Turquía, un país con prejuicios… 1/3

Cheel Tenorio

Primero, les explicaré un poco el contexto en el que vive Turquía. Es un país ubicado en Europa Oriental hasta Asia, sí, geográficamente está ubicado en dos continentes. Entre sus países vecinos se encuentra, Siria, Irán, Irak, Bulgaria y Grecia. Es un país, que está lleno de historia, si decides visitarlo conocerás las culturas derivadas de los griegos, persas, romanos, bizantinos y otomanos.

Su política interior, no soy experta, pero solo te puedo decir lo siguiente: Ataturk es como el “padre de la patria”, amado por unos, odiado por otros. En el año 2016, recibió un “golpe de Estado”; algunos señalan fue un autogolpe. En la víspera de Año Nuevo de 2017 Estambul sufre un atentado en una discoteca (bastante reconocida en la ciudad) . El actual presidente no es bien querido por el pueblo Turco, o al menos no por los jóvenes. Además, tiene problemas con el pueblo de los “kurdos”.

¡Ah! olvidaba, es un país musulmán, sí, esos que no dejan manejar a las mujeres, ni tampoco vestirse como quieren, y tiene matrimonios arreglados.

Sí, hasta ahora estoy segura que pensarás

“Siria, Irak, atentados, golpes de Estado, musulmanes; ¡jamás visitaría Turquía!”.

Sin embargo, estoy aquí para contarte de un país, que si eres amante de lugares que te dejan sin respiración, definitivamente Turquía es ese lugar!.

Te contaré brevemente, cómo llegue a este país. Soy mexicana,

abogada, recién egresada, y en el año 2017 me dio una crisis existencial y decidí irme unos meses a Italia, con mi hermana. Como algunos de ustedes sabrán solo puedes estar en zona Schengen por un periodo máximo de tres meses, así que debía salir del Italia por quince días para no pasarme del límite de 90 días, ya que mi vuelo salía a los 125 días. Mi opción era ir a Croacia, sin embargo, era invierno y considere que un país como éste debía visitarlo en primavera. Posteriormente, en el mapa vi “Turquía”. Una amiga, cinco meses antes había subido fotos de este lugar, así qué le pregunté, ¿cómo le había ido?, me contestó que fuera!. Posteriormente, recordé que otra amiga se había ido de intercambio por seis meses a Estambúl, así que le pregunté de igual forma y simplemente me dijo que me enamoraría de ese país. No lo pensé más, pensé, ¿qué tan malo es conocer otro país?. Compré un vuelo y listo!.

Cabe mencionar que era mi primer viaje largo, completamente sola, sin familia, sin amigos, en un país que muchas personas me dijeron “es peligroso”, y que no sabía qué esperar. Así que, bueno, llegué al aeropuerto de Sabiha Gocken, pagué una camioneta para que me acercara a mi hotel y listo!

Eran alrededor de las 20:00, oscuro, y al momento de salir rumbo al hotel, lo primero que pensé fue

¡se parece a la Ciudad de México!,

edificios corporativos, avenidas grandes, tráfico, centros comerciales, una ciudad totalmente modernizada.

El chófer me dijo que bajara, que habíamos llegado a mi destino, así lo hice, sin embargo, no veía mi hotel, como pude, le pregunté al chófer y cómo pudo me dio a entender que tenía que caminar sobre una calle. ¿Se imaginan?, sola, a las 21:00 pm, sin internet, sin teléfono, una calle oscura, hombres en la calle bebiendo; y yo, con mi maleta, caminando súper segura de mi misma, aunque en mi interior moría de miedo!…pero bueno, en menos de cinco minutos, vi mi hotel; entré y me sentí a salvo.

Una vez ya acomodada en mi hotel, decidí ir a cenar tranquilamente,

así que, pregunté al recepcionista por algún lugar cercano, me indicó que en la siguiente calle había varios lugares para comer, así que, salí del hotel camino a probar un platillo turco, sin embargo, mi sorpresa fue que no llevaba ni cinco metros fuera del hotel, y escuché a un hombre detrás de mí diciéndome algo (obviamente no entendí), así qué, lo primero que hice fue correr a la tienda más cercana y refugiarme; ¿qué hubieran hecho ustedes?. Una vez en la tienda, pensé en que no iba a “arriesgarme”, así que solo compré un yoghurt y un pan y esa fue mi primera cena en Estambul.

Esa noche en mi cuarto, recuerdo estar preparando mi itinerario para el próximo día, el cual, consistía en regresar al hotel antes de las 20:00 pm; aún sigo insistiendo que es el error más grande que pude cometer. Me habían dicho tantas cosas malas de Turquía, que los hombres no eran respetuosos (musulmanes), que había guerra, tantas cosas que había leído en las noticias que solamente esperaba tener unos 15 días tranquilos, en conocer lo más cercano al hotel posible, y por supuesto, tener precauciones para todo. Sin embargo, en los próximos días, les contaré todas las bellas experiencias que muero por compartir con todos ustedes! Espero poder animarlos a viajar a un país que te llena de cultura, empatía, tolerancia, respeto y de más. Así que por mientras, les compartiré solo un poco de lo que fue mi viaje a este hermoso país!

¡Ah, mi nombre es Cheel!

Por: Cheel Tenorio
Instagram: @cheellaut