Te recuerdo
Recuerdo poco de tenerte cerca. Recuerdo la oscuridad y las sombras. Tu respiración al lado y las preguntas internas. Recuerdo lo nervioso que estaba, lo mucho que quería besarte. Lo guapa que te vi, ese día y todos.
En retrospectiva, quizás sí lo deseaste todo. Quizás cuando sugeriste ir a descansar solo usabas eufemismos. Quizás cuando me propusiste recostar los asientos me pedías más. Quizás yo estuve sordo y aún lo estoy.
Pero no, mentí: lo recuerdo todo. El tinte de tus vidrios y como te brillaban los ojos bajo los reflectores de aquel sótano enterrado. Te quise besar y tenerte toda. Te quise ser honesto y desbocarme en ti, como andén que colapsa, una presa que estalla. Pero…
Bueno, tenías novio. O decías tenerlo. O habían cortado hace poco, que todavía no lo superabas. Ya lo olvidé. Que necesitabas tiempo y te lo di. Ya hoy, tanto año después, sé que lo que necesitabas no era tiempo.
Era decisión.