Omar Velásquez
Que una vez escribió un libro y se convenció de ser escritor
Omar escribe ficción y reflexión, a veces las entremezcla, nos deja pensando. Lo lleva haciendo desde mucho antes, imaginamos, pero en Vestigium nos ha acompañado por poco más de un año. Con el agradecimiento de quien le debe todo a alguien, dejamos el tiempo a Omar, que se introduce mejor con sus propias palabras.
Así que, Omar:
«Una vez escribí un libro y me convencí de que era escritor. Luego salieron algunos más.
»En otra ocasión emití una opinión y quedé convencido de que tenía una. Desde entonces escribo artículos.
»¿Que quién soy? Un entusiasta de las letras y un creador de historias.
»¿Y que dónde me pueden encontrar? Acá y allá: En mi sitio web, y algunas varias redes sociales.»
Libros, muchos libros
Quizá decir que Omar escribió un libro es poco. En Vestigium nos enteramos de El Juego de Assurd, que queda mejor descrito en las palabras del propio Omar:
Este libro nace de recopilar algunas historias previamente publicadas en mi blog, más un relato que fue publicado en un periódico y otro relato ganador de un concurso en un sitio de Medium. Sirvan disculpar el exceso de información, si cuento esto es para tratar de convencerles de que el libro vale la pena, que es la única razón justificable que encuentro para hacer alarde de galardones, por pequeños que estos sean.
Y junto con ello, Omar ha publicado las novelas Abriendo los ojos (2010) y Algunos para siempre terminan antes (2019); las antologías El Paseo (2011), El Bibliófilo de Bilgi (2013) y El Mendigo de Modrost (2018); y el compendio de ensayos Recuerda siempre cuánto te amo (2009).
Omar, en Vestigium
Estamos sumamente orgullosos de contar con algunas de las muchas historias cortas que Omar ha escrito. Historias que tratan de aquello que por lo general dejamos a un lado: Los sueños, el más allá, el miedo que tenemos a perdernos y no encontrar el camino. Dejamos el tiempo a Omar, entonces, y tres de nuestras historias favoritas.
La noche vestía un manto negro que lo arropaba todo. La luna descansaba. Los faroles apenas alzaban la vista. Las calles habían ahuyentado todo dejo de vida.
Supongo que está la cara que ponemos frente a todos, de día, sonriendo e inventando excusas, y está el rostro real de noche, ese que tiene miedo, que no sabe qué hacer, que a veces sólo quiere disfrutar pero no puede dejar de pensar. Y supongo que aunque no estemos perdidos en el sentido literal, que aunque tengamos un apartamento, comida en el refri, y un set de amigos, podemos estar muy perdidos en el sentido real, figurativo. Mi Puerta, una historia bellamente escrita, nos habla de esto.
— Se les da tan bien juzgar — continuó — . Tienen tres datos y deducen la historia. Ven un acto de alguien y la tolerancia se les esfuma. No comparten una opinión y ya tienen enemigos. Su especie sí que da tristeza. […] Aprendieron tan poco.
Una historia que merece y exige toda nuestra atención, Caminata nocturna es ficción punzante que entre terror y comedia nos abre los ojos. Sales de la historia pensando lo que Phillip K. Dick alguna vez escribió: Realmente vemos astigmaticamente. A veces, ensimismados, perdidos en nuestra propia historia, no vemos más que lo que somos, o queremos ser. Y nos engañamos a nosotros mismos, tan lamentablemente.
Aprendieron tan poco, dice uno de los protagonistas en la historia. Y quizá luego de leer la historia, y leer esa frase en específico, quieras escuchar esta maravillosa historia de Andy Weir. De una extraña manera, creemos que están relacionadas.
Soy Ángela es especial por su introspección y misterio. Omar Velásquez nos cuenta una historia irresistible a través de Ángela, la protagonista principal de esta historia, y quizá secundaria en la vida de Mauricio.
Si llegaste hasta aquí, has llegado a la tercera iteración de El Salón de la Fama en Vestigium. Espera la siguiente este jueves, 24 de octubre.
A medio camino, seguimos aquí gracias a ustedes.
