Abordando el COVID-19 en Honduras
5 formas en que USAID está respondiendo a la pandemia
La pandemia de COVID-19 ha dificultado la vida de todos en todo el mundo, pero para los hondureños, sus efectos devastadores se vieron agravados por los huracanes Eta e Iota en noviembre de 2020.
Antes de la pandemia, Honduras tenía la segunda tasa de pobreza más alta de la región de América Latina y el Caribe después de Haití, con aproximadamente la mitad de los hondureños viviendo con menos de $5,50 al día.
Las condiciones empeoraron con la pandemia, ya que la economía se contrajo aproximadamente un 9 % en 2020. Las mujeres descendieron aún más en la escala económica y tienen más probabilidades que los hombres de experimentar desempleo. Durante el año 2021, casi un tercio de la población enfrenta hambre severa, con 614.000 personas en situaciones de emergencia justo por debajo del nivel de hambruna.
USAID apoya la entrega y el despliegue de vacunas en toda la región y también proporciona casi $50 millones en asistencia directa para el desarrollo de COVID-19 a los hondureños. Nuestro trabajo fortalece los programas de pruebas y prevención, apoya el crecimiento económico y ayuda a las organizaciones a adaptarse al nuevo entorno.
Aquí hay cinco formas en que USAID está trabajando para aliviar los desafíos presentados por la pandemia de COVID-19 en Honduras.
1. Convertir vacunas en vacunaciones: hasta la fecha, Estados Unidos ha donado más de 3,5 millones de dosis de vacunas contra el COVID-19 al país y continuará apoyando al pueblo hondureño en su camino hacia la recuperación. Las donaciones de vacunas de EE. UU. representan alrededor del 40 % del total de vacunas administradas en el país, y nuestra asistencia ha ayudado a llegar a la mitad de la población con al menos una dosis. USAID se está asociando con el Ministerio de Salud de Honduras para entregar y administrar las vacunas contra el COVID-19 lo más rápido posible, lo que incluye fortalecer el equipo de la cadena de frío y facilitar la capacitación en todas las regiones. Nuestro trabajo también está ayudando a abordar las dudas sobre las vacunas en el país al ayudar al Ministerio de Salud a responder a las preocupaciones de la comunidad.
2. Prevención de la propagación de COVID-19: USAID entregó alrededor de $41,800 en equipo de protección personal, incluidos artículos de limpieza y máscarillas, a instituciones gubernamentales y organizaciones de la sociedad civil. La Agencia también ayudó a crear planes de acción basados en la comunidad para prevenir la propagación de COVID-19. Desarrollamos guías de bioseguridad para organizaciones que brindan servicios de violencia de género, incluidos los albergues para mujeres en San Pedro Sula y La Ceiba, y ayudamos a capacitar a su personal en la implementación de la guía.
3. Mejorando las pruebas de COVID-19: Para fortalecer la prevención, detección y respuesta de COVID-19, USAID proporcionó 12 hospitales, 32 centros de triaje y tres laboratorios con suministros y equipos médicos, por un monto de $1.6 millones en financiamiento. Nuestras contribuciones incluyeron 44 monitores de signos vitales, 282 estetoscopios, 130 camas de hospital, 58 computadoras de escritorio y casi 11,000 galones de desinfectante para manos. USAID también está aumentando la capacidad de los laboratorios para procesar de manera correcta y eficiente las pruebas de COVID-19. La Agencia ayudó a los laboratorios nacionales de virología a mejorar los procedimientos de prueba, apoyó la construcción de tres laboratorios de biología molecular y proporcionó 100.000 pruebas de PCR y kits de extracción. USAID también capacitó a más de 240 empleados de laboratorio en las mejores prácticas.
4. Fortalecimiento del crecimiento económico: para ayudar a las empresas hondureñas a aprovechar el crecimiento de las compras en línea en medio de la pandemia, USAID capacitó a 100 asesores en tecnología de la información y las comunicaciones, quienes luego capacitaron a 300 pequeñas y medianas empresas en comercio electrónico y soluciones tecnológicas financieras, como plataformas de pago. Durante el 2021, USAID capacitó a 1000 pequeñas y medianas empresas adicionales, lo que generó al menos 1000 nuevos puestos de trabajo y $1,5 millones en ventas adicionales.
5. Apoyo a docentes y estudiantes: USAID desarrolló contenido en línea para promover el aprendizaje social y emocional y el bienestar de estudiantes, docentes y directores para hacer frente al estrés derivado de la pandemia mientras las escuelas están cerradas. USAID también ha apoyado al Ministerio de Salud en el desarrollo de la Estrategia de Regreso Seguro a la Escuela. Este protocolo beneficiará a por lo menos 80,000 docentes a nivel nacional.
Además de estas actividades, la Agencia está capacitando a proveedores de salud pública para mejorar el tratamiento de casos leves a graves de COVID-19. La pandemia continúa siendo uno de los mayores desafíos que el mundo haya experimentado. USAID está en primera línea brindando soluciones que salvarán y mejorarán las vidas de los hondureños.
