La autopista del futuro

Elon Musk ¿te suena el nombre? si la respuesta es sí, posiblemente estés al tanto de la revolución que se está gestando en torno a los vehículos eléctricos (EV por sus siglas en inglés).

Y si aún no te habías enterado, la Unión Europea planea, al menos, tener 30 millones de coches eléctricos en 2035, aunque algunos entendidos en la materia, dicen que la cifra puede ser aún mayor. Para aprovechar esta tendencia, en este Zumito te hablaremos de un ETF con los principales players del sector.

El ETF del que te hablamos es el iShares Electric Vehicles and Driving Technology (XETRA: IEVD) uno creado recientemente por BlackRock, que está compuesto por un grupo de empresas que tienen alguna relación o bien con los EV o con tecnologías para la autoconducción. Y si, no sólo Tesla está metido de lleno en esta aventura. De hecho, estamos hablando de un fondo con 124 empresas de 18 países distintos.

Estamos dando mucho la chapa con datos y más datos. Así que vamos al grano, empecemos a explorar las razones que lo hacen una inversión sumamente apetecible. ¡Allá vamos!

Lo que nos gusta

Todo la cadena de valor en un solo sitio

Una de las grandes ventajas que presenta este ETF, que replica al STOXX Global Electric Vehicles & Driving Technology NET, es que nos da acceso a toda la cadena de valor de la industria. En otras palabras, entre sus 124 acciones tiene empresas productoras de baterías, componentes y por supuesto fabricantes de coches.

El tener acceso a toda la cadena de valor simplemente nos va a ayudar a poder favorecernos de la potencial revalorización que tendrá el sector a cada uno de sus niveles. Al tener empresas cuyo negocio no está sólamente enfocado en EVs, también nos permite amortizar el riesgo que toda industria relativamente nueva trae consigo.

Si echamos un vistazo, a las 10 principales posiciones del fondo nos encontramos con que incluso la segunda es la empresa china BYD, que es uno de los fabricantes de baterías más importantes. Las baterías son quizá la pieza en este puzzle con un mayor nivel de complejidad y con un potencial enorme, ya que será lo que haga que los EVs sean autónomos al nivel de los coches de combustibles fósiles de la actualidad.

También destacan APTIV (fabricante de componentes y piezas para lamobilidad verde), Infineon (un fabricante de chips, esto de cara a la autoconducción) y la ya conocida Samsung (que también está envuelta en la fabricación de baterías).

Además de brindarnos acceso a toda la cadena de valor, también nos ofrece una exposición a una amplia variedad de mercados. Además de Estados Unidos y Europa, nos ha gustado mucho ver a empresas de India, China, Korea y Japón; que son mercados donde quizá veremos una adopción masiva más rápida de los EVs.

¿Es un sector con tanto potencial en realidad?

Cuando nacen tecnologías tan disruptoras, siempre está en el aire la duda sobre ¿es esto un hype? o ¿realmente hay futuro y valor en este sector? Obviamente, estamos justo al comienzo de la adpción de la tecnología y queda bastante por recorrer pero hay datos que nos hacen ser optimistas.

Como podemos ver en el gráfico anterior, los EV han pasado de ser en 2011 meramente un capricho, a ser el 4.2% del mercado de vehículos en 2020; con un crecimiento interanual de 43%. Claramente, esto es una tendencia al alza.

Además de la reacción del mercado ante esta nueva oferta de vehículos, los gobiernos están haciendo esfuerzos regulatorios e incentivos para hacer que los EVs se conviertan en el futuro próximo en la principal fuente de vehículos privados; una iniciativa influenciada por las agendas verdes globales.

Una mezcla entre la experiencia y la irreverencia

Si entramos a ver en detalle las empresas que componen el fondo, nos encontraremos dos vertientes, empresas relativamente jóvenes como Tesla y otras ya establecidas y legendarias como Ford, GM, KIA, etc.

Esto se debe a que disruptores como Tesla han empujado a las empresas más establecidas a unirse a la ola del EV. Nos gusta esta mezcla porque nos permite tene un balance interesante entre empresas con altísimo potencial de crecimiento y otras cuya estabilidad puede ser una garantía.

Además de los fabricantes de coches legendarios, tenemos empresas como Intel, Garmin, Eaton, Johnson Electric, y otras más que nos dan una exposición interesante a negocios consolidados con una visión amplia de avanzar tecnológicamente.

Esto es el equivalente a tener a una estrella como Cristiano y a una joven promesa en el mismo equipo.

Lo que no nos gusta

Rentabilidad y pérdidas millonarias

Tesla apenas se hizo rentable este año. BYD ha bajado su rentabilidad en un 69%, y así podríamos seguir en una larga lista de problemas de rentabilidad de las empresas que se adentran en el sector EV.

Esto es debido al gran esfuerzo económico que conlleva el I+D para desarrollar esta alta tecnología y al tiempo que deben someterse las empresas sin percibir ganancia alguna, hasta que sacan una línea de EVs.

Sin duda que para un ETF centrado en este sector esto es una amenaza a tener en cuenta ya que estamos al principio de un ciclo y esta será una inversión a muy largo plazo.

Un largo camino por recorrer

Como hemos explicado en los puntos anteriores, la fiesta del EV acaba de empezar. Esto significa que en el camino encontraremos sorpresas muy gratas que lanzarán al ETF a la luna y obstáculos enormes que lo devolverán a Tierra en un pis-pas.

Por eso, si eres un inversor a medio plazo, quizá deberías pensártelo dos veces antes de entrar en este ETF. Sin bien es cierto se ha revalorizado un 30% desde que salió al mercado en 2020, puede que su explosión no suceda hasta bien entrada esta década.

Target

Si hay algo que tenemos claro, es que esta es una inversión a largo plazo, al menos 5 años. Aunque sabemos que es un sector marginal en la actualidad que será el principal método de transporte en el futuro, no sabemos cuánto podemos tardar hasta llegar a ese punto; aunque también es cierto que las mayores ganancias las veremos mucho antes de que eso suceda.

Teniendo esto en cuenta, creemos que para 2026 este ETF puede tener un precio por participación de 31.82€, una revalorización de 384% en 5 años con respecto a su actual valor de 6.55€.

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