada sínodo hizo preguntas sobre el trabajo. Dichas preguntas, iban más allá, habrían la posibilidad de campos de investigación, de posibles intervenciones con la madre, con base en su posible estructura psíquica, y resaltaban la intervención de Mariana, quien era descrita como una alumna inteligente, dedicada, y apasionada, características que sin duda alguna, deben describir a una Maestra en Psicología.
Cuando llegamos a la toma de protesta, fue un momento emotivo para todos los presentes, porque, aunque tal vez no tengamos lazos de amistad, o familiares con aquella próxima maestra, compartíamos la casa de estudios, compartíamos la pasión, y las ganas de seguir aprendiendo, y ella estaba encarnando algo que sin duda alguna muchos queremos vivir.
