Perfiles de Mujeres de 100: La Importancia y el Reto de ser Pionera en Genética Médica en el Estado de Sonora

Carolina Isabel Galaz Montoya

30 años. Soy médico, tengo una especialidad en genética médica y posgrado y alta especialidad en genética perinatal. Crecí y estudié en Hermosillo, Sonora.

Soy orgullosamente egresada de nuestra máxima casa de estudios, la Universidad de Sonora.

Cuando terminé la carrera me fui a la Ciudad México a estudiar mi pasión: genética.

Durante mi formación, tuve la oportunidad de conocer los centros de salud más reconocidos a nivel nacional e internacional. Participé en congresos nacionales e internacionales y cuento con una estancia en Baylor College of Medicine en Houston, Texas. Colaboré con uno de los centros de investigación en genética humana de más alto impacto a nivel mundial.

Todas estas experiencias crearon conciencia en mí sobre la gran oportunidad que existe en el estado para que Sonora sea pionera en estos temas.

A todo esto, ¿qué es la genética médica? Por ponerlo en palabras simples, es la parte de la medicina que se encarga del código interno de cada uno. No se trata de enfermedades que adquieres, sino de condiciones que traes desde tu concepción.

Tengo dos años de egresada y trabajando en Hermosillo, Sonora. He sido docente y he dado pláticas y cursos en el Hospital General, el Hospital Infantil del Estado de Sonora, la Universidad de Sonora, UVM, CIMA, entre otros. Empecé con estas pláticas, entre integrantes del mismo gremio médico, para generar conciencia sobre la aplicación de la genética médica en Sonora.

Yo regresé a Sonora con la intención de aplicar el conocimiento adquirido y a regresar un poco de lo que me dio el estado. En lo personal me siento muy comprometida con mi estado. Después de todo, fue ahí donde me preparé para lo que haré toda la vida. Lo mejor de todo es que recibí educación de mucha calidad y muy accesible.

Por todo esto, sí he desarrollado un sentido de pertenencia fuerte por Sonora.

Lamentablemente, mi regreso no ha sido fácil.

La rama de la genética es relativamente nueva. En Sonora tiene muy pocos antecedentes, como es el caso de mi querida colega, la Dra. Medécigo Vite, quien también ha hecho un gran esfuerzo por posicionar esta rama de la medicina en el estado. Sin embargo, aún queda muchísimo trabajo por hacer y debemos sumar esfuerzos.

Actualmente soy la única genetista perinatóloga y genetista certificada por el Consejo Mexicano de Genética Humana en Sonora.

Entonces, al ser esto una innovación, hay mucha carencia de información. Esto conlleva cierta resistencia. Es comprensible, entiendo que es difícil confiar en aquello que no se conoce.

En realidad, en Sonora están todas las condiciones para implementar la genética médica. Solo necesitamos una estructura y modelo de organización para llevarla a cabo. Claro que estas cosas no se pueden desarrollar si no hay conocimiento. El problema es que no hay conocimientos, ni de la genética ni de la problemática.

La problemática: en Sonora no hay cientos, sino miles de personas sufriendo por cuestiones genéticas que pudieran ser tratadas. Hay personas con retrasos mentales, bebés naciendo con malformaciones congénitas, gente muriendo de cáncer muy joven, niños sufriendo por problemas que un genetista hubiera podido resolver.

La necesidad que tiene la población de tener acceso a este tipo de medicina es real, tangible y comprobada.

Por ejemplo, he tenido contacto con casos de cáncer en edades muy jóvenes. Esto debido a que existía una condición genética que predispone la adquisición de cáncer. Uno de estos casos fue una mujer de 30 años, mamá. De haber sido diagnosticada por una genetista esa vida hubiera sido salvada.

Ahora su hija se ha quedado sola.

¿Cómo es posible que, pudiendo ayudar, estemos dejando que tanta gente sufra?

Ni siquiera estamos guardando evidencia de esto. No tenemos datos. Yo empecé a recopilar toda la información de los casos que he conocido, pero yo no soy suficiente.

El Registro y Vigilancia de Malformaciones Congénitas Externas (RYVEMCE) ya está guardando información de esto a nivel nacional. RYVEMCE, a su vez, es parte de una organización internacional. Nuestros hospitales ni siquiera califican para certificarse e integrarse a la institución. Porque necesitan un genetista en turno y no hay.

¿Qué tanto se puede hacer si no tenemos información? Porque tenerla es indispensable.

Hay muchos casos de enfermedades en Sonora de las cuales ni siquiera se conoce su nombre. Por esta razón, los pacientes no reciben el manejo médico adecuado. Se les impide obtener acceso a las posibilidades médicas que merecen.

Y es obvio: No se puede tratar lo que no has diagnosticado.

Con esto no quiero decir que los médicos del estado estén actuando mal. En realidad, todos están haciendo su parte.

Los pacientes van al doctor cuando se sienten mal, los médicos atienden y establecen un diagnóstico según lo que ellos saben. No es trabajo del pediatra o del ginecólogo saber de genética. Eso les toca a los genetistas.

Por eso mismo necesitamos promover la genética médica en el estado. Para que haya gente que haga ese trabajo.

En cuanto al seminario, yo creo que es una excelente oportunidad. Fue una idea brillante por parte de la Gobernadora y el Secretario de Educación. Está muy bien estructurado para darte las herramientas que necesitas o que te pueden servir en el camino de ser un agente de cambio.

Al menos para mí eso es importante. Muchas personas con las que he hablado quieren cambiar el mundo. Son personas formidables y preparadas, pero no nos enseñan cómo ser un agente de cambio, como transmitir la información, cómo causar impacto.

Todo lo que enseñan aquí te ayuda a despuntar esas cosas. Además, de manera inmediata, te coloca en una plataforma, te da a conocer y te genera una red de contactos.

Yo al regresar a Sonora quiero poner en marcha mi proyecto, ejecutarlo, pero no lo puedo hacer sola. Quiero sumar gente, necesito apoyo.

Mi proyecto consiste en la creación de una propuesta para la incorporación eficiente de la genética médica en Sonora.

Estoy haciendo este trabajo porque me inspira la frase de la gobernadora “las cosas no se hacen solas”. Si no lo hago yo nadie lo va a hacer.

Hoy me toca ser agente de cambio.

En colaboración con el Gobierno del Estado de Sonora en México, el seminario, Empoderamiento de la Mujer en el siglo XXI, es una experiencia intensiva de capacitación y empoderamiento diseñado para 100 mujeres del Estado de Sonora en Washington, D.C.