Terapia Humanista-existencial
La psicología humanista surgió a mediados del siglo XX, en respuesta a la visión reduccionista y mecanicista del ser humano que proporcionaban las dos corrientes psicológicas dominantes: el conductismo, que se centraba excesivamente en lo científico, y el psicoanálisis, que ponía el énfasis en lo negativo y patológico de la persona.
El movimiento humanista, en cambio, contempla al ser humano en su totalidad, y confía en sus posibilidades de desarrollo, basadas en la conciencia y la responsabilidad de su experiencia vital. Considera que ese es su principal potencial interno de transformación. De este modo, contribuye a humanizar la psicoterapia.
La terapia humanista tiene algunos puntos centrales, entre ellos está que contempla el momento presente por el que atraviesa una persona, así mismo, ésta contempla al terapeuta y al cliente a un mismo nivel.
Algunos de los métodos utilizados son:
Logoterapia: Fundada por Viktor Frankl. Es considerada como una terapia del sentido y significado donde la persona es responsable de asumir el sentido de su vida. Es una terapia de enfoque existencial, orientada hacia el futuro que busca significados, tomando en cuenta la dimensión del propia del ser humano, centrándose en un nivel espiritual. Se puede aplicar cuando se tiene una percepción de que las cosas no tienen sentido. Algunos de los tratamiento que se pueden usar incluyen; el análisis existencial, el logodrama, la intención paradójica, la reducción del pasado, etc.
Otro de los métodos incluye el Psicodrama, fundado por Jacobe Moreno, un método en el cual se busca ayudar a la persona a explorar las dimensiones psicológicas de sus problemas, esto a través de una serie de representaciones de situaciones conflictivas. Dentro de este se tienen algunos elementos básicos que incluyen; protagonista (sujeto de la representación psicodramática), director (guía al protagonista para poder explorar su problema), Ego auxiliar (representa a alguien de la vida del protagonista), público (participa en la exploración de los sentimientos del protagonista). Todo esto es un proceso que inicia con la preparación para la acción, seguida de actuar la vivencia de la persona para luego elaborar conceptualmente de lo ocurrido.
El psicodrama es un método que me llama la atención pues se pretende actuar los acontecimientos relevantes de nuestra propia vida en vez de simplemente hablar sobre ellos, lo que implica explorar en la acción, mediante la dramatización, acontecimientos relevantes de nuestra historia, situaciones vitales o dimensiones de nuestra vivencia interior, ya sean pasados, presentes o futuros, reales o imaginarios, externos o internos, experimentándolos al máximo, como si estuvieran sucediendo en el presente.
En lo personal considero que la terapia humanista-existencial ayuda a encontrar un sentido de vida, permitiendo profundizar en los conflictos personales, observar las dificultades y desarrollar recursos para afrontarlas, trata de integrar todos los aspectos de la personalidad. Es un proceso que brinda la oportunidad para que, de forma activa y responsable, se exploren los problemas que aparecen en la vida.
