Vecinos de Caballito protestan por tráfico, suciedad y ruidos en el Club Ferrocarril Oeste

Los residentes del barrio reclaman por el tránsito, la basura y el ruido excesivo durante eventos deportivos y musicales del club.

Delfina Bidegain
UtopiaUAI
6 min readJul 29, 2024

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Recital de la banda Miranda en el Estadio del Club Ferrocarril Oeste, por detrás se encuentran los edificios que vibran durante el show. Fuente: Gustavo Correa y Luana Gonzalez Kaiber.

Los vecinos de Caballito expresado su creciente preocupación ante los problemas de inseguridad, el crecimiento de basura, el ruido excesivo y el aumento de tráfico que experimentan los días en que se realizan recitales, eventos políticos o partidos en el Club Ferrocarril Oeste.

La convocatoria de estos eventos generó un impacto negativo en la calidad de vida de la comunidad local desencadenando una serie de reclamos.

Cuando se realizan recitales en el club, los vecinos cercanos deben soportar no solo ruidos extremadamente fuertes que llegan a mover sus objetos y ventanas durante la noche, sino también los ensayos que comienzan por la mañana.

Este nivel de ruido constante y excesivo afecta gravemente el bienestar de los residentes, impidiéndoles descansar y llevar a cabo sus actividades cotidianas con normalidad.

Además, la realización de recitales complica la llegada de los habitantes a sus hogares. Las calles Avellaneda y Martín de Gainza son cerradas durante las horas previas a los recitales, lo que provoca un gran congestionamiento en las cuadras cercanas al club.

Este desvío de tránsito y la congestión generan molestias para los vecinos, quienes deben enfrentar largas demoras y dificultades para acceder a sus casas.

La basura y la inseguridad son también grandes preocupaciones para los vecinos durante los eventos deportivos, musicales y políticos. Luego de que finalizan, las calles alrededor del club quedan repletas de basura, especialmente de botellas de vidrio que representan un gran peligro.

En la mayoría de los casos, no se realiza la limpieza necesaria al día siguiente, dejando los residuos acumulados.

En respuesta a estas situaciones, los vecinos han intensificado sus protestas y reclamos.

Adriana Cristina Carrera, vecina del barrio de Caballito que reside frente al Club Ferro, comentó: “Lo más problemático son los recitales que se dan a un volumen completamente agresivo, se escuchan perfectamente dentro de las casas. El tráfico se corta tres horas antes, los colectivos y los autos no pueden pasar, lo que crea bastantes problemas en la zona. El Club trae un montón de inconvenientes que no se ven a simple vista”.

María Inés Mori, vecina del barrio de Caballito que vive a pocas cuadras de la cancha del Club Ferrocarril Oeste, expresó: “Siempre es muy complicado estacionar en la zona, pero los días de partidos y recitales es imposible. Queda mucha basura luego de los eventos, pero la suciedad en este barrio es constante, nunca vienen a limpiar. Caballito es un barrio muy sucio”.

Edificios del barrio de Caballito cercanos al Club Ferrocarril Oeste que sufren vibraciones durante los recitales. Fuente Delfina Bidegain.

Constanza Sánchez, vecina que reside en la cuadra al lado del club, relató: “Es como tener la cancha en el patio, las ventanas vibran durante los recitales. Cuando hay partidos es mucho más tranquilo, excepto si es un partido muy importante o un clásico. Aunque viene mucha gente, a los 20 minutos terminado el evento se vacían las calles”.

Además de los eventos deportivos, políticos y recitales, se realizan matinés para niños y adolescentes entre las 21:00 y las 00:30 horas, lo cual también provoca varias molestias a los vecinos.

La residente Constanza Sánchez aclaró: “Cuando hay matinés tiemblan todos los vidrios. Es agotador que siempre haya algo. Si no es un partido, es un recital, un evento político, una matiné, el colegio, las colonias de niños y demás”.

Los ruidos extremadamente altos, los fuegos artificiales y los petardos utilizados durante los eventos en el Club Ferrocarril Oeste también afectan gravemente a los animales que viven en hogares cercanos.

Estos estruendos provocan un gran sufrimiento en las mascotas, generando estrés, ansiedad y en muchos casos, comportamientos peligrosos.

