Testimonios de Nutrimos El Salvador
Estas son las historias de algunos participantes de la campaña. Conócelos y aprenderás más sobre esta gran iniciativa.
Anderson Ismael
Anderson Ismael de 1 año de edad es participante de Nutrimos El Salvador desde que estaba en el vientre de su madre, Flor Ruiz de 28 años, quien ingreso al proyecto en el año 2016.
Durante su embarazo Flor fue diagnosticada con bajo peso para la edad gestacional por lo que fue incluida en el proyecto. En palabras de Flor: “Mi peso mejoró y cuando ya el niño nació el cereal me ayudaba, me bajaba bastante leche. Ahora le hago atoles, refrescos y lo incluyo en sus comidas”. Anderson es un niño saludable y Flor está feliz de ver que su hijo está creciendo adecuadamente.
Karen
Karen, madre de 27 años, reside en un caserío de Santa Ana. Su familia está formada por su esposo, su mamá y su hija de 4 años. Hace 3 ½ años su hija, quien entonces tenía 6 meses de edad, fue la primera en ser beneficiada con el programa Nutrimos El Salvador.
Durante un año y medio su hija consumió cereal fortificado y éste le ayudo a mantener un peso adecuado para su edad. Este año Karen está embarazada y por segunda ocasión es beneficiaria del proyecto. En palabras de Karen: “El cereal me ayuda a aumentar de peso ya que me diagnosticaron que no aumentaba de peso de acuerdo con mi tiempo de embarazo”. Además, menciona que el cereal también le está ayudando a su bebé al aportarle muchas vitaminas y otros nutrientes necesarios para que él crezca y tenga un buen peso al nacer.
Lidia
Lidia es una madre de 24 años reside en Santa Ana. Ingreso al programa cuando tenía 8 meses de embarazo, ahora es madre de un hermoso y saludable bebé.
Lidia nos comenta que tuvo complicaciones infecciosas después del parto de su bebé, por lo cual permaneció ingresada en el hospital por más días de lo normal y requirió tratamiento con antibióticos. Ella añade que el consumo de cereal en preparación de refresco y atol fortaleció su lactancia materna mejorando su confianza y aumentando la producción de leche materna.
También comentó que la modalidad de bono canjeable por cereal fortificado en el supermercado más cercano le es favorable porque el supermercado está muy cerca de su casa y la tarjeta es fácil de utilizar. De esta forma puede continuar utilizando sin demora el cereal fortificado.
Yanira
Yanira es una madre de 26 años, reside en Santa Ana. Su familia está formada por su esposo, su suegra y su hijo de 2 meses de edad.
Yanira fue invitada a participar del programa Nutrimos El Salvador durante uno de sus controles prenatales en la Unidad de Salud, cuando le diagnosticaron anemia. Su médico le explicó que el cereal fortificado contenía hierro, minerales y vitaminas y que este alimento le ayudaría a superar su problema de anemia y a tener un bebé sano y con peso adecuado.
Actualmente, Yanira alimenta a su bebé con lactancia materna y ella continúa consumiendo el cereal fortificado. “Me siento muy feliz pues el cereal me ayuda a que me baje bastante leche para alimentar a mi hijo”, comentó Yanira.
Brenda y Nataly
Brenda, madre de 30 años de edad, residente del municipio de Jiquilisco asistía a sus controles de embarazo en 2016, cuando fue invitada a participar del proyecto Nutrimos El Salvador. “Durante uno de los controles el doctor me dijo que la bebé no estaba ganando peso, y me preocupé por mi bebé. Fue entonces comencé a tomar el cereal que me dieron y en las siguientes ultrasonografías ya se veía la ganancia de peso”, mencionó Brenda con una sonrisa en su rostro.
Ahora Brenda es madre de Nataly, una niña saludable de 10 meses de edad que continúa recibiendo el cereal: “Ahora ella es quien lo toma (el cereal), le gusta mucho en refresco, yo le doy en su tacita todos los días. Gracias al cereal, en sus controles de todos los meses el doctor me dice que su peso siempre está dentro de lo normal”, agregó Brenda.