Reino Unido: Por qué la nueva ‘Dama de Hierro’ llegará fundida a las Elecciones

Paloma de Salas
upday ESPAÑA
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6 min readJun 5, 2017
Los británicos esperan ansiosos la vuelta a los colegios electorales / ADRIAN DENNIS/AFP/Getty Images

Los británicos regresan a las urnas el próximo jueves, apenas un año después del referéndum del Brexit, dos desde que Cameron fuera escogido primer ministro.

Gran Bretaña activó formalmente el proceso de salida de la Unión Europea el 29 de marzo. Tres semanas después, Theresa May sorprendió al país al anunciar un adelanto electoral. La primera ministra no fue elegida en las urnas, sino por su propio partido tras la renuncia de David Cameron. May negó hasta en seis ocasiones el adelanto electoral, pero finalmente decidió someterse a la evaluación pública.

Una ciudadana de Bristol reacciona ante la convocatoria: “Estás de broma. ¡Otra vez no!” / BBC

Lo hizo, según ella misma, para afianzarse en su autoridad a la hora de negociar con Bruselas las condiciones del ‘divorcio’. Aquel día, las encuestas le eran muy favorables: los Tories aventajaban a los laboristas por 20 puntos. De hecho, cuestionada hace unos días por su decisión, una fortalecida May aseguraba que tuvo “las pelotas de convocar elecciones”.

Pero lo que parecía un camino de rosas para la líder conservadora se ha tornado en un calvario lleno de espinas que ha conseguido debilitar su ventaja: el partido laborista está ya a sólo 3 puntos de diferencia en los últimos sondeos.

El Brexit, protagonista en la política y la opinión pública

El tema estrella del debate político ha sido el Brexit y sus negociaciones. May ha pedido a los votantes que vean estos comicios como “una reposición del referéndum”, en el que el Partido Conservador representa un Gobierno “fuerte y estable”.

Por su parte, Corbyn defiende la permanencia del país en el Mercado Único y los derechos de los ciudadanos europeos residentes en Reino Unido. Mientras que el Partido Liberal Demócrata aboga por la celebración de un segundo referéndum.

May llegó a afirmar que un divorcio de Europa “sin acuerdo es mejor que con un mal acuerdo”, a lo que su principal contrincante respondió que “no tenerlo es un mal acuerdo”.

La inmigración es la cuestión de fondo. May ya fue ministra del Interior, y prometió en la campaña de 2010 reducir la cifra de inmigrantes, pero no lo logró. Así que ahora su programa político, donde afirma querer reducir la inmigración “a las decenas de miles”, ha sido muy cuestionado por la imposibilidad de ejecutarlo.

A la actual primera ministra se le reprocha, además, su defensa de un ‘Brexit duro’, pues el año pasado hizo campaña a favor de la permanencia en la UE. “Dijiste que quedarnos en la Unión Europea nos haría más prósperos. Ahora dices que salir nos hará más prósperos. ¿Cuál es tu posición?”, le preguntaron en un programa de televisión. May reitera una y otra vez que lo importante es “respetar la voluntad del pueblo”, que votó a favor de salir.

Los votantes sienten que el Brexit es el tema principal de los comicios. Así lo indican los sondeos que YouGov ha realizado durante el mes de mayo: el 63% considera el asunto más importante el referéndum, mientras que el 49% sitúa la prioridad en la Sanidad, el 35% en Economía y el 34% en Inmigración.

Theresa May, sobre el terrorismo: “Ya está bien”

La campaña se ha visto salpicada de lleno en su recta final por el tercer atentado terrorista que golpea al Reino Unido en tres meses. El domingo, May endurecía su respuesta contra el yihadismo. “Ya está bien”, aseveró al anunciar el refuerzo de las medidas para combatir el problema. La oposición en seguida criticó al Gobierno por los recortes al presupuesto de la Policía. Corbyn exigió hoy mismo su dimisión por la repercusión en la prevención de ataques de este tipo.

La crisis del Servicio Nacional de Salud

Aunque el referéndum eclipsa el resto de propuestas, Gran Bretaña se encuentra inmersa en una grave crisis en el Servicio Nacional de Salud (NHS) y las desigualdades sociales. Según se denota de los sondeos, el escándalo del impuesto Tory a la demencia, que May retiró horas después de su presentación, supuso un varapalo en la imagen pública de la líder.

Los votantes reprochan a May que recorte los presupuestos en Sanidad, mientras que ella señala que “el dinero no cae de un árbol mágico”. Los servicios sanitarios atraviesan una crisis provocada por los recortes, la falta de personal para atender a los pacientes y la negativa de May a abordarla. Incluso la Cruz Roja alertó este invierno de la pésima situación en los hospitales británicos. Si a esto se suma que en torno a 55.000 trabajadores sanitarios son inmigrantes, un ‘Brexit duro’ amenaza el rendimiento de los hospitales.

La estrategia del Partido Laborista pasa por la supresión de tasas universitarias, en un intento por seducir al votante joven, mientras que los conservadores proponen aumentar la inversión en las escuelas privadas de educación Secundaria.

El fantasma de los sondeos amenaza la mayoría conservadora

Cuando se convocaron las elecciones, la gran mayoría de analistas anticipaba el fin de Corbyn. El laborista, muy cuestionado por su ausencia en la campaña a favor de permanecer en la Unión Europea, resucitó y afirmó que no dimitiría ante un posible desastre electoral para su partido. Su actitud desafiante, unida a una mala campaña de May, ha desembocado en que, a tres días de la votación, la distancia que separa a los conservadores de laboristas sea tan sólo de tres puntos, según algunas encuestas.

Fuente: Datos de ICM, YouGov

Las encuestas fallaron en los últimos comicios del país. En el caso del referéndum, nadie supo predecir el resultado a favor. Y en los comicios de 2015, tampoco se anticipó una mayoría absoluta para los conservadores. Las empresas han optado por introducir nuevos modelos estadísticos, con el fin de mejorar su credibilidad.

El gran fallo, aunque desde la Asociación Británica de Sondeos, señalan que el margen de error sí anticipó el resultado del referéndum, es la dificultad para predecir los datos de participación. El verano pasado, muchos jóvenes no acudieron a las urnas. Ahora, las encuestas contemplan la posibilidad de que dos tercios de los votantes entre 18 y 34 años se decanten por Corbyn, lo que podría explicar el ascenso imparable de los laboristas.

La mala campaña de Theresa May ha hecho que el público vaya perdiendo confianza en la primera ministra. Hay hasta una una canción donde se le llama mentirosa, que ha logrado ascender al cuarto puesto en las listas de éxitos británicas.

La campaña, rodeada de polémica por los cambios de parecer en las políticas propuestas, se ha vuelto en la recta final inasumible para May. Tal es el punto, que el dato resaltado por los comentaristas políticos en un debate con siete partidos fue la ausencia de May, que se ha negado a debatir con el resto de fuerzas políticas en televisión. La inquina a la que está sometida Theresa May podría traducirse en la pérdida de la mayoría conservadora en el Parlamento.

Jeremy Corbyn ya ha sentenciado que no va a pactar si gana las elecciones.

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