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Prioridades

Alejandro Varas

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Llevo 4 meses tratando de hablar sobre la importancia de la disciplina pero creo que mi falta de disciplina este tiempo no me da la autoridad para discutir al respecto.

Creo que a todos nos ha pasado, tenemos mucho qué hacer y mucho por resolver a diario. Muchas veces no escogemos bien nuestras batallas y perdemos la guerra por no saber priorizar.

Actualmente tengo 3 actividades importantes en mi rutina diaria:

  • Dirigir la operación y las cuentas de la agencia digital de la que soy socio.
  • Dirigir un equipo publicitario de alto rendimiento para una importante multinacional que trabaja en el país, y
  • Ser capacitador e instructor de marketing digital en varios institutos de formación continua de Guayaquil.

A eso debemos sumarle que busco cualquier otra oportunidad que considere interesante para mi y que debo encontrar tiempo para hacer cosas no relacionadas con el trabajo: ir al cine, leer algo, ir al gimnasio, tener vida social o simplemente no hacer nada por el bien de mi salud mental.

Si me preguntan cómo lo logro, ni yo sé la respuesta. Simplemente me enfoco en el objetivo y voy detrás de la meta propuesta y trato de encontrar la mejor manera de hacerlo y que todo esté en orden y armonía. En lo laboral y en lo personal.

Ahora, el problema de vivir en Guayaquil es que el entorno laboral te traerá muchas barreras que frenan o cambian el rumbo de tus planes. Y todo es urgente, todo en la vida de las personas es urgente y no saben el por qué.

A veces la gente por no saber como lidiar con la incertidumbre de una tarea o la presión que trae cumplir tu trabajo diario y asumen que todo debe ser hecho de inmediato y piensan que es urgente. Ni que fuéramos el cuerpo de bomberos y cada tarea catalogada como urgente un incendio.

Lo que es importante es raramente urgente y lo que es urgente rara vez es importante — Dwight Eisenhower

El ex-presidente de los EEUU, Dwight Eisenhower, creó una matriz para la toma de decisiones según sus prioridades. Al tener formación militar y haber sido un líder de estado en una época crítica de la historia de ese país, su método tiene mucha credibilidad y me ha servido en la práctica.

Visto en developgoodhabits.com

Voy a explicar superficialmente cómo funciona, hagan clic en el enlace e investiguen, pero en resumen te sirve para identificar qué es importante y urgente para actuar inmediatamente, qué es importante para planificarlo y qué es poco importante y poco urgente para delegarlo o simplemente eliminarlo de tus responsabilidades y poder enfocarte en la meta.

El método es tan sencillo que podríamos dibujar la matriz en una hoja e ir ordenando las actividades o pendientes por prioridad hasta que lo podamos hacer mentalmente y ganar suficiente práctica como para dominar el arte de las prioridades.

Por eso la experiencia me ha enseñado que lo único urgente en esta vida es lo que tiene que ver con la salud o postergar la muerte lo que más se pueda, pero no voy a hablar de esas cosas aquí. Así que todo lo demás lo planifico y ejecuto según la importancia y el beneficio que trae a mis actividades.

Si es un objetivo a corto plazo lo planifico para actuar de inmediato y si es uno a largo plazo trabajo en un plan de acción que me permita llegar a la meta. Lo mismo con el descanso, si es una actividad de alta intensidad la recompensa es de igual proporción.

Esto no lo sé porque soy un genio del manejo del tiempo y los recursos, todo lo contrario, lo sé porque muchos proyectos y tareas de todas mis actividades me han traído valiosas lecciones que me han enseñado que para ser disciplinado y eficaz hay que desarrollar metodologías y saber escoger las batallas.

Pablo Arosemena-Marriott, líder del gremio más grande del Ecuador, empresario y alguien que considero un ejemplo empresarial. Explica en sus talleres del manejo del tiempo que no hay una sola metodología perfecta para el manejo del tiempo sino una serie de mejores prácticas que dependen de la realidad de cada uno para ser implementadas, medidas y ajustadas constantemente.

