Diseño, usabilidad y experiencia de usuario: conceptos que suman por separado
Los modelos de negocio se centran cada vez más en la experiencia del usuario, en lugar de centrarse en el producto. Esta experiencia de usuario es la que acaba dando la rentabilidad a las empresas y las marcas. Por esto, las empresas líderes están cambiando su estrategia de negocio priorizando esta experiencia.
Cuando creamos productos digitales, a veces, los términos diseño, usabilidad y experiencia de usuario, se confunden. Habitualmente, se vincula el diseño con el sentido estético mientras se usan los términos usabilidad y experiencia de usuario como sinónimos. Aclaramos.
¿Qué es la usabilidad?
Diseño y usabilidad son elementos importantes dentro de la experiencia de usuario, pero la experiencia de usuario incluye otros elementos. La usabilidad es la facilidad con la que los usuarios de una página o aplicación web pueden conseguir sus objetivos dentro de la interfaz. La usabilidad se define como la finalidad de alcanzar un objetivo concreto.
Los factores clave para una buena usabilidad son: tiempo de carga, accesibilidad, innovación, honestidad, coherencia, claridad y, si puede ser, amigable con el medio ambiente.
El diseño debe tener un propósito para ser valioso en un producto digital
Sin embargo, nuestro objetivo como diseñadores debe ser crear experiencias memorables, relevantes y que aporten el mayor valor para el usuario en nuestros canales digitales y esto no sólo se consigue con la usabilidad y diseño. Defino diseño en este contexto como la estética del producto digital.
Podemos encontrar páginas web usables y con un diseño espectacular que generan grandes experiencias de usuario, pero también encontramos páginas web usables y espectaculares que no generan una buena experiencia de usuario. Este podría ser el caso de una página web bien estructurada y diseñada, pero que el tono, mensaje, contenido o vocabulario utilizado no satisface a los usuarios.
Lo que sí es complicado de encontrar son páginas web poco usables que generen buenas experiencias de usuario. Si un usuario no encuentra lo que busca de una manera rápida y sencilla, abandonará la página web y la experiencia de usuario habrá sido mala.
La usabilidad es condición necesaria para crear buenas experiencias de usuario, pero no es suficiente. Sin embargo, un gran diseño en sentido estético, por mucha importancia que le demos los diseñadores, algunas veces no está relacionado con la experiencia de usuario.
La experiencia de usuario, pues, se centra en ofrecer el contacto digital con la tecnología de manera accesible, intuitiva y, sobre todo, placentera, con la finalidad de permitir a los usuarios alcanzar sus objetivos.
Una buena experiencia de usuario mantendrá a los clientes involucrados y comprometidos, fidelizándolos hacia la marca y siendo un elemento clave para obtener una ventaja competitiva y diferencial. No importa cómo se ve tu página o aplicación si las personas no disfrutan la experiencia de interactuar con ellas.
Los diseñadores debemos tener mucha precaución en no sólo buscar lo estético pensando que esto aporta valor a los usuarios
Ejemplos de diseño no muy atractivos pero muy usables y con una gran experiencia de usuario son Amazon o Booking. Ejemplos de diseño atractivos, usables y con gran experiencia de usuario son Airbnb o Netflix . El diseño debe tener un propósito para ser valioso en un producto digital.
El producto digital no termina nunca y, una vez en funcionamiento, es importante analizar constantemente posibles mejoras, monitorizar estadísticas, métricas, objetivos y conversiones para ver lo que funciona y lo que no. De esta manera podremos testear y aplicar las mejoras en la interfaz.
Como diseñadores es primordial enfocar nuestro trabajo en el usuario y su experiencia, haciendo productos con alta usabilidad y buscar un propósito a nuestro diseño. Si quieres saber cómo hacerlo, apúntate a nuestro Máster en Diseño de Experiencia de Usuario (UX, UI).
Susanna Pujadas, Brand and Digital Product Designer.
