Mi camino a Santiago
15+1 días de peregrinaje. Día Doce.
Dia Doce.
Lunes 12 de Mayo. San Marcos — Santiago de Compostela. 5km caminados.
“Llegada a Santiago de Compostela. Hoy camino por mi pasión: Correr!!! Por todos mis amigos corredores y runners. Por Panagiotis Voidonikolas y su generosidad infinita… Y por decir que fui yo quien lo inicio a correr. El va a estar haciendo, hoy el recorrido que hacíamos cuando entrenábamos (y coincidiendo con mi llegada a Santiago). Por todos los integrantes de Grufit — ATP. Por todo el aprendizaje que he tenido de cada uno de Ustedes. Por el coach, Nito (y por la familia deportiva que ha construido), Robinson Reinoso M (por ser el tigre que es), Diana Andrea Osorio (y las terapias que me han ayudado mucho), Cindy (por su paciencia en las clases de natación), Laura Viviana Tovar, Diana P. Martinez y las familias de todo Grufit. Por todos y cada uno de los integrantes del grupo “EntrenoDomingos-Patios” (Luis, Julian, Adriana, Ruben, José H, Fernando, Carlos, Los Manitos: Horacio, Jorge Ivan y Jucaro) y sus familias. Por EforcersCorre. Por Pablo Andrés Barreto Alarcón, Alexander Mojica, Abril J Delgado Molina,Ricky Rios, Ricardo Cardenas, David Cifuentes, Milhojas. Quiero nombrarlos a todos pero no alcanza el espacio. (Durante el camino vi varios corredores y me acorde de cada uno de Ustedes). Por Ultimo por mis amigos Adolfo (y Felipe), Gonzalo y la familia Citroen-Owners Colombia.”
Salgo del hotel y nos encontramos con Heiko muy rápido. Pasamos por Alto do Gozo y desde ahí se ve plenamente Santiago. Iniciamos el descenso del alto, los kilómetros y el tiempo se pasan muy rápido. Ya en las calles de Santiago encontramos el ruido característico de una ciudad mediana. Ya me he desaconstumbrado a esto por lo que se siente raro.
Del limite de la Ciudad a la Catedral son 4.7 km. Vamos avanzando con calma pues tenemos tiempo suficiente. Heiko no va a quedarse en Santiago porque va a seguir para Negreira vía a Fisterra (debe devolverse en 3 días para su casa.) Hace un año él estuvo en Santiago en compañía de su esposa. Luego de caminar varios minutos por las calles, vemos por primera vez la cúpula de la Catedral. La emoción aumenta. También empezamos a hablar de la despedida, de seguir en contacto y ese tipo de cosas.
Es probable que no nos volvamos a ver o hablar pero le agradezco todo el tiempo que caminamos y compartimos juntos. Que buena persona me entregó el camino.
Finalmente llegamos a la plaza y a la Catedral. Son las 8:20 de la mañana y todo está muy solo. Los almacenes y bares están todos cerrados. Averiguamos donde queda la Oficina del Peregrino y nos dirigimos para allá a reclamar la Compostela. Es muy cercana (solo dos cuadras) de la Catedral.
La Compostela es un diploma que es entregado a los peregrinos que por lo menos han cumplido 100 kilómetros de peregrinaje caminando (o 200km en bici). Para reclamarla es necesario presentar la Credencial con los sellos correspondientes.
Llegamos a la oficina y está vacía pero abierta. Me entregan la Compostela, wash!!! total. Realmente es una belleza no solo porque es la mía sino porque representa todo el camino, la experiencia y porque está en Latin, incluido mi nombre. Le agradezco a todo el mundo y a la vida por haberme brindado la oportunidad de llegar hasta acá y recibirla.
Al salir temprano y no haber comprado nada para comer en el camino (recordar que ayer fue domingo), nos enfocamos en buscar una cafetería para desayunar. Tomamos tiempo para disfrutar el desayuno. La iglesia abre al público los sitios de interés a las 9:00 am. Faltando 5 minutos llegamos a una de las puertas de la iglesia y nos despedimos. Heiko se queda revisando la ruta de salida de Santiago y yo entro a la Catedral.
En la Iglesia casi no hay gente y por supuesto colas. Me dirijo al altar donde está la estatua de Santiago. Subo unas escaleras y quedo detrás de él. Lo abrazo, al oído le doy las gracias por recibirme y le ofrezco este peregrinaje por la salud de mi familia y amigos (todos los que me acompañaron día a día en esta travesía.) Luego bajo a la tumba y allí me tomo unos minutos para para reflexionar por todo lo que he vivido.
Estoy muy feliz por estar acá, por todas y cada una de las vivencias que tuve y por supuesto por haber tenido este privilegio.
Salgo de la Catedral rumbo al Monasterio de San Francisco de Asis. Desde Colombia tengo la tarea de entregarle una carta al Hermano Angel y aprovecho para reclamar una segunda Compostela que conmemora los 800 años de peregrinaje de San Francisco de Asis.