Gabriela Bajula, vecina que vive sobre la cuadra Martin de Gainza aclaró: “Los ruidos no solo los sufrimos nosotros, sino también nuestras mascotas, sobre todo cuando tiran bombas de estruendo, petardos y fuegos artificiales”.

Además expresó “La basura que dejan es increíble, sobre todo cuando le prestan o le alquilan el previo a algunos gremios como la Asociación de Trabajadores del Estado o La Central de Trabajadores de la Argentina, los cuales vienen en muchos micros y provocan un gran congestionamiento”.

Cuando se realizan eventos políticos, las personas ingieren mucho alcohol y se roban los tachos de basura para usarlos como refrescantes, les ponen hielo para vender las bebidas”, agregó Gabriela.

Bandera que colocó la Asociación de Trabajadores del Estado cuando realizo un evento político en el Club Ferrocarril Oeste. Fuente: Delfina Bidegain.

Los inconvenientes no se limitan solo a los eventos o al momento en que finalizan, sino que también se extienden a las previas de los partidos. En estos momentos, los hinchas del club se reúnen para festejar, tomar alcohol y hacer ruido, generando un ambiente caótico y ruidoso en las calles cercanas.

Victoria Demaria, vecina del barrio de Caballito, comento: “Los hinchas se juntan en la Plaza Paysandú cuando hay partidos. Llevan bombos, hacen ruidos, toman cerveza y queda mucha basura. En los actos políticos queda una suciedad impresionante. El año pasado se realizaron muchos eventos políticos por las elecciones y los vecinos nos vimos muy afectados por ello”.

Según las bandas o artistas que se presentan en el Club, los recitales varían en cuanto al nivel de ruido, pero generalmente son más ruidosos cuando se trata de bandas de rock o grupos con un público que salta y canta enérgicamente.

Este tipo de shows afecta considerablemente a los vecinos, quienes deben soportar el estruendo y la vibración en sus hogares.

Alicia Castro, vecina que vive hace 40 años en Caballito cerca del club, explicó: “A veces vienen bandas ruidosas y como consecuencia nos vibran todas nuestras ventanas y objetos. Hace muchos años cuando se presentó la Renga los vecinos pensamos que era un terremoto y sentimos un gran mareo”.

Entrada del Club Ferrocarril Oeste donde se realizan largas filas para los recitales o partidos. Fuente: Delfina Bidegain.

La mayor parte de las quejas de los vecinos surgen cuando se realizan eventos políticos en el Club. Estos eventos traen consigo un incremento significativo en la inseguridad, la suciedad y el ruido en el barrio.

Alicia además aclaró: “Suelen venir muchos sindicalistas a eventos políticos y son los peores. Llegan en varios micros y llenan las calles, lo que nos provoca muchísima inseguridad a los vecinos”.

Miriam Sinelli, vecina que reside en el barrio de Caballito hace 12 años, relató “Tal vez el problema económico hizo que el club alquilara sus espacios para eventos políticos, pero eso hace que venga mucha gente en micros con bombos, platillos, megáfonos y dejen demasiada basura que nadie junta. Realmente caminar el barrio al día siguiente de un evento es imposible”.

“Cuando hay recitales se vuelve a repetir la misma fisonomía en el barrio. Basura, destrozos, botellas, cerveza, latas por todos lados. Todo el barrio se ha quejado, se han elevado quejas a la comisión directiva del Club del Ferrocarril Oeste y a la comuna, pero nunca hemos tenido respuestas”, agrego Miriam.

La vecina además explicó que las propiedades y edificios cercanos al Club Ferrocarril Oeste han bajado su precio por todos los inconvenientes que conlleva vivir allí.

Los residentes de Caballito están descontentos con las molestias que provocan los eventos realizados en el Club Ferrocarril Oeste.

La vida diaria en el barrio se ha transformado en una lucha continua. Las quejas se centran no solo en la perturbación de sus rutinas, sino también en la creciente inseguridad y el deterioro del entorno.

A pesar de las numerosas quejas y solicitudes a las autoridades y al club, no hubo respuestas. La comunidad local exige medidas efectivas para gestionar los eventos de manera correcta.

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