Desaparecer

Marzo 2024

A menudo, las circunstancias nos ponen en situaciones en las que habríamos deseado no estar. El dicho “tierra, trágame” expresa el intenso deseo de no haber cometido, no haber observado o no haber sido partícipe de acontecimientos que nos rodean y suponen una vergüenza y que nos colocan en una posición un tanto precaria. Es entonces cuando quisieramos, al menos, que nadie nos mirara.

Pero no es solo la vergüenza la que nos pone en esa tesitura. Es posible que la falta que hemos cometido sea de una dimensión tan sobrecogedora que la única solución que pudiera complacernos sería la de volar, la de huir tan rápidamente que nadie en absoluto percibiera nuestra presencia en el lugar, cuanto menos nuestra participación en cualesquiera que fueran los hechos.

Perdernos sería una bendición en ese caso. Sin que ni siquiera nosotros fuéramos conscientes de qué posición ocupamos en el espacio-tiempo, fuera de una realidad que rechazamos o que nos rechaza, completamente ajenos a ella. Quisiéramos olvidarnos y que nos olviden y dejar que todo siguiera su curso, simplemente.

Se pierden personas, se olvidan hechos e incluso se traspapelan pruebas. Se desvanecen en el tiempo, ocultos por la niebla de la memoria, extraviados de la historia, aunque se busquen sin descanso hasta hallarlos de nuevo. Desaparecidos.

Porque este mes os proponemos poder encontrarnos en vuestros relatos sobre desaparecer. Así, esperamos que encontréis entre 200 y 400 palabras sobre el tema y que las publiquéis el lunes 25/03 entre las 0:00 y las 23:55, con mención a @divagacionistas y con el hashtag #relatosDesaparecer. ¡No os lo perdáis! Más info aquí.