Sobre la muerte, el amor y el adiós I
La muerte
Recientemente me encontraba hablando con Mar (una chica muy especial), y esa parte mía, dedicada a cuestionarme mi realidad, hacerme preguntas y comenzar a filosofar no tardó en hacerse presente y en vez de “huír” o decirme que “sí” a todo, esta chica me siguió el juego y comenzamos a pensar juntos.
Hablemos de la muerte, esta siempre ha estado presente a lo largo de mi vida, me atrevería decir que crecí con ella, y a diferencia de muchas personas, no le tengo miedo, le tengo un respeto y un amor secreto.
Pensar en la muerte propia me trae paz y un alivio, saber que al final hay un descanso eterno (sin hacer referencia a ninguna religión).
Se que algún día mis sentidos se apagarán y dejare de pensar, como en un teatro, cuando el telón se cierra y la obra termina.
Para Mar, la muerte es más de lo mismo, ella lo entiende como parte de un proceso, como algo inevitable, “todos morimos y es lo más humano y natural que tenemos, todo desaparece, las estrellas, planetas, no lo controlamos, solo sucede”, “entonces ¿por qué tenerle miedo a algo que en algún punto va a pasar?”