De sus talleres rescato en este artículo 2 puntos clave para cualquier plan que tengamos y queremos realizar:

  1. Haz una descarga de todo lo que tengas en tu mente (o brain dump) para organizar tus ideas y metas, y
  2. Si las actividades más importantes de tu día son muy grandes, debes separarlas o destrozarlas en actividades más pequeñas, medibles en el tiempo y alcanzables.

Si comenzamos con estos dos puntos, el manejo del tiempo y la organización de prioridades va a ser más fácil con el tiempo y eventualmente podremos sacarle provecho a este recurso que no es nuestro y muy escaso.

Personas como Bill Gates, Jeff Bezos e Elon Musk tienen las mismas 24 horas que cualquiera de nosotros sin embargo saben como priorizar sus actividades. Hay algo que debemos aprender y aplicar de lo que hacen para asegurar que el éxito llegue gracias a los esfuerzos que realizamos.

Si ellos que no se consideran extraordinarios pueden hacerlo ¿por qué no nosotros?

Grant Cardone, maestro de las ventas y autor de uno de mis libros preferidos, The 10x Rule, explica que podemos maximizar nuestro rendimiento diario si maximizamos nuestros esfuerzos a pesar que no tengamos dinero, recursos o contactos.

En mis palabras hay que “darle bala” a toda oportunidad que se nos presente hasta conseguir lo que queremos, si no llegamos a la meta, buscar otro rumbo hasta que el resultado se dé o haya un mejor objetivo que perseguir.

El tiempo es escaso y a la vez necesario para crear, producir y mantener buenas cosas en nuestra vida, entonces definir prioridades no es solo para el espacio de trabajo sino en nuestros hogares también. Por eso es necesario dejar de lado malos hábitos y distracciones que nos impidan ser más productivos y mejores personas a diario.

Debemos descubrir que nos hace sentir bien pero nos impide ser mejores, qué vicios, qué distracciones improductivas tenemos que nos hacen olvidar la meta personal, profesional o espiritual de cada uno. Sacando esos obstáculos del camino el objetivo se puede ver más cercano.

¿Quieres más tiempo para tu familia? Deja de ver realities y haz cosas con ellos. Lo van a apreciar.

¿Estás gordo y pones excusas para bajar de peso? Deja de culpar a tu rodilla y sal a caminar por lo menos. Tu cuerpo te lo agradecerá.

¿Quieres ser millonario? Mira qué oportunidad de negocio tienes frente a ti y dale bala hasta que llegues a la meta o en el mejor de los casos, superes tus expectativas. Los empleos y familias que serán beneficiadas por tu iniciativa te lo agradecerán con el tiempo.

Eso es lo beneficioso de tener objetivos y saber priorizar, si te fijas una meta que puede sonar inalcanzable en un escenario pesimista igual obtendrás un resultado que estará por encima de tu realidad actual.

Creo que por eso me tardé 4 meses en escribir esto, no por falta de disciplina sino por falta de prioridades en mi 2019.

Benjamin Hardy, psicólogo candidato a un PhD. y especializado en teoría de la motivación, explica que debemos evaluar nuestros progresos personales y profesionales cada 90 días. Es la mejor manera de saber si vamos por el camino correcto o no, o peor aún, si le estamos permitiendo a alguien más determinar cómo debemos llevar nuestras vidas en casa y en el trabajo.

Entonces, ¿sabes por dónde empezar para tener claras tus prioridades para lo que resta del año?

Ya creo saber cuáles son las mías y siento que voy tarde, en 90 días les contaré pero entre tanto escribiré más temas que les puede interesar, lo prometo.

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Alejandro Varas

Emprendedor y publicista digital. Me gusta la comida. Internet es mi cuarta pared.