La Inteligencia Artificial ¿una amenaza para los Motion Graphics?
Cuando en 2001 Steven Spielberg me hizo preguntarme si un niño robot podía llegar a generar en una madre lo que un niño real, por la capacidad de reproducir el comportamiento humano, lo vi como una cuestión acertada pero al mismo tiempo muy lejana en el tiempo. Además, inocente de mí pensar que como ciencia ficción futurista era algo que no me iba a tocar a mí en ningún sentido de la vida.
Vale que en ese momento yo tenía sólo 11 años, pero es que hace un par de años cuando empezó a haber más ruido con el tema de la Inteligencia Artificial y el Machine Learning yo lo veía sólo como algo más enfocado al análisis de datos, chatbots, motores de recomendación, simplificación y automatización de tareas complejas, pero siempre todo muy relacionado sólo con la tecnología y lejano de mi campo de trabajo: la creatividad.
La democratización de la Inteligencia Artificial
Pero es que una vez más, fui inocente, porque al final nuestras herramientas de trabajo actuales dependen de la tecnología, y ha llegado el momento en que la Inteligencia Artificial empieza a involucrarse en el arte y la creatividad.
Ahora bien, esto no es algo exclusivo del 2022, es algo que se ha venido desarrollando en los últimos años, la única diferencia es que desde hace poco tiempo es mucho más accesible para un público muy grande con la generación de imágenes a partir sólo de de textos descriptivos o ‘prompts’.
Algunas de las plataformas más conocidas son DALL·E y Midjourney, en las cuales puedes introducir tus ideas con palabras y en cuestión de segundos tendrás una variedad de imágenes que se adaptan a tu descripción.
Y dependiendo de las características que escribas pueden ser
imágenes hiperrealistas o adaptadas al estilo específico de un artista (y es aquí donde se empieza a difuminar la línea de la autoría, pero esto es tema para otra reflexión). Por ejemplo, aquí les muestro el resultado luego de que a Midjourney le indiqué que generara una imagen de una Barcelona Futura pintada por Van Gogh:
O aquí otro ejemplo, donde Luciano Fasan, diseñador gráfico y de lettering, introdujo como descripción a DALL·E “Alfabeto primitivo hecho a mano”.
Y… ¿los motion graphics?
No quise pecar de inocente una vez más, y pensar que al yo trabajar con vídeo y animación no sería afectada de alguna manera por esta tecnología, porque al final si tratamos de sintetizar al máximo la definición de un vídeo o de una animación llegamos a la conclusión de que son imágenes
secuenciadas que generan movimiento. Y si ya la Inteligencia Artificial genera imágenes, pues sólo le queda secuenciarlas para generar vídeo.
Comencé mi investigación y descubrí que hay personas y compañías probando estas tecnologías y extrapolándolas a la generación de vídeos. Como un primer ejemplo, tenemos a MyHeritage que con Deep Nostalgia le da vida y movimiento a caras sólo a partir de una fotografía. O bien
EbSynth, que es una aplicación con la capacidad de aplicarle un look específico, como puede ser una ilustración, a todo un vídeo.
Os muestro esta prueba que he hecho, en la cual he obtenido este resultado habiendo invertido sólo dos horas de trabajo (la primera imagen es el vídeo original, la segunda tal cual la exportó la aplicación y la tercera con algún retoque hecho en After Effects):
Pero lo más interesante de todo esto es que, antes de verlo como una amenaza para nuestras profesiones, y quiero remarcar que entiendo de dónde viene el sentimiento, creo que podemos utilizarlo como una herramienta más y aprovecharla como una ventaja a nuestro favor.
Puede ser que consideremos añadirla a una idea que tengamos a manera de técnica para lograr el resultado final que deseamos, como lo hace la directora Karen X que combinando diferentes recursos (entre ellos la I.A.) logra resultados que son muy innovadores e interesantes.
También si tenemos que presentar un pitch para venderle la idea a un cliente y que todo el universo que estemos creando sea más visual y poder explicarnos mejor. O si queremos expandir nuestras habilidades y explorar nuevos registros como ha hecho el director creativo Quentin Lengelé, que
ha conseguido generar inclusive créditos iniciales de una serie a partir del uso de la generación de imágenes.
Lo que os quiero comunicar, es que vivimos en un mundo que está constantemente evolucionando a pasos agigantados, por lo que tenemos que aprender a adaptarnos para no quedarnos obsoletos. De momento, la creatividad y la dirección siguen quedando en nuestras manos, por lo
que os invito a que veáis esta tecnología como una manera de facilitarnos la vida para crear y no como nuestro sucesor.
A final de cuentas, imaginaros que en la década de los 20’s le hubiesen mostrado a la generación de la edad oro de Disney cómo utilizar After Effects, seguro hubiesen hecho cosas aún más impresionantes de las que lograron, ¿o no?
Gabriela Pinto. Motion Graphic Artist y profesora del Máster Online en Motion Graphics de SHIFTA.
