Rocky vs Drago;
¿Cómo competir contra las grandes empresas?

Zuñiga, Mario (Zenta Group)
<Código Zenta>
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5 min readDec 14, 2018

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Entrenador Duke: ¡Lo heriste!
Rocky: ¿Sí?
Entrenador Duke: Está preocupado. ¡Le abriste la piel…lo lastimaste! ¡¡No es una máquina, es un hombre!! ¡¡Queremos ganar más que él!! ¡SIN DOLOR!
Rocky: ¡SIN DOLOR!

Sin duda, una de las películas que más me ha marcado en mi vida ha sido la saga de Rocky. La escena en particular de la 4ta entrega cuando Rocky finalmente hiere a Ivan Drago, es la mejor forma de representar nuestro desafío desde Zenta; cómo lograr pelearles a las grandes empresas tecnológicas, y convertirnos en un referente de la industria IT nacional y por qué no, de la región.

Nuestros inicios no fueron distintos a los de Rocky; desde los fríos y complicados barrios de Filadelfia, extrapolados a un grupo de amigos chilenos que buscaba emprender y ser independientes hace más de 11 años atrás.

Desde ese entonces compartimos algo en común con el “semental italiano”; la pasión y el convencimiento de que podíamos hacer las cosas diferentes.

¿Se han fijado que cada vez que Rocky se sube al ring, su mirada es más de “temor” que de un “ganador”? Eso es porque en el fondo Rocky sabe de lo que es capaz, de su resistencia, de sus ganas, de su corazón…pero sin alarde, siempre humilde.

Lo mismo nos ocurre con Zenta cuando vamos a competir contra empresas grandes como Drago; máquinas con tecnología de punta, amplia experiencia, trayectoria y clientes de renombre. A pesar de esto, de enfrentarnos constantemente contra gigantes, hemos logrado llegar muy lejos, impulsados por las ganas de resistir hasta el último round y aguantar la lluvia de golpes que significan 15 asaltos en el ring.

“I MUST BREAK YOU”

Lo sabemos; dentro del complicado cuadrilátero IT, Drago está representado por grandes y exitosas multinacionales de renombre. Sin embargo, comparten una misma lógica con el boxeador soviético; “no es una máquina, es un hombre!”, le decía su Entrenador a Rocky.

Las empresas finalmente las hacen las personas, y si somos capaces de que nuestras personas, nuestros equipos, nuestros talentos tengan un foco y objetivo en común, podemos pegar tan fuerte como queramos… y de eso estamos seguros… nos han pegado fuerte…pero estamos pegando de vuelta con más fuerza aún… y Drago está asustado.

Debemos salir al ring con el principio básico de supervivencia del ser humano; matar o morir. Los grandes pueden darse el lujo de “equivocarse”, de perder un par de millones de dólares al año, perder clientes importantes, dejar cuentas sin mayor atención. Nosotros no. Esa protección extra en el rincón no existe, nadie lanzará la toalla al cuadrilátero para salvarnos. Cada cliente y cada proyecto suma.

Debemos estar siempre alertas, y salir a pelear cada round como si fuese el último.

Aprender, Entrenar, Ejecutar, Repetir…

Dos principios básicos que hemos aprendido estos años a cuidar y desarrollar en Zenta tienen que ver con el resultado de nuestro trabajo; eso que hoy se percibe como nuestro sello, nuestra marca:

  1. Que los proyectos sean desarrollados con gran calidad.
  2. Que todas las iniciativas estén acompañadas siempre de la cercanía que nos caracteriza con nuestros clientes.

Estas características son las que nos han llevado al éxito, conformando un equipo sólido de trabajo y con importantes desafíos sobre nuestros hombros. Un equipo que al igual que Rocky, tuvo que autodescubrirse, conocer sus fortalezas y trabajar todas sus debilidades y paradigmas, teniendo como eje central la colaboración y la nula lucha de egos.

De hecho, cuando iniciamos como este equipo pequeño, todos desarrollábamos, todos éramos analistas, todos éramos UX, todos éramos TODO.

Ese equipo que sembró al inicio, fue el que hizo un arduo trabajo y que promovió el éxito, gracias a esa inigualable garra que es parte de nuestra esencia, ganando confianza y empujando nuestros propios límites.

Cuando piensas en grande, piensas en Personas…

La principal motivación de Rocky, era demostrarse a él y al mundo, que podía, que simplemente podía.

Rocky nunca pensó en pequeño, pensaba en grande…y muchas veces era el único que lo creía. En Zenta pensamos igual; no es soberbia sino motivación extrema de que podemos y queremos desafiar el status quo de las grandes multinacionales. Y eso lo logramos poniendo a nuestras personas, nuestro talento como eje central… y los clientes lo están percibiendo… están apostando a Rocky contra Drago.

Muchas veces las grandes empresas no requieren presentarse, son “autoexplicables”, conocidas a nivel mundial, su reputación las precede.

Nosotros continuamos haciéndonos un nombre por nosotros mismos, potenciando no solo nuestros contactos, canales de comunicación y redes sociales, sino que demostrandolo en el ring; haciendo las cosas bien, generando buenas experiencias digitales para nuestros clientes, siempre empáticos y cercanos con ellos.

#trueStory: Solo para darles un ejemplo; hace unos días nos llegó́ un correo de un cliente que decía: “Primero, muchas gracias por todo el trabajo, dedicación y cariño…”. Cariño; una palabra tan sagrada y muchas veces reservada solo para el ámbito personal, que verla en un contexto laboral sin duda nos llena de orgullo.

Refleja nuestro espíritu de querer hacer las cosas bien, sembrar con el resultado para luego cosechar este tipo de testimonios que muchas veces son tan esquivos en el mundo tecnológico.

“La pelea no termina hasta que termina” …

¿Qué nos depara el futuro? En el mediano plazo convertirnos en una empresa global y seguir dando la pelea tal cual lo hemos hecho. Apuntamos a ser una compañía reconocida en la región, potenciada por el apoyo de nuestros clientes y trabajo colaborativo con nuestros partners.

Nuestra fórmula para lograrlo es simple: PENSAR EN GRANDE + SOÑAR EN GRANDE.

Desde Chile desafiamos a los grandes… somos una empresa que tuvo sus inicios como cualquier startup o emprendimiento, siempre mirando hacia adelante, nunca hacia atrás…

Ya lo decía Rocky “no son tan importantes los golpes que das, sino los que eres capaz de recibir y seguir avanzando…”

En Zenta seguimos hacia adelante…

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