La efedrina hace temblar a funcionarios del kirchnerismo

@verticenews
VÉRTICE
Published in
4 min readJul 20, 2016

En Vértice contamos sobre la red de tráfico de efedrina que surte al Cártel de Sinaloa desde Argentina. Uno de sus principales protagonistas, Ibar Pérez Corradi, fue capturado tras cuatro años de evasión. Fue preciso que el kirchnerismo saliera del poder para encontrarlo donde ya se sabía que estaba. El ex prófugo ahora está hablando. Y mucho. Su dedo apunta a Aníbal Fernández, un importante aliado de Cristina Kirchner

Por Oscar Medina | @oscarmedina1

Larga y peculiar es la trayectoria de Aníbal Fernández en la política argentina. En 1991 hizo su primer juramento en un cargo público al ocupar la intendencia de Quilmes, municipio del Gran Buenos Aires; apoyado por el entonces gobernador Eduardo Duhalde y por Carlos Menem. De ahí en adelante, llegó a ser ministro o formó parte del Ejecutivo de varios presidentes: Duhalde, Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner. Con ella alcanzó sus mayores cuotas de poder, pero a su lado también le salpicó el escándalo que hoy vuelve a ponerle en entredicho: el de la ruta de la efedrina y los homicidios de tres empresarios vinculados a ese negocio ilegal.

Fernández fue ministro de Interior al llegar Néstor Kirchner a la Casa Rosada. Y Cristina lo heredó. Lo nombró titular de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos; jefe de ministros, y tras una suerte de receso, la mandataria lo llamó nuevamente a la primera línea para encargarle la Secretaría General de la Presidencia y luego, en 2015, devolverlo al puesto de Jefe de Gabinete de Ministros de la Nación.

Si bien es su palabra contra la de un ex prófugo de la ley, la imagen de Aníbal Fernández ha resultado muy golpeada. Ibar Pérez Corradi se las arregló para evadir a la justicia desde 2012 hasta el 19 de junio de este año cuando fue capturado en Paraguay y deportado posteriormente a Argentina. A Pérez Corradi se le acusa de ser el autor intelectual del triple asesinato de supuestos rivales quienes lo habrían desplazado del control de una operación muy rentable: surtir de efedrina a los laboratorios de drogas del célebre Chapo Guzmán, una historia contada en Vértice: La conexión argentina del Cártel de Sinaloa.

Luego de 30 horas declarando ante una jueza federal, trascendió a la prensa que Pérez Corradi insiste en algo que ya había advertido incluso antes de su retorno a Buenos Aires: que Aníbal Fernández estaba implicado en el tráfico de efedrina. De acuerdo a la versión del diario La Nación, Pérez Corradi dijo durante esas audiencias que a través de intermediarios pagaba importantes sumas de dinero al entonces ministro de Interior para asegurar protección a sus operaciones con el cártel mexicano. También reafirmó que Sebastián Forza, uno de los asesinados, le confirmó que Fernández era a quien apodaban “La Morsa”, el personaje del gobierno al que había que agradecerle que el negocio de la efedrina se mantuviera sin mayores sobresaltos.

Según su testimonio llegó a pagar más de 3 millones de dólares durante un semestre de 2007. Esta semana le contó a la jueza que ese año se reunió en diferentes ocasiones con Sergio Villordo –en el momento intendente de Quilmes- quien habría actuado como representante de Fernández a la hora de negociar y cobrar el dinero.

También denunció que en 2007 estuvo en contacto con dos oficiales de la Policía Federal conectados directamente con Fernández para asegurarse la protección requerida. Contó que el canon mensual inicial por esta garantía era de 5 mil dólares y que se fue elevando hasta alcanzar los 100 mil. El negocio se hizo cada vez más riesgoso, por lo que tuvo que solicitar un servicio más confiable y personalizado. Los policías le indicaron que debía entenderse con Villordo para contar con la bendición completa de Fernández. Y así lo hizo.

Villordo, actualmente diputado, inmediatamente respondió a los señalamientos. Pero lo hizo -19 de julio- a través de un comunicado de prensa en el que afirmó que jamás tuvo trato alguno con Pérez Corradi. Y aprovechó para aclarar que desde 2007 rompió relaciones con Fernández, con el kirchnerismo y cualquiera de sus representantes y funcionarios.

Otro salpicado ha sido el ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia, AFI, Oscar Parrilli, quien fue llamado a declarar ante un juez federal como sospechoso. El juez consideró importante saber por qué la AFI no capturó antes a Pérez Corradi si contaba con información precisa sobre su paradero desde 2015. Los datos eran tan confiables que sirvieron ahora para dar con su escondite en Paraguay. Parrilli estaba al frente de la AFI cuando el 4 de agosto de 2015 un testigo indicó, con mucho detalle, dónde podían encontrar a quien en el momento era el prófugo más famoso y aparentemente buscado de Argentina. Pero Parrilli se tomó su tiempo y ahora se dice que esto fue parte de un acuerdo para proteger a Aníbal Fernández.

Parrilli, por supuesto, lo niega todo. Y en declaraciones a la radio despacha el asunto afirmando que al traficante de efedrina lo están usando –“con fines políticos”- para enlodar a figuras del gobierno de Cristina K.

Del testigo, que ya prácticamente dejó de ser anónimo, se sabe que fue el instalador de servicios de internet y cámaras de seguridad en los departamentos en los que vivió Pérez Corradi desde 2012. Y lo contó todo: direcciones, números de teléfonos, detalles de los inmuebles y hasta algunos de los hábitos del prófugo y de su esposa. Lo que entonces no se usó durante la administración kirchnerista, cuatro años más tarde ayudó a capturar al traficante y responsable de tres homicidios.

Carlos Broitman, abogado de Pérez Corradi, aportó validez a las versiones de prensa: “Sabemos que se han filtrado copias de la declaración”. Y es difícil tomar sus palabras como inocentes: por lo que se ha visto hasta ahora parte de la estrategia parece ser aceptar la participación del acusado en el tráfico de efedrina, destapar secretos de la red de involucrados y tratar de dejar en segundo plano los asesinatos. Este es un caso en desarrollo y es previsible que depare algunas sorpresas.

--

--

@verticenews
VÉRTICE

Buscamos explicar nuevos ángulos de los hechos más importantes, descubrir historias que no han sido contadas, e investigar al poder sin concesiones.