Con tanta emoción el tiempo pasa muy rápido. Ya son las 11:00am y la misa del peregrino en la Catedral es a las 12:00. Aprovecho para visitar los alrededores y comprar algunos detalles. A eso de las 11:30 me voy para la Catedral. Ya casi está llena por lo que busco puesto cercano al altar. Como voy solo fue fácil conseguir un buen puesto. Faltando un cuarto para las 12, sale una monja que hace las veces de maestra de ceremonias y empieza a explicar como se dará el rito incluido el ensayo de algunas canciones. Ya quedan solo 5 minutos. Nos advierten que a partir de este momento no se pueden usar aparatos electrónicos (sí, como en los aviones).
Inicia la misa. El padre lista las nacionalidades de los peregrinos que se han registrado hasta hace una hora en la Oficina del Peregrino. El padre nombra un número importante de países de peregrinos. Por fin llega a la parte interesante para mi: de Colombia, un peregrino, (YO?) que salió de León (SI YO!!). Wash!!!.
Luego continua con el rito mas o menos conocido por mi pero acompañado con cantos muy bellos de las monjas y de los acordes del órgano de la Iglesia que esta ubicado en el techo de la misma.
Ya casi terminando la misa, empiezo a ver movimiento de varias personas vestidas de rojo alrededor de la soga que sostiene el Incienciario (o Botafumeiro). El padre termina con la bendición y pide que lo prendan. Wash!!!. No es habitual que lo prendan todos los días por lo que me siento más privilegiado aún. El dispositivo es bastante pesado. Inicia el proceso de prenderlo y elevarlo. Son 8 personas de talla grande que una vez prendido empiezan a halar la soga. El Botafumeiro empieza a elevarse y luego a pendular esparciendo el humo de incienso por toda la iglesia. Me impresiona la velocidad que toma. Cierro los ojos y me concentro en respirar el olor y disfrutar de las sensaciones del momento. El Incienciario llega a la altura máxima, casi tocando el techo de las alas laterales de la iglesia (o eso me pareció.) No puedo dejar de pensar que pasaría si alguna persona se atravesara a la trayectoria del Incienciario.
Les comparto el video del Botafumeiro en acción.
El ambiente es muy festivo. No es para menos. Todos los que estamos acá estamos celebrando el haber cumplido con la peregrinación
Al final, cuando todo termina, me encuentro con Juliano, mi amigo brasileño del camino. Tomamos la respectiva foto y le pido que grabemos sus impresiones del camino en video. Luego me encuentro también con Iñaki.
Ya he cumplido con las tareas del día por lo que ya es hora de buscar hotel. Encuentro el San Martin Pinaro que es bastante bonito y no tan costoso (23 euros). Como a la misa no se puede entrar con el morral, previamente lo he dejado en un casillero (2 euros por día). Entonces voy a recogerlo y me devuelvo al hotel para dejar mis cosas y buscar almuerzo.
En el hotel coincido con Kirsten. Hablamos un poco y convenimos en vernos mas tarde. Yo tomo el almuerzo: merluza en salsa que resultó más difícil de comer de lo que pensaba por el tamaño y número de espinas.
Luego de almorzar, me dedico a recorrer los alrededores y visitar algunas tiendas. Compro pequeños recuerdos para la familia y amigos. Me encuentro con algunos amigos del camino ya cambiados y con pinta diferente. Casi no se reconocen.
Entre estos, está la pareja de Uruguayos que venia encontrándome en la última parte del camino. Ya están con los familiares que llegaron a Santiago en carro. También encuentro a un británico y a su señora que recuerdo porque lleva la camiseta puesta de la maratón del Everest. Tomamos la selfie y hablamos de la vuelta a casa. De nuevo me encuentro a Iñaki y me comenta de otra Compostela que incluye la distancia completa recorrida. Así que me devuelvo a la Oficina del peregrino y la solicito (3 euros.)
Ya con la Compostela adicional encuentro un Chino que hizo los 750km desde St. Jean Pied de Port en 30 días. Hablamos un poco y lo felicito porque es muy poco tiempo para tal distancia.
Me devuelvo al hotel y provecho la WIFI que hay en la primera planta para consultar algo de correo y publicar las últimas fotos en FB. Ya en el cuarto empiezo a organizar las cosas para la etapa de mañana. Hablo por WhatsApp con Jorge y Patricia, mis amigos colombianos del camino. Ellos están a 2 o 3 días de Santiago por lo que convenimos vernos en Fisterra (ellos llegan a Santiago caminando y de allí toman carro para llegar a Fisterra y seguir a Portugal). La meta es llegar en 3 días a Fisterra por lo que los planes cuadran bien.
Al final del día me doy cuenta que he cumplido con la primera parte del sueño. No me canso de agradecer a la vida por permitirme llegar a Santiago y por darme el privilegio de realizar el camino sin ningún contratiempo importante. Gracias totales!!!
Continua con los días Trece y Catorce.
