Formador de formadores. Parte 1: Nacen los líderes.

Gómez, Adolfo (Zenta Group)
<Código Zenta>
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4 min readJan 2, 2019
Grupo de líderes de proyecto dentro de Zenta Group.

Ya hace un tiempo que nosotros nos hemos empoderado de un concepto que muchas veces se considera algo utópico sobre todo en la realidad de lo que hoy son las empresas chilenas, el LÍDER.

Primero lo primero, hablemos de cómo se creó éste mismo en Zenta Group.

Hace algunos años atrás, inicié con un equipo de Desarrollo en donde tenía el rol de Jefe de Proyecto y éramos alrededor de unas 10 personas, todos desarrolladores y llevábamos entre 5 o 6 proyectos en lo que en ese momento era LAN (LATAM hoy), donde veíamos las áreas de Carga y Aeropuerto prácticamente.

Aquí llega un momento en el que se me presenta la oportunidad y desafío de poder tomar más proyectos y de tener mayor importancia con el cliente y dentro de la compañía, y era mi equipo el factor diferenciador del poder lograrlo o no.

En este punto me percato y me doy cuenta que simplemente no daría abasto solo como Jefe de Proyectos, esto considerando que siempre hemos querido hacer las cosas bien y ser los mejores, y eso también significa saber nuestros límites. Esto no significaba que no tomaría el reto, pero debería hacerlo de una manera distinta.

En este aspecto, casi todos los del equipo eran desarrolladores jóvenes, primerizos y de la gran mayoría este era su primer trabajo, por lo que no tenían tanta experiencia, recién tenían 1 o 2 años trabajando y algunos mucho menos, pero, el lazo que habíamos generado como equipo, era de cercanía y de confianza, independientemente del tipo de cargo que existía y de la experiencia en general.

Una vez que se presenta esta situación, empezamos a tomar la gran mayoría de los proyectos en LAN a nivel operacional y una estrategia de mi parte, porque teníamos bastantes trabajos en proceso, fue el de ascender al equipo, con todo el riesgo que eso implicaba, pero, pasaron a ser líderes aquellos que eran los desarrolladores más fuertes y a su vez, a ser formadores de equipos.

Quizás lo más fácil hubiese sido haber incorporado gente externa como jefes, pero considerando lo consolidado del equipo, de este casi clan, sabía que podría haber significado un problema.

Pero, la visión y la filosofía que nosotros tenemos como Zenta, es hacer precisamente eso, formar, brindar la oportunidad a los talentos, a aquellos que están y han estado con nosotros. Porque formar, implica mucho pero mucho más que capacitar por un par de semanas.

La verdad, es que considero que esto funcionó muy bien.

¿Hubo mucho esfuerzo?

Sí.

Creamos no solo equipos completos, no solo sale a la luz y se establece el concepto como tal de líder, sino que también, se generaron cargos como el de Coordinador o el de Líder Técnico, áreas que nos aseguran la calidad, estar a la vanguardia y sobre exigirnos para siempre tener objetivos por cumplir. Se estructuraron mejor las cosas, para que nuestros proyectos salieran exitosos.

Crecimos.

Llegaron muchas personas, de 20 pasamos a ser fácilmente entre 50 a 60 en solo un par de semanas y eran tiempos en los que se respiraba, se comía y se dormía Desarrollo.

Aún así, el aprendizaje fue bien rápido, ellos como líderes tuvieron una formación acelerada, lo cual, era parte de mi manera de hacer las cosas, de enseñarles, soltarlos, plasmarles esa cultura que desde siempre hemos tenido y que es la que considero nos ha llevado a donde estamos. Entendiendo además que yo también me estaba formando en mi nuevo cargo.

Por darles un ejemplo, si bien yo era aquel que lideraba este equipo inicial, para mi es importante el no atribuirme todos los éxitos solo a mi como Jefe de Proyecto, no, mi norte nunca ha sido ese, somos un equipo y es un trabajo de complemento y esfuerzo el poder lograr las metas, por eso buscaba de cierto modo, darles los créditos a ellos o que ellos tomarán iniciativas…

Como dice una frase: si caminas solo, iras rápido; si caminas acompañado, llegarás lejos.

Y sí, siempre he querido llegar lejos, lo más lejos posible, después les contaré sobre eso.

Ese fue mi modus operandi, de poder en cierto aspecto entrenarlos como líderes, porque no es solo ser la cabecilla de un proyecto o trabajo, en Zenta ser líderes va mucho más allá, y va de la mano con nuestros valores, nuestra esencia.

Es un tema extenso y que me motiva bastante, por eso dejaré la receta de cómo hicimos las cosas en Zenta, para otra Story.

